En esta semana que cierra hay varios acontecimientos internacionales muy estrechamente relacionados que requieren, por supuesto, un estudio profundo que en un corto artículo como éste resulta imposible analizar, incluso, ni esbozar cada uno de ellos. Sólo podré mencionarlos.

Pero en razón de la necesaria batalla de ideas y de la guerra de cuarta generación, a la que nos obliga a avocarnos el imperio villano y depredador, debo verter unas ideas a propósito del tour político de inspiración hegemónica de la señora Clinton, sobre todo por Colombia, su reducido "patio trasero", donde EEUU tiene 7 bases militares enfocadas hacia Venezuela, Ecuador y Brasil, pero también hacia Bolivia, Argentina, Paraguay y Uruguay, con el apoyo lacayo, por ahora, de Chile y Perú. Los pueblos lo saben y en su momento pasarán la cuenta si no lo han hecho y si encuentran un líder capaz de liderar como lo hacen en ese grupo de hermanos aliados que ante el imperialismo deciden hacer la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).

 Y luego me apoyaré en GIS XXI y reportes de prensa de ABN para aclarar la mente de quienes la tengan en la penumbra, como la de Clinton.

 LA DIALÉCTICA ENTRE PUEBLOS, LÍDERES E IMPERIO

La injerencia de EEUU en la región latinoamericana es contra la democracia y la dignidad. Así ha sido por más de 100 años.

Fue la idea que volvió a recorrer el mundo surgida desde el corazón político del pueblo venezolano: el Comandante Chávez, quien es voz, pasión y fuerza de la Revolución Bolivariana porque une y reúne al pueblo del Libertador Simón Bolívar quien lo lleva en su seno, en su alma, en los tuétanos, de forma cada vez más consciente y apasionante.

Solamente hay que ver la expresión de esos miles de jóvenes y adultos trabajadores agrupados en cooperativas de producción alimenticia en el acto donde Chávez leyó las abyectas palabras de la representante del imperio contra Venezuela para percatarse del rechazo popular, sea por considerarlas agresivas o por considerarlas ignorantes, esas falacias de la canciller imperial, expresadas ante los nuevos gorilas de América Latina que se jactan de ser los aliados israelitas del continente, cuando en realidad son los lacayos chupamedias de la región.

Decía Marx refutando a Hegels que la historia se repite, pero una vez como tragedia y otra como farsa. En América Latina no habrá otro Israel porque el pueblo colombiano no es como el israelí y sus vecinos son sus históricos hermanos. Juntos harán imposible que surja ese otro Israel.

Muy sugerente fue  cuando apreciamos la fuerza de las expresiones de esos miles de trabajadores con la que respondieron a la firmeza de las palabras de Chávez en defensa de Venezuela ante las agresiones de Estados Unidos.

Así se va consolidando “la conciencia de la clase obrera para sí”, diría Lenin, que es la misma conciencia socialista de labrar la Patria para todos y por el bien de todos, diría también José Martí.
 
EL IMPERIO Y SUS LACAYOS CONTRA VENEZUELA

"La señora Hillary Clinton volvió a agredir al gobierno venezolano arremetiendo a través de un medio colombiano, contra la democracia y la dignidad del pueblo del Libertador Simón Bolívar", denunció luego la Cancillería desde la Casa Amarilla en un preciso y puntual Comunicado.

Los guerreristas Santos, Padilla, y el demagogo Uribe, sonreían a sus anchas, dentro y fuera de la Casa de Nariño, oyendo o recordando las infames palabras de Clinton contra la verdadera realidad venezolana.  Pero fuera del palacio presidencial la realidad colombiana es otra.

Cuando los colombianos comenzaron a leer los titulares de la prensa colombiana reportando el guión preparado para la encantadora Hillary de que “el pueblo venezolano está sufriendo”, la mayoría se preguntaba ¿Y en qué mundo está la señora que no sabe nada de Venezuela?¿cómo puede ser canciller una señora con esas lagunas y defectos?, otros pocos corrieron a llamar a sus familiares en Caracas o Ciudad Bolívar para corroborar lo que decía la señora gringa, y algún que otro loco o loca fue a poner los boletos de regreso a Colombia a sus familiares que viven “sufriendo” en Venezuela para regresar “al reino de la felicidad” colombiano, precisamente donde se han encontrado fosas repletas de asesinados por los paramilitares protegidos por el ejército colombiano y donde a diario se desplazan centenares de campesinos obligados por los narcoempresarios o empresarios ambiciosos de tierras fértiles.

Claro, en estos últimos casos la respuesta fue tajante y única: ¿están locos? ¿cómo vamos a regresarnos al infierno? si aquí en Venezuela tenemos servicios de salud y de educación gratuitos y gasolina casi regalada para irnos todos los domingos para las playas con cavas y plata en los bolsillos para comer donde sea.

Y así continuaron los hermanos colombianos y colombianas respondiendo porqué no querían regresar a Colombia. Les relataron a sus familiares que aún cuando hay problemas en los barrios, las autoridades respetan muchos a las comunidades organizadas y junto a ellas arreglan, les dan protección, las asisten, las atienden, y no las maltratan como en Bogotá o Barranquilla. Además, los medios de prensa bolivarianos venezolanos nos ofrecen los micrófonos para expresarnos, para decir nuestras ideas y estamos agradecidos. ¡Para Colombia no regresamos hasta que esos gorilotes se vayan del gobierno! Respondieron definitivamente a sus familiares colombianos.

Continuando con la firme respuesta de Venezuela, se debe destacar la condena al tono prepotente e injerencista de la Secretaria de Estado al referirse a la libertad de expresión en Venezuela, Ecuador o cualquiera de los países de nuestra región, y el rechazo a que desde Estados Unidos se pretendan dictar normas para el funcionamiento de nuestras democracias. Esto es válido para América Latina como para Asia, Eurasia y África donde también el imperio inmoralmente quiere dictarles pautas.

EL CASTIGO IMPERIAL A BIELORRUSIA E IRÁN

Precisamente, aquí se relaciona otro acontecimiento muy sugerente. Hoy también hemos conocido que el presidente de EEUU renovó las sanciones a Bielorrusia por su democracia socialista, casi al mismo tiempo en que el Consejo de Seguridad de ONU acordó firmar las nuevas sanciones contra Irán por el asunto nuclear.

Tanto en Irán como en Bielorrusia, sus líderes se limpiaron “algo” con las sanciones. “La boca”, según Amadineyad. En el Caribe se dice lo mismo pero usando otra palabrota, aunque para el caso es lo mismo. En uno u otro país “la vida sigue igual” diría algún joven de la convulsa década de los 60. Y es verdad, los pueblos de Irán y Bielorrusia siguen su vía pacífica hacia el desarrollo.

Ahora, ¿qué podría estar sugiriendo eso?.

Pues bien, tanto unas como otras sanciones tienen una carga de “castigo ejemplarizante” más que “castigo efectivo”, a dos potencias, no competitivas frente a frente con EEUU, como pudiera ser el caso de Rusia o China, pero que, como esas, han desafiado al imperio en su propia “zona de influencia”, diría el tristemente famoso Foster Dulles, cabeza del “tanque pensante” que dio vida a la doctrina estadounidense de “la contención del comunismo” y al nacimiento de la llamada “guerra fría”.

Irán y Bielorrusia son dos países parte de esa cadena de apoyo a Latinoamérica para independizarse de los tentáculos del imperio norteamericano, y éste se siente en el deber de castigarlos, por supuesto, para tratar de frenarlos y al mismo tiempo aterrorizar a otros con que les pudiera pasar lo mismo si se enfrentan a los intereses de EEUU. Así piensa Clinton, lamentablemente para mucha gente honesta que apoyó o sigue apoyando a Obama.

EL IMPERIO TAMBIÉN AGREDE A RUSIA Y A CHINA

Contra las otras dos grandes potencias como son Rusia y China que también tienen excelentes relaciones con los insurgentes antimperialistas de Latinoamérica, los EEUU usan otras armas y utilizan otras vías para actuar contra ellas.

En el fomento del terrorismo ultranacionalista contra los rusos y en el estímulo capitalista a las fuerzas empresariales privadas rusas, no dejan de actuar las 16 agencias de inteligencia que acaban de recibir a un nuevo jefe, ahora un general retirado propentágono, luego de que el Blair gringo cayera ante la operación secreta e infiel en el mar Amarillo.

Esto nos introduce en otro acontecimiento aclarado un poco más por el genio Fidel que nunca ha tenido “pelos en la lengua” y ahora sigue alumbrando al mundo con esa “letra con filo”, como diría Carlos Rafael.

El caso del hundimiento del buque surcoreano Cheonan por una nave submarina de EEUU para echarle la culpa a los apasionados comunistas de la idea Suche de Corea del Norte tuvo más que un objetivo. Está claro.

Por supuesto, una acción tan arriesgada, peligrosa y secreta no tendría un sólo fin a alcanzar. Golpear al gobierno socialdemócrata de Japón dada la urgencia de la base en Okinawa ante el peligro norcoreano y a la gigante China por estar el conflicto en sus predios y evitar así la unificación de las Coreas, con el debilitamiento de la recién inaugurada Área de Libre Comercio del Sudeste Asiático, son metas que EEUU trató de alcanzar si es que hubieran podido realizar la acción explosiva al estilo de El Maine en el siglo XIX que quedó sumergida en el más absoluto secreto.

La actual guerra de 4ta generación también se les puede revertir contra ellos. No hay secreto que dure 24 horas ni nanomicrófono que lo resista, como diría el general antiimperialista Omar Torrijos.

LAS ENCUESTAS DE GIS XXI,  LA VENEZUELA REAL Y EEUU

Por ello es que a Hillary Clinton y a Barack Obama hay que darle GIS XXI hasta que revivan porque ellos andan pensando como James Monroe o como John Quincy Adams, fundadores del capitalismo premonopolista estadounidense a principios del siglo XIX que proclamaron “América para los americanos”, considerándose ellos como los únicos americanos pues a todos los del sur los consideraban tan indios como a los apaches o a los siux norteamericanos.

Por cierto, en el comunicado, la cancillería recuerda los esfuerzos realizados por el ejecutivo que desde 1999 encabeza Hugo Chávez para el rescate de los recursos naturales y en aras de materializar el derecho del pueblo a la salud, la educación y la alimentación.

No es casual entonces que en al última investigación de GIS XXI (Grupo de Investigación Social) el 78,5% de los venezolanos están de acuerdo con la participación de los trabajadores en las decisiones de las empresas, y en una anterior encuesta hecha también por GIS XXI, el 58,2% y el 63,8% de los sectores populares de los grupos D y E respectivamente valoran positivamente la gestión del Comandante Chávez.

Esta es la medicina que se le debe dar a Hillary para que no hable tantas sandeces y falacias de Venezuela y también al premio Nobel de la Paz, Barack Obama, para que tome ejemplo y en realidad pueda sacar a EEUU del abismo en que lo metió George Bush y su complejo militar-industrial-financiero-comunicacional, que junto a la impotencia actual ha lanzado a las calles como desempleados al 10'% de la población activa del país, no menos de 20 millones de personas, algo inconcebible para las revoluciones Bolivariana, Cubana, Boliviana, Sandinista o Ciudadana que tratan cada día de alcanzar metas más altas de empleo.

¿Eso quiere decir que el pueblo venezolano está sufriendo como afirma la señora Clinton? ¿O en realidad quiere decir que hay un pueblo con unos valores, sentimientos y conductas bien distante a las que se imagina Hillary Clinton?. Es evidente que la revolución social en Venezuela no hubiera avanzado nada si esas cifras de GIS XXI no fueran ciertas.  Incluso, son tan ciertas que ellas ponen sobre el tapete la necesidad de seguir avanzando a un ritmo más rápido con las transformaciones revolucionarias sociales y políticas. 

IDEAS PARA LAS REFLEXIONES Y CONCLUSIONES PARA AVANZAR

Por todo ello es que en la batalla de ideas entre el imperio y los pueblos, las verdades de las revoluciones populares de Nuestra América van haciéndose hegemónicas, como un todo compacto,  y así formarán la nueva conciencia política del continente “precisamente cuando la Revolución Bolivariana ha transitado por la senda del desarrollo rumbo a la construcción de una sociedad de iguales”, tal y como apunta el Comunicado de Venezuela condenando la injerencia de EEUU en Latinoamérica y diciéndole al mundo que "gracias a la Revolución, Venezuela ha dejado de ser colonia, para alcanzar con orgullo y compromiso el más alto Índice de Desarrollo Humano de su historia".

Hay que reconocer que las declaraciones de Hillary Clinton en Colombia fueron con claros fines de promoción de los derechistas candidatos colombianos ante la llamada a la abstención de las fuerzas progresistas para el próximo día 20.

La secretaria de Estado expuso ideas contrarias a las vertidas por todos los informes de los organismos intergubernamentales especializados adscritos a Naciones Unidas que conocen las particularidades del pujante desarrollo social y económico de Venezuela, y a todas luces, son ideas falsas que menosprecian el esfuerzo diario de millones de personas en Venezuela que desarrollan integralmente al país y que son lanzadas para hacer eco en los medios privados de comunicación y en sus candidatos escuálidos que ante el avance de la revolución están desesperados.

Para muchos analistas que siguen de cerca el demagogo discurso político del gobierno actual de EEUU no resulta sorprendente apreciar cómo el gobierno estadounidense, país más avasallador por las crueles condiciones financieras y políticas que impone a quienes no se dejan explotar; guerrerista por invadir pueblos y ser el principal vendedor de armas de exterminio en masa y convencionales; e inhumano por haber asesinado miles de civiles en Iraq y Afganistán; ahora pretende criticar al gobierno bolivariano de Hugo Chávez, aclamado por los pueblos de varios continentes precisamente por ser completamente diferente a EEUU en su trato con los demás países y que cada día hace posible que el pueblo venezolano tenga mayor suma de felicidad, seguridad y bienestar.

A Hillary Clinton hay que darle GIS XXI, una y otra vez, hasta revivirla porque está divagando por las tinieblas del siglo pasado cuando ningún presidente capitalista hizo por el pueblo ni el 1% de lo que ha hecho el socialista Comandante Presidente Hugo Chávez.

A los 200 años de la proclamación del primer grito de independencia, esas injerencias de Clinton también son contrastadas diariamente por el pueblo de Venezuela y por todas sus comunidades hermanas residentes cuando se aprecia la obra revolucionaria en plena construcción explicada por Chávez y al concluir escuchan por la televisora VTV y vibran con esa convocatoria permanente: "la lucha por la independencia continúa".

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