El pasado día viernes 13 de enero de 2017, venció la prórroga del Decreto de Estado de Excepción y Emergencia Económica, y hasta ahora, no se ha observado que el referido instrumento normativo haya sido renovado.

No podemos obviar, que ante las agresiones que nuestra Patria ha venido sufriendo desde finales del año 2014, con la merma de los precios del petróleo, el Gobierno Bolivariano, como garante de la suprema garantía de los Derechos Humanos y garante del bienestar de la población, a fin de disponer de mecanismos jurídicos y fácticos que le permitan dictar las medidas necesarias para proteger a nuestro pueblo de las amenazas internas y externas desestabilizadoras de nuestra economía y el orden social, del chantaje económico, que pretende cercenar el derecho de las venezolanas y los venezolanos a ser libres e independientes y a vivir dignamente.

En nuestro país, actualmente persisten un conjunto de circunstancias excepcionales, extraordinarias y coyunturales que motivaron esta declaratoria de este estado de excepción y emergencia económica, pero además de ello, se requiere la adopción de otras medidas para enfrentar el asedio instaurado contra nuestro país, garantizando la alimentación , la educación, el trabajo, y todos aquellos derechos reivindicados a las venezolanas y los venezolanos por la lucha de clases que impuso la voluntad del pueblo por encima de los intereses de la burguesía.

Además de ello, no podemos olvidar que el mismo Tribunal Supremo de Justicia ha declarado la invalidez, inexistencia e ineficacia de todos los actos y actuaciones dictados por la Asamblea Nacional, por encontrarse esta en desacato y en flagrante violación del orden público constitucional, situación que persiste a la fecha.

Además de ello, a esto hay que sumarle las diferentes acciones paramilitares y de Guerra No Convencional en nuestro país, expresadas en operaciones psicológicas, en acciones vandálicas mejor conocidas como guarimbas, asesinatos y ataques selectivos, lo que obliga al Jefe del Estado a la adopción de medidas para defender la Patria y salvaguardar su soberanía e integridad territorial.

Tampoco podemos obviar las terribles amenazas que implican para Venezuela y la Patria Grande, el convenio celebrado por la República de Colombia con la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), y de ahí la importancia de los ejercicios militares "Zamora 200" de estos días. No se trataba, como se leyó por ahí "de que en cadena nacional se enseña a malandros a usar armamento", sino que todos tenemos la obligación de defender la Patria ante las amenazas internas y externas que se ciernen sobre ella.

Y como complemento a esta aseveración, la guinda de la torta y el "coletazo" mayor que deja Obama como parte de su legado a la posteridad, a menos de una semana de entregar este el gobierno a su sucesor, Donald Trump. El día viernes, el presidente Obama emitió una orden ejecutiva de continuidad por un año más de la "emergencia nacional" declarada en 2015 sobre Venezuela, donde, según indicó, "la situación no ha mejorado" y "el Gobierno continúa erosionando las garantías de los derechos humanos".

Para la prórroga de la orden, el mandatario argumentó hoy que Venezuela sigue sufriendo "la persecución de los opositores políticos, la restricción de la libertad de prensa, el uso de la violencia y violaciones a los derechos humanos".

Asimismo, Obama indicó que el país continúa presenciando actos represivos en las protestas contra el Gobierno de Nicolás Maduro, detenciones arbitrarias de opositores y manifestantes, además de corrupción gubernamental.

Es bueno recordar que la declaración de una "emergencia nacional" es una herramienta con la que cuenta el presidente de Estados Unidos para aplicar sanciones contra un país bajo determinadas circunstancias, y que le permite ir más allá de lo aprobado por el Congreso.

Por ello, no solo con más razón se justifica la realización de los ejercicios militares "Zamora 200", sino que además, y aplicando el principio de reciprocidad en las relaciones internacionales, debe el Presidente Nicolás Maduro, prorrogar el Estado de Excepción y Emergencia Económica en el territorio nacional, no solo por las agresiones a nuestra economía, sino ante las amenazas internas y externas contra la Patria de Bolívar y Chávez.

Y como la Revolución Bolivariana se basa en el mandato obediencial, creo que con esto recojo el sentimiento de millones y millones de venezolanas y venezolanos que seguirán demandando de nuestro Gobierno garantía de protección de sus derechos fundamentales. Y el Presidente Maduro atenderá este requerimiento.

Así que bueno, a apretarse los cinturones, porque seguramente seguiremos navegando por aguas turbulentas.

¡Bolívar y Chávez viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Hasta la Victoria Siempre!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!