I

El oficial al mando de la brigada de asalto  que allana el taller de Picasso, intrigado por el “GUERNICA”, le pregunta ¿Usted hizo eso?

Y Picasso responde: NO,  LO HICIERON USTEDES.

En el proceso de negociación de la deuda argentina, Ernesto Kirchner  asediado por el chantaje del  “default”, reiteraba: “YO NO LO HICE, LO HIZO EL FMI Y SUS GOBIERNOS ALCAHUETES, CARVALLO Y LOS OTROS”

Los términos del  pago de la deuda incobrable y del programa de ajustes de la troika, lo decide el pueblo griego el 05 de julio:

Estamos ante un acto de soberanía nacional y auténticamente democrático.

Alexis Tsipras sostiene: que si vence el sí, en el referendo, yo  no sería responsable de aplicar esa política que es la ruina de Grecia.

A ESO SE LLAMA: “ÉTICA DE LA RESPONSABILIDAD POLITICA”

II

La tiranía del poder financiero

El euro grupo  se ha constituido  como una banda de matones, que al mejor estilo neofascista muerde rabiosamente a Grecia y no la suelta: en el 2010, un ministro de derechas (George Papandreau) pide clemencia a la troika, ante el paquete de ajuste de la troika, y la respuesta lacónica de Ángela Merkel es: “va a doler, tiene que doler”. La estrategia de “va a doler, tiene que doler”, en el 2010 y  en el 2015, significa tumbar el gobierno, la novedad es que por ahora el ataque tiene por fuente el poder financiero y mediático.

Merkel, la canciller de los matones, recusa  el referendo del 05 de julio, ratifica y acentúa el golpe artero de 2010 contra Grecia… “Hay que luchar por esos principios; podríamos tal vez abandonarlos a corto plazo, decir sencillamente ‘cedamos’, pero a medio y largo plazo nos perjudicaríamos al perder relevancia en el mundo…” El combate frontal del eurogrupo de la austeridad contra Syriza es el coletazo de un proceso brutal, “Una respuesta feroz al heroico intento de un pueblo entero arrojado a la miseria.”

Lo que está en juego supera a Grecia y a la misma Europa: se decide la consolidación de una nueva tiranía, la dictadura de las finanzas privadas (los fondos buitres) que ya controlan los Bancos Centrales de las potencias capitalistas, el FMI, y el Banco Mundial.

III

La avanzada  de los matones

Los “defaults” (la cesación de pagos de deuda por el Estado) no son un fenómeno raro en la economía global. La gestión de la crisis de las deudas, siempre han concluido en negociaciones para definir nuevos términos (programas de pagos, descuentos, etc.): por regla general, el contrato original de los préstamos no se cumple. Ese es un secreto a voces, entre acreedores y deudores, entre instituciones (privadas y organismos multinacionales) y el Estado.

Los programas de renegociación de la deuda, desde 1950 a la fecha,  superan la cifra de 600 casos, de acuerdo con las cifras de la ONU y la ATTAC. En la historia de los “defaults”, Estados Unidos y Alemania (Noam Chomsky,  precisa que en 1953 Europa condona la deuda de Alemania) han experimentado casos de cesación de pagos; y USA soporta el funcionamiento de su economía, con base de los llamados “déficits gemelos” (el comercial y el presupuestario). No obstante, estos dos países  son los  principales acreedores, y han instalado el mecanismo de coerción y chantaje de la deuda impagable que se ceba y lacera los pueblos del mundo.

Si Grecia o Argentina “entran en cesación de pago”, se desata una rabiosa condena moral  que criminaliza y victimiza  a los pueblos con políticas de ajustes y severos programas de pago de la deuda que tienen por finalidad que la misma no se pague, porque el negocio consiste en eso: en que no se pague.  No es que sea impagable, sino que es incobrable, que su cobro se prolongue en el tiempo: cuando la deuda se paga los bancos (los propios rentistas, los de una y rabo) pierden.

Si el gobierno griego convoca el referendo del 05 de julio, ya que no está autorizado por la voluntad popular para acordar y aplicar políticas de austeridad, adviene el torrente chantajista y terrorista: “el gobierno griego puede organizar los referéndum que quiera”. Y el consenso basado en  la dictadura financiera,  manda la consulta democrática al carajo,  “La credibilidad de la Zona Euro es más importante  que su integridad”.

Esto es, pertenecer a la eurozona significa ser socio del club de los matones, profesar el credo de la austeridad; los gobiernos de la Unión Europea no representan  a sus países y pueblos, sino a la dictadura de los ajustes neoliberales: de hecho, tal  usurpación es un golpe técnico de Estado, que por ahora no apela a los tanques, fusiles y metralletas, su eficacia es la asfixia financiera.

Si se produce una crisis, tal cual la de 2008-2010,   y los bancos e instituciones financieras  quiebran, entonces hay que salvar la comunidad de las finanzas, “demasiado grande e importante para permitir su colapso”: fluyen los billones de dólares y euros hacia las para paliar la crisis que las mismas finanzas han desencadenado.

Si el gobierno de Syriza convoca el referendo del 05 de julio, la cruzada europea del odio a la democracia apela al escarpelo del miedo al miedo,  “un no en el referéndum, sea cual fuere la pregunta, significaría que Grecia le dice no a Europa. Todos considerarán que eso significa que Grecia quiere apartarse del euro…”.

Esto es: piensa, pero obedece, y soporta piadosamente el desempleo masivo e intensivo, el trabajo precarizado, la reducción de las pensiones, el aumento del IVA y las oleadas que privatizan lo que aún no ha sido colonizado por el poder de la troika.

III

El poder del impulso utópico del referendo

La decisión política de convocar el referendo, dinamiza el impulso utópico o el por venir de la democracia, de la democracia localizada en el presente, y no como un proyecto a futuro.

A contrapelo de la dictadura de las finanzas, estamos movilizados por dinámicas democráticas, populares y de izquierda, cuyos alcances han posicionado el pánico y el horror de la elite política y económica europea.

Pánico y horror a que la dictadura de las finanzas y el poder del capital comience a desmoronarse, en el mismo centro de la crisis capitalista: en Europa. Después de todo, el comienzo del fin siempre  es la chamba de Marx. Moraleja que es efectiva, a despecho de quienes lo creen muerto, y presumen de haber presenciado su entierro.   

El desafío es más que evidente, los eslabones débiles del capitalismo en Europa configuran un proceso de derrumbe del sistema y del pensamiento económico ortodoxo que no puede pasar desapercibido. Quizás la contribución decisiva de mayo de 1968 no sea “prohibido prohibir” o las “estructuras no caminan por la calle”, sino:

¡El SISTEMA SE HUNDE, HAZ PESO!