En alguna ocasión nos tropezamos en algún lugar del este de Caracas con Oswaldo Barreto (aka: Otto), y en amena corta conversa tratamos sobre qué escribir sobre realidades criollas y cómo acercarse al análisis, evidentemente, ellos cortos pero tratando que fueran densos en sus contenidos. En nuestras diferencias de cómo abordar temas en revolución considerando el concepto como paradigma sustentador de análisis alcanzamos las correspondientes diferencias lógicas; por una parte se conversaría en tratar el tema venezolano en directa referencia y en la otra "disparar por mampuesto", es decir, referirnos a un tema sustentado la demostración en momentos históricos de algún escenario externo. Vive la difference!!!
En esa línea del discurso cuando en Londres era hogar de vida temporal, le comentaríamos a alguien, un reflexivo filósofo, sobre nuestra decisión de irnos a China, en plena Revolución Cultural, por aquellos años de los 70, a conocer in situ cómo se desenvolvía aquella revolución tan atractiva y mencionada. Aquella sería una conversa, también corta y precisa pero reflexiva, sobre los pro y los en contra de nuestro traslado a aquellas lejanas y exóticas tierras en "revolución permanente maoísta". Como siempre me sugería nuestro señor padre: "…quien escucha consejo siempre llegará a viejo…", aquella decisión sería engavetada curiosamente en temporalidad ya que años posteriores podríamos conocer de reflexiones de ciudadanos chinos sobre los reales significados de aquella terrible experiencia sico-social cuando se desvirtuaría de sus bases fundacionales. Es decir, cuando las intrigas de Palacio (Zhong Nanhai) lograron desplazar los objetivos fundacionales de aquel movimiento revolucionario cultural para ser controlado por aquellos quienes por ambiciones de Poder y burdas manipulaciones convencerían al "Gran Timonel" sobre "el sucesor Lin Biao".
Los estudios históricos motivan porque, en el marco de la subjetividad lógica por humana, sus lecturas al decir de los "hechos históricos" y sus conjugaciones como procesos de corta, mediana y de larga temporalidad nos permiten buscar paralelismo en tiempos presentes y es por ello que historiadores como don Manuel Caballero (q.e.p.d.) y don Germán Carrera Damas han indagado en realidades históricas para, en sus abstracciones, exponer sus pensares sin tapujo alguno. Podríamos también mencionar a nuestra amiga, Inés Quintero, al profesor Víctor Sanz, al pana Luis Pellicer, Calzadilla y tantos otros, todos ellos excelentes historiadores aún cuando no sean del agrado para "tirios y troyanos", según cada sub-conjunto social.
Hemos mencionado a Caballero y a Carrera Damas por necesaria referencia al título de esta propuesta en reflexión. Cuando laborábamos en la CANTV, en el área internacional, estando Caballero viviendo en Londres donde realizaría su investigación y tesis sobre la "Internacional Comunista en América Latina", nos comunicamos por dos razones: la primera de ellas consultarnos sobre las realidades e importancia de Mihail Borodín no solo como "un agente del comunismo internacional", como lo expresarían las intelectualidades del capitalismo durante aquellos tiempos cuando vivía en China según las fechas en título sino como ese misterioso cuadro del internacionalismo comunista (había vivido en Nueva York, México, Londres). Manuel Caballero y quien expresa estas ideas siendo nuestro profesor de Historia de Venezuela habíamos conversado sobre las influencias del Comintern (Internacional Comunista), las influencias de Joseph Stalin sobre aquella Internacional y la figura del judío Borodín.
Mihail Borodín ha sido, probablemente, el internacionalista más intrigante de aquellas décadas del siglo XX. ¿Por qué fue a los EEUU de América, a México? Conocemos que su estancia en Londres se debió a su colaboración con aquel partido laborista de izquierda que lo llevó a ser encarcelado por el status quo londinense para ser canjeado por un espía británico que se encontraba en las cárceles bolcheviques. Vida azarosa. Ello nos lleva a preguntarnos porqué Joseph Stalin decidió escoger a Borodín como lo que los historiadores han calificado como "…el hombre de Stalin en China…". Se necesitaría un libro para demostrar el proceso histórico que llevó a esa decisión pero para curiosos recomendamos el texto: "Borodin, Stalin´s Man in China". (Dan N. Jacobs, Harvard Univ. Press. Cambridge, 1981, pp. 369). Pero nos vamos a permitir exponer ideas centrales pero en la lógica subjetividad personal.
¿Por qué Stalin decidió y presionó a la Internacional Comunista centrar todos los esfuerzos sobre las realidades socio-económicas que se manifestaban en China en considerando el factor importante y fundamental de la presencia de las denominadas como "las 14 Potencias Extranjeras" cuando las realidades en, por ejemplo, Alemania, España, Francia podrían haber permitido la consolidación de movimientos revolucionarios en esos países? No vamos a entrar en la polémica Stalin-Trotsky sino en la consideración que a nuestro entender se corresponde con el "Plan de la Patria" que tenía Joseph Stalin en sus pensares.
A nuestro entender, Joseph Stalin en el marco de la consolidación tanto de la Revolución Bolchevique como su propia consolidación como líder de esa revolución, en la posible reflexión dialéctica, consideró que la contradicción fundamental de aquel capitalismo que salía de la 1ra. Guerra Mundial, era el escenario de crecimiento que se había expresado en China durante los tiempos de aquella conflagración bélica en los campos europeos. Aquellas realidades habían permitido la expansión industrial china, el crecimiento de la masa obrera, el crecimiento del sector financiero pero, al tiempo, exponía las debilidades no solo las presentes sino las probables contradicciones que se irían desarrollando en la medida que el capitalismo europeo y estadounidense comenzaran a resurgir de la crisis desarrollada en consecuencia de aquellas realidades bélicas mundiales en suelo europeo cuales no habían afectado la región de Asia y el Pacífico.
En ese orden de ideas, Joseph Stalin captó el momento real de las contradicciones del capitalismo mundial para, presionando los escenarios en China, alcanzar la consolidación de la Revolución Bolchevique y, mutatis mutandi, su permanencia personal en el poder en Moscú. Es decir, en nuestro criterio en responsabilidad, Stalin solamente buscaría lo que hemos denominado como historiador como "…la supervivencia de Rusia más que el desarrollo conceptual del socialismo marxista…". Es decir, el realismo preponderó sobre el idealismo internacional y, of course, nacional.
Pero ¿Cómo se desarrollaría la presencia de Mihail Borodin durante su corta permanencia en China según la fecha propuesta? Es de lógica que siendo Borodin "el mensajero" de Stalin en China seguiría las instrucciones provenientes de Moscú según los objetivos de Moscú y no los objetivos de la Revolución china en su contradictorio Frente Unido Nacional. Es decir, nos cabe la pregunta: ¿Por qué Joseph Stalin consideró que la realidad de la situación en China desde un escenario revolucionario era el apropiado para el desarrollo de una revolución burguesa capitalista que era, en última instancia, la base fundamental del "Frente Unido Nacional"? trataremos de responder en precisas ideas.
En primer lugar, Stalin consideró que el desarrollo industrial que se había expresado en China durante la conflagración bélica en tierras europeas y, en consecuencia, el desarrollo en volumen de la masa obrera, permitiría sustentar el movimiento revolucionario sobre esa base obrera descartando, quizás por ignorancia, al factor revolucionario-tradicional-campesino. En segundo lugar, Stalin consideró que el desarrollo del sector financiero chino había permitido la expansión de la clase burguesa capitalista que podría ser influida sobre bases de las tesis nacionalistas con lo cual se proponía la unión del sector obrero chino con las clases burguesas en todas sus expresiones de clase pero que se opusieran a la presencia de "las 14 Potencias" y el "carácter colonial" de China según las tesis discutidas por Vladimir Ilich Lenin y M.N. Roy en aquella reunión de la Internacional Comunista (Moscú, 26 julio, 1920).
Permítasenos abrir un corto paréntesis. En el marco del fracaso tanto del putchismo ("Levantamiento de la Cosecha de Otoño". Octubre, 1927) como de la "Comuna de Cantón" (14 diciembre, 1927), Mao Zedong realiza un análisis de su escrito sobre la sociedad china (Mao Zedong."Análisis de las clases de la sociedad china". Marzo de 1920), considerando las realidades en su experiencia personal en la Academia Militar de Whampoa como profesor temporal, considerando las realidades en experiencia de la "Huelga de los marineros de Hong Kong" (1922), considerando las consecuencias de la "Masacre de Shanghai" (12 de Abril, 1927), precisamente, masacre llevada a cabo tanto por las mafias verde y blanca de Shanghai como por los sectores reaccionarios del Partido Nacionalista Chino (Guomindang) dirigido por Chiang Kaishek, masacre que apuntó a eliminar no solo cuadros del Partido Comunista Chino sino a la masa obrera militante y nacionalista que se oponía a las realidades laborales de las empresas extranjeras, llevaría a Mao Zedong, en el marco de aquellas objetivas realidades, a definir la situación de China como de "semi-colonia" con lo cual sería el primer paso importante de su enfrentamiento con Joseph Stalin.
Mihail Borodin impuso las tesis de Stalin en el seno del Partido Comunista Chino sobre el carácter de la revolución en China para aquellos momentos históricos según las tesis más arriba expuestas con lo cual los objetivos de la política de Joseph Stalin de alcanzar no solo la supervivencia de la Revolución Bolchevique sino alcanzar acuerdos con las potencias europeas y los EEUU de América lograron imponerse vista las debilidades consecuenciales del capitalismo mundial post-Guerra-Mundial. Es decir, Joseph Stalin sacrificó el proceso revolucionario chino sobre la base de su permanencia como líder de la Revolución Mundial y de alcanzar acuerdos fundamentales de supervivencia nacional, fundamentalmente, con los EEUU de América como bien nos lo muestra la Historia.