Las políticas fiscales practicadas por la Unión Europea están acabando con las tambaleantes finanzas de los países que conforman esta organización; naciones como las que toma Alemania imponiendo a sus colaterales rígidos criterios para mantener su fuerza económica, mientras que los débiles como Gracia, España, Italia o Portugal entre otras deben ajustar sus presupuestos fiscales a "paquetes" que afectan sobremanera a estos pueblos, que deben sacrificar sus conquistas sociales para salvar a quienes fracasaron con sus programas neoliberales, marcan la disgregación de esta institución.
Por decisión popular por intermedio del plebiscito Brexit, el Reino Unido decide romper con la Unión Europea, planteando una severa crisis que apenas vislumbra sus consecuencias inmediatas; este hecho sorprendió a los más sesudos analistas económicos del capitalismo, provocando la renuncia del Primer Ministro británicoDavid Cameron, un inglés que apostó su carrera por la permanencia de Inglaterra y sus islas a la UE.
Otra consecuencia inmediata la observamosen los comicios españoles; un vecino que debió resolver el cambio de gobierno en una segunda elección, pero que ante la telúrica acción británica prefirió no cambiar su estatus, manteniendo su crítica situación económica social ante la incertidumbre financiera del viejo continente; los españoles se aterraron y votaron conservadoramente para que nada cambiara; aun cada organización política ibérica se devanan los sesos para explicarse lo sucedido. Todo esto lo podemos definir como miedo colectivo, pavor social paralizante; solo los eternos marioneteros del mundo; minúsculo sector, dueños de las finanzas del globo jugaron al ganador, o sea ellos, con sus especulaciones financieras y el reacomodo de sus intereses, que no son los de la mayoría que vive en el planeta. Pero, pero esto no detendrá el descalabro de la economía mundial, incluyéndolos a ellos mismos, que deberán propiciar nuevas guerras para recuperar sus espacios. Con ello veremos en corto plazo como la economía asiática se fortalecerá por su potencial comercio y capacidad para entenderse en paz con las naciones del mundo, y a unos EEUU insistiendo en recuperar sus espacios en nuestra América a como dé lugar, catalizando en muchas naciones sentimientos nacionalistas, que propiciarán la irracionalidad xenofóbica y el racismo.
Aquí está nuestro "borden line" o sea nuestra "línea de no retorno"; de tal manera consolidamos de manera radical este proceso socialista o nos arrastrará la vorágine neoliberal, que insistirá en retomar sus espacios perdidos en buena lid. El cómo o quien no importa, el próximo gobierno norteamericano profundizará la presión contra Venezuela para acabar de raíz con el proceso iniciado por Chávez, y saben por qué? Porque si somos una amenaza, lo fuimos y lo somos aún más desde que ganó el Comandante Eterno y prosiguió su legado Nicolás Maduro; un proceso que se ha tomado como ejemplo para la liberación regional, de ahí la necesidad imperial de acabar de tajo con este mal ejemplo para ellos; ya lo implementaron en Argentina y luego en Brasil para desarticular la fortaleza del ejemplo chavista. Esta crisis actual e impuesta se podrá solventar; el gobierno apunta bien en deslastrarnos de la cultura rentista con producción nacional y distribuyendo buena parte de lo que recaba en el beneficio de las mayorías; igualmente positivo es la movilización popular para ahondar en la concientización ideológica pero no basta, Hay que ordenar el aparato gubernamental, exigir y cambiar a quienes no se amolden a la urgente necesidad de impulsar el proceso hacia el socialismo; y fortalecer a los cuadros políticos que demuestren honestidad y cabal empeño en ser revolucionarios. Esta es una reflexión para el debate y espero que ustedes la enriquezcan para bien de todos. Espero no haberles aguado la fiesta a quienes celebran el 4 de julio como su fiesta Patria.