No es necesario recordar que la oposición venezolana solicito la intervención de potencias extranjeras con oscuros propósitos para sabotear, generar un hostigamiento y agotamiento financiero y económico; que violenta las garantías y principios del Derecho Internacional y pidieron imponer sanciones a las transacciones financieras para ahogar al país.
El gobierno de Trump, junto a sus lacayos internos, quiso crear una perturbación política en el pueblo. Ya desde su inicio el pueblo consciente supo que esto iba a ser la respuesta de Trump ante una oposición anodina, que no ha podido con votos sacar a Maduro, tampoco ha podido con actos terroristas lograr ese objetivo; no podrán con un cerco financiero quitar el oxígeno y asfixiar al país económicamente, y por ultimo incurre con una amenaza militar contra nuestra patria.
Trump se ha equivocado ante infame y bárbara decisión, puesto que es una medida belicista y hostil, que cercena los DDHH por su inaceptable amenaza y acción agresiva. En este sentido, esa arrogancia imperial, violenta los derechos de los venezolanos a ser libres, además de lesionar la soberanía. Trump se ha equivocado al querer amedrentar las instituciones democráticas; este pueblo se ha defendido de los peligros del intervencionismo e injerencismo prepotente estos últimos 19 años de Revolución Bolivariana.
Trump ha errado al pretender intromisión en los asuntos internos del país, abrogándose competencias extraterritoriales, queriendo minar la imagen del gobierno Chavista. Ante estas nefastas pretensiones, el pueblo bravío, heroico y glorioso de Venezuela, ratifica su apoyo y lealtad al compromiso de defender la soberanía nacional, al Legado de nuestro Comandante Hugo Chávez y al presidente constitucional de la República Bolivariana de Venezuela.