Dentro de las cuestiones del espíritu es primordial aquella que tiene que ver con las jugadas que los seres cumplen para consumar el eterno reto de conquistar el poder. Una de las interrogantes que siempre esta presente es: ¿en Venezuela la extrema derecha cree realmente llegar al poder?. Cuando a los partidos de extrema derecha de Europa, Jean Marie Le Pen, a la cabeza en Francia o Rosenkranz en Austria, entre otros, son tenidos como una amenaza a la democracia.
La candidata austríaca pide la abolición de la ley que prohíbe el nazismo, y pone en duda que existieran las cámaras de gas.
Si esto se mueve por allá ¿como anda la extrema derecha en Venezuela?, por ahora actúan como demonios vengadores, pidiendo cárcel y retaliación contra la gente que halla tenido algún tipo de relación en el gobierno actual. El debate lo demostró. ¿Logrará esta retorcida sin razón darles la victoria¿. He allí el problema.
Venos que su furor lo arruina el raquitismo de los partidos que apoyan a sus aprendices de brujo y son muy pobres, con tendencia a reducirse, los números que muestran sus encuestas. Agregando que su propuesta, como derecha que se respete, consiste eliminar los beneficios que los mas pobres han conquistado en este período.
Difícil convertir un partido de novatos manejado por viejos de la Cuarta en una verdadera opción de poder. ¿Como tomarlos en serio?. Si no muestran ni programas ni estrategias claras de gobierno.
Tienen ambiciones, difícil validarlas, cuando todo les resulta adverso y
el modelo social protector e igualitario que enfrentan cada vez se hace mas sólido y defendido.
En cuanto a su patrón de referencia, uribismo, o Rajoy es conveniente resaltar sus rastros actuales y futuro mas notable.
Es reconocido que la inyección que los gobiernos dieron a la banca tuvo sus efectos inmediatos luego se desvaneció. Además, el péndulo que va, es el mismo que se devuelve, y este es el caso en muchos países europeos pues su impulso inicial hacia un lado se está agotando, ahora vendrá el retroceso.
La tesis es que el estertóreo logrado con los “desembolsos” de los gobiernos a la banca en crisis anuncia una recaída cuyo efecto mas terrible tendrá que ser subirle cifras al desempleo. Volver a crear 17 millones de puestos trabajo que se perdieron con la fiebre aviar financiera no es asunto fácil.
Sobre todo que los tesoros nacionales de estos países han estado soportando guerras y sobre todo las crisis financieras de los países en default: Grecia, Italia, España, Portugal, Bélgica y Francia - muy en silencio también sufren el rigor e impertinencia contralora de la Sra. Merkel-. Se da la paradoja de los Bancos ricos y poderosos rodeados de poblaciones Indignadas, que ni trabajan ni consumen.
Una de las expresiones de cualquier caos es buscar un culpable, aquí lo convictos sobran. Por un lado se señala a los “irresponsables que se endeudan sin tener capacidad de pago” o gobiernos que “compran por obligación los productos bélicos que los alemanes les imponen como regalos envenenados que luego terminan exorcizándolos”.
Ensayan nuevas practicas político que incluyen su novedad de castigo: los nuevos modelos de Golpe de Estado Bancarisado”.
Hay otro culpables esa desechable y creciente masa de inhabilitados para cumplir, ni siquiera en Navidad el santaclusesco mandato divino de la compra. Tratando todos de ocultar el efecto negativo de las políticas publicas de la derecha tratando de resolver el problema con el absurda idea de bajarle el salario a la gente.
Toda una mezcla de política desacertadas cuyo fin es el monumental desacierto neoliberal, capaz de crear una pobreza que afecta al 15% de la población europea, con sueldos retraídos al nivel vigente hace 15 años y una concentración escandalosa de la riqueza, cuyo principal estandarte son los indignados de este período y los que vendrán con el nuevo año. Fenómeno que debe acentuarse como efecto de la marcada practica con insignia neoliberal que busca ampliar la punible practica de deslocalizar los centros de producción hacia sociedades adonde los salarios, protección social y costos son menores que las metrópolis y cuyo efecto se demuestra con la perdida de puestos de trabajo. Otro efecto del modo neoliberal de adelantar políticas y acciones de Estado desde la derecha.
Además – y no poca cosa- se esta practicando un tormentoso desmantelamiento del pacto social y democrático en el que se basaron las constituciones normativas en Europa después de la II Guerra Mundial cuyo efecto mas notable es la pérdida de calidad democrática en los estados miembros de la Unión.
Sin duda que este transfondo de incorrecciones es el verdadero programa –de la incitante globalización con “fin de la historia y todo”- de gobierno que ocultan los pre-candidatos de la MUD para el futuro de Venezuela. Ellos, por supuesto lo tienen como su “gran paquetazo económico” para ejecutar los programas de una fantasmagoría que llaman transición; bajo el incierto sino de esa trilogía que piensan aplicar con uso de los nuevos tres signos monetarios en una incierta canasta que combinará: dólar, euro, yuan.
En fin todo un feliz nuevo año, con novedades enfermas de un poder indeterminado es lo que puede ofrecer nuestra derecha en esta campaña.
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