El día de la victoria festejado en Moscú y toda la federación rusa para recordar el fin del nazismo, ha sido sin duda alguna uno de los acontecimientos que han captado la atención, por un lado el orgullo del pueblo ruso que lo marca como el nuevo hacedor de la historia del siglo XX y con ello presentar numerosos avances en tecnología militar la cual se exhibe, en el desfile al igual que los memorables años de la época de la Unión Soviética. La esquirla de la granada política internacional lazada por Putin a occidente al invitar al mundo a celebrarlo internacionalmente ha causado más que una hinchazón a los EEUU es la pérdida de un miembro; es decir este desfile con la presencia de más de una decena de dignatarios de diferentes países permite verse como un reto geopolítico internacional del kremlin a la Casa Blanca; lo cual tumba la falsa historia creada por las corporaciones editoriales internacionales, que durante décadas se dedicaron a prefabricar unos falsos héroes de la segunda guerra mundial. Estas editoriales al servicios del gran capital junto al elemento cinematográfico elaboraron y crearon en la educación y la cultura de muchos países que los Estados Unidos y sus aliados habían sido el gran vencedor; cuando en esencia fue el vencido ya que mientras mandaba a las trincheras y a las costas a miles de hombres, por otro lado financiaba la maquinaria bélica a través de diversos empresarios que para la época tenían muy buenas relaciones con el nazismo hitleriano.

La gran guerra patria del pueblo soviético dejo una estela de más de 25 millones de patriotas rusos fallecidos los cuales se enfrentaron entre 1941 y 1945 a la amenaza fascista que movilizo a más de 450 divisiones de la wehrmacht, lo que significó que las fuerzas rusas guerrearon contra bestiales elementos del tercer Reich logrando hacer que la historia burguesa para ese entonces no le otorgara el carácter histórico de patriotismo mundial que salvo a la humanidad, de las garras del nazismo; mientras que por otros frentes solo 35 divisiones eran enfrentadas a los aliados dejando ver claramente que fue el pueblo soviético quien cambio el rumbo de la guerra y no la falsa historia prefabricada como la del general ingles J. Strawson quien la acomodaba a los requerimientos ideológicos imperialistas exaltando para su época, a Churchill como principal triunfador y que para el año 1945 ya casi finalizada la guerra el propio Churchill planeaba iniciar una confrontación contra la URSS con el objetivo de evitar que fueran las tropas rusas las que tomaran Berlín y su trofeo el Reichstag, esto era inconcebible para occidente que la bandera roja ondeara en el centro del poder alemán y por lo tanto más que necesario era imprescindible cambiar la historia a favor del poder económico y militar que se tejería durante décadas luego de la guerra; y que ese mismo poder ha sido peor que la amenaza nazis para los pueblos del mundo

Los años posbélicos fueron sin duda alguna los escenarios de enfrentamiento y satanización contra la triunfante URSS, el papel ideológico fue preponderante para las potencias occidentales y así estigmatizar la política exterior de la Unión Soviética y para esto la historiografía burguesa alisto y preparo los dardos escritos basados en crear héroes y mentiras que favorecieran al bloque imperialista que comenzaba a nacer en Europa y que los mismos con el transcurrir del tiempo seria base para bombardear las mentes de millones y así ocultar la verdadera historia. Parte de la falacia de la historiografía occidental estaba destinada, a asegurar que las acciones de los alemanes se basaban en detener la amenaza soviética y esto nos demuestra como las naciones occidentales y sus aliados europeos ya iban en busca de un enemigo comunista que para sus intereses de dominio imperialista se convertiría en un futuro no muy lejano en un factor al cual había que derrotar por todos los medios.

Ahora bien cabe preguntarnos ¿porque en el inicio del conflicto los bloques capitalistas Francia e Inglaterra no defendieron a Polonia, Dinamarca y otras naciones que capitularon rápidamente frente al poderío nazi?

¿Será que hubo más interés por parte de estas potencias en defender los intereses de la burguesía que defender los intereses de las masas?

Irónicamente hoy la Alemania de Merkel busca posicionarse activamente con una política de doble racero frente a Rusia; por un lado le recibe órdenes a las mafias financieras globales BM, FMI. Para así apretar el cuello a los demás países europeos con políticas neoliberales que en esencia al final de cuentas se convierten en políticas fascistas; siguiendo los mismos pasos de inundar de miseria y pobreza a quienes se les resistan a sus pretensiones claro acompañadas del elemento represivo que no puede faltar como esencia fascista. Ayer fueron las editoriales y el séptimo arte como lo llama el capitalismo, hoy son los medios de comunicación trasnacionales sensacionalistas quienes ataca a Rusia y sataniza a todo un pueblo en la búsqueda desenfrenada de ese enfrentamiento anhelado, para esto los Estados Unidos y sus aliados de occidente han fabricado unas andanadas de mentiras y una historia de acorde a sus intereses que hacen que la careta que le ha durado más de medio siglo comienza a mostrarse en decadencia; ya las mentiras de Hollywood no son creíbles, ya la magia del cine no encanta a millones que incentivados por esta arma ideológica al servicio del gran capital se lanzaban a defender las políticas falsas creadas por el imperialismo; mientras muestran a un enemigo que solo en el imaginario de la cinematografía porno estadounidense (Hollywood) fabricaban para así continuar con el dominio y expansión que Hitler no pudo lograr.

los EEUU y sus países aliados capitalista ha dividido al mundo de acorde a sus intereses y esa división hoy se encuentra más latente, la vieja Europa enfrenta al monstruo devorador del imperialismo, sus millones de vidas empobrecidos por la burguesía parasitaria intentan resistir y enfrentar una maquinaria expoliadora y asesina que es global y sus grandes tentáculos militares que le sirven como mecanismo de represión dirigida desde los gobiernos. América Latina en el ojo del huracán enfrenta y resiste los embates imperiales; ambos continentes se encuentran bajo una guerra silenciosa impulsada por el poder económico el cual busca asestar el golpe certero que le permita dominar totalmente el globo.