El cambio climático, el aumento de la temperatura terrestre, dicen que es la causa de la desaparición paulatina de esta bello y singular especie, reina de Puerto Rico de 17 especies que habían 3 ya han desaparecido y 7 están en vías y peligro de extinción total.
Ya no se escucha la orquesta del coquí, cantando en las noches de luna llena de estrellas, ni saludando las mañanas tempraneras, ya no hay orquesta por falta de músicos. Pobres de los coquis, ellos viajaron a Venezuela, y a otras latitudes deleitándonos con su canto co- qui, co-qui.
Señores se acabó la función estamos matando el planeta por causa de los contaminantes, talas, quemas de bosques, búsqueda desenfrenada de oro y diamantes, pantas nucleares, contaminación del mar y ríos con desperdicios tóxicos de arsénico y mercurio y desechos radioactivos, sin duda el hombre es el peor enemigo de si mismo, es un depredador y asesino de la naturaleza por sus acciones.
Sin olvidarnos de mencionar los desalmados cazadores que asesinan a nuestros amigos animales en vías de extinción, pagando fortunas para que les autoricen el crimen, como es el ya famoso caso del reyecito de España Don Juan de Borbón, con la foto en prensa, revistas y demás medios del elefante muerto por su fusil de cazador. La otra de un hijo del candidato a las elecciones de USA (Donald Trump) al lado de un leopardo.
La matanza satánica de focas que ejecutan los japoneses en el mar. La caza de ballenas también por japoneses. El caso d las abejas, que mueren a millones por culpa de los insecticidas y la biogenética de Monsanto. Los tres grados de inclinación del eje terrestre. Y el desastre nuclear de Fukushima y Chernobil.
Todo apunta que la tierra se precipita velozmente a un nuevo periodo de extinción de todas o casi todas las especies. Tal como sucedió en el pasado milenario con los dinosaurios.
Dios nos perdone.
El concierto se clausura por la falta de sapitos cantores.