Como es habitual, nos reunimos el grupito de la tercera edad, para tratar los temas de nuestra comunidad, pero en esta oportunidad, había alborozo, el responsable había sido Enrique Dussel, filósofo argentino, entrevistado por el periodista Clodovaldo en el Portal la Iguana, todos queríamos hablar del asunto, sin embargo siguiendo lo acordado para entrar en el temario había que echar la respectiva "pajita",tocándome a mi en esta oportunidad, y, siguiendo el entusiasmo filosófico les conté:

- en mi lejana juventud asistía a un curso con trabajadores de la cultura, de pronto se desarrolló una conversación de lo más interesante, cuando uno de los participantes tomó la palabra y nos habló de Tales de Mileto, enseguida alguien recordó a Anaximandro, y luego retumbó otro con dos pesos pesados: Platón y Aristoteles…todos callamos…Un timido joven levantó la mano y dijo: SÓCRATES…hizo una pausa… nos miró a todos, que quedamos expectantes, y continuó:---pero no es el Sócrates que ustedes conocen, sino un amigo mio que vivía en la esquina de desbarrancado en la Pastora. Él decía,--- me voy a conseguir un neumático y me voy a recorrer el país, hasta que llegue a algún lugar donde me pregunten ---¿Qué es eso?--- Entonces me quedaré viviendo allí, pues desconocen el automóvil.

Muchas décadas han pasado desde entonces, y, hoy, estamos en otra situación con diferentes actores, pero igualmente afianzados en la vida y pensando en el futuro de nuestra nación, desde nuestra modesta situación de militantes comunitarios.

Comentando la entrevista a Dussel, una vez más, nos reafirmamos, que es una necesidad imperiosa acercarnos cada vez más al pensamiento filosófico y no solamente como acción individual, sino colectiva, como fundamento para la construcción de una sociedad republicana, sólida en sus valores identitarios, que nos den capacidades y fortalezas para desplazarnos con solvencia intelectual entre las fuerzas culturales exógenas, eurocentricas y gringas , que históricamente han influenciado nuestra vida nacional, no confundiendo esto, con la negación de los aportes culturales universales, al contrario se trata de beber con CRITERIO en las diversas fuentes del saber.

La conversa se extendió, y alguien recordó a SIMÓN RODRÍGUEZ, aquel niño , nacido en el Siglo de las Luces, que Bolívar, su discípulo, llamó el SÓCRATES DE CARACAS, y "MI MAESTRO" este sabio, que desde 1769 que vino al mundo, hasta 1854, cuando murió en el recóndito pueblo de Amotape, en el Perú, muy pobre, casi abandonado después de esparcir luces, que forman un legado filosófico que alguna vez será la literatura de nuestros líderes y de todos nosotros, los que aspiramos una República, original, auténtica, nuestra, mestiza y Socialista.

Pero es que Simón Rodríguez, es la evidencia de la tenacidad, y la grandeza del amor, cuya procreación rompió los canones de la disciplina eclesiástica y los prejuicios de la sociedad colonial, pues junto a su hermano Cayetano, al decir de los estudiosos, fueron concebidos por un clérigo y una acomodada mantuana. Esos niños expósitos fueron el fruto de una gran irreverencia en la época, la cual NUESTRO MAESTRO conservó hasta el fin de sus días.

¿Para que sirve la filosofía? , preguntan a veces y Dussel en la entrevista citada, dijo extrañarse ante este tipo de preguntas, y se explayó en consideraciones. También estos añosos militantes comunitarios igualmente nos extraña la pregunta,y, a propósito de ello, hurgamos en la biblioteca y leemos una carta que El Libertador le escribiera a Simón Rodríguez, desde Pativílca, el 19 de enero de 1824:

"Vd, Maestro mío, (…)con qué avidez habrá seguido Vd. Mis pasos; estos pasos dirigidos muy anticipadamente por Vd. Mismo. Vd formó mi corazón para la libertad,para la justicia, para lo grande, para lo hermoso. Yo he seguido el sendero que vd me señaló. Vd fue mi piloto…(1)

En otra oportunidad le escribía Bolívar desde el Cuzco a Cayetano Carreño:

" Su hermano de Vd. Y mi maestro, Simón Rodríguez me ha suplicado que ponga a las órdenes de doña María de los Santos, su esposa, cien pesos al mes hasta el completo de tres mil pesos que ha puesto a mi disposición de los que debe recibir de este gobierno, que lo tiene empleado en arreglar la educación pública de esta república.Créame Vd., mi querido amigo, su hermano de Vd. Es el mejor hombre del mundo; pero como es un filósofo cosmopolita, no tiene ni patria, ni hogares, ni familia, ni nada. Este dinero jamás lo ha poseído hasta ahora porque es tan desinteresado que no quiere ni pide cosa alguna…"(2)

La reunión de estos bípedos cuasicenozoicos se extendió de tal manera que la agenda con los asuntos comunitarios, nacionales y mundiales quedaron pendientes, y que son tan importantes como los temas tratados en esta oportunidad. Pero sí llegamos a una conclusión: El mundo vive una crisis que algunos la definen como apocalíptica, los poseedores de arsenales nucleares se apuntan, pero ellos saben y nosotros también, que en caso de que la razón ceda a las emociones, no saldremos ilesos ni los de por allá, ni los de acá, y este planeta será en el futuro una masa desvencijada en el cosmos, objeto de estudio de los "científicos de algún lugar".

Pero la variable apocalíptica debe ser considerada así, una variable, de lo contrario nos paralizaríamos aterrorizados. Sabemos además, que los sectores dominantes en toda la historia de la humanidad utilizando su poderosa capacidad política,militar, mediática, ideológica, han hecho lo indecible para obstaculizar e impedir las justas luchas de los pueblos, donde no escapamos los humildes habitantes de estos pequeños espacios comunitarios, por ello el conocimiento sería un buen antídoto, al menos para vivir o desaparecer con dignidad.

¡NI LA CICUTA, NI ABANDONEMOS A NUESTRO PUEBLO, SABIOS O NO¡

LA REVOLUCIÓN ES CULTURAL

1.-Cartas del Libertador/Tomo IV (1824-1825) pgs, 36-37/Banco de Venezuela, Fundación Vicente Lecuna, Caracas 1966.

2.-Ibid, p, 359.

Nota:El martes 18, En el Camposanto de San Joaquín, Estado Carabobo, despedimos con mucho amor a Lula Pereira, Directora de Venezuela Identidad Musical, compositora, músico, mujer de la alegría, su grupo la acompañó con música y canto, entre las piezas se interpretó el "Cuatro enamorado" de su autoría.