La frase "la economía, estúpido" la utilizó Bill Clinton en sus lemas de campaña aspirando la jefatura del poderoso estado intervencionista imperativo, Clinton al ver las pavorosas cifras de endeudamiento que desde hace décadas vive el régimen bipartidista de explotación a sus habitantes manteniendo clasismo y racismo ostensible, lo disimuló en dos períodos y nada cambió, un saludo a la bandera en medio del temor a quienes no nos dejamos asfixiar con su fábrica de dólares. Se fueron Clinton y otros, la deuda eterna de los USA prosigue impagable.
Al aproximarse la instalación del Consejo Superior de Economía venezolano, anunciado por el Presidente Maduro Moros, para impulsar las exportaciones y que tendrá de primera tarea el mapa de productos, me parece oportuno porque el jefe de estado venezolano sin insultar a los votantes ha dicho que "producir es vencer y es lo que necesitamos para construir la máxima felicidad colectiva". Acoto que Venezuela ciertamente ha sido mal acostumbrado a arrodillarse ante las "bondades" de la democracia U S A, a la que desde 1999 nos rebelamos con justicia y votos.
Maduro aseguró "estamos produciendo para el mercado nacional, una vez satisfechos, trabajaremos para exportar, la agenda será revisión del mapa productivo exportador y la sustitución de importaciones, se sigue creando empleo, riqueza, resistiendo el bloqueo financiero y al mismo tiempo estableciendo capacidad exportadora con el apoyo del Estado". Lo dicho por el presidente está comprobado con el accionar de emprendedores privados no ganados hacia la FEDECAMARAS mercantilista y corrupta, que intenta volver a las andanzas ilegales del 2002 disimulando disimulandito…
"Todas las conspiraciones han levantado una fuerza milagrosa en nuestra patria que es la fuerza de la inventiva, la creatividad, la productividad, ¡Venezuela se ha puesto de pie!" exclamó el jefe del estado, a quien los ricos de cuna y los que se enriquecieron en la era adecopeyeca desprecian porque representa igual que Chávez, la voz del pueblo desasistido y engañado que pasó a ser bien comprendido por el socialismo siglo XXI con el pensamiento de raíces políticas y eminentemente sociales sustentadas por Simón Bolívar, Simón Rodríguez y Ezequiel Zamora.
El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez expresó su molestia ante recientes sanciones impuestas por el Gobierno de Joe Biden contra altos funcionarios de la isla, lo que sufrimos por igual debido a ilegítimas decisiones del republicano Trump, no eliminadas por el pisa pasito Biden del partido demócrata. En Caracas el presidente de la Asamblea Nacional Jorge Rodríguez señaló que el Gobierno de EE.UU. "no tiene absolutamente ninguna autoridad moral para pedir que se libere a personas detenidas en las protestas en Cuba", llamó a Washington a ocuparse del racismo sistemático y la represión brutal en EE UU y en Colombia.
Cuba cumple todas las garantías legales y procesales para los detenidos, el gobierno de La Habana no se asocia con delincuencia organizada, como lo hacen contrarrevolucionarios en territorio cubano y venezolano, protegidos los vándalos de la ultra derecha por la influencia cada vez menos poderosa aunque peligrosa, en el proceder de gobernantes pro gringos y sus áulicos que respaldan, ayudan económicamente y bendicen, asesinos metidos a políticos de oposición al socialismo humanista, protagónico y antiimperialista bolivariano y martiano, la dupla Venezuela Cuba cuyos gobiernos son demonizados por la mediática lacaya internacional.
El apóstol cubano José Martí en su amor bolivariano, vivió seis meses escribiendo en Caracas en 1881 y afirmó "está Bolívar en el cielo de América, vigilante y ceñudo, sentado aún en la roca de crear, con el inca al lado y el haz de banderas a los pies; calzadas aún las botas de campaña", quienes respetamos la historia de Bolívar y Martí no nos asombra que politiqueros a lo Biden y Trump en su escaso accionar mental, ordenen este siglo XXI suspender remesas a familiares en la isla caribeña, sin importar que pierden el 40% de cada envío porque es impuesto fiscal. El gobierno cubano no afecta su economía tiene defensa monetaria bien establecida, aun padeciendo medidas ilegales bárbaras. Moral venezolana bolivariana y martiana, enfrenta la amoralidad imperial.
El nuevo obstáculo decretado por los yanquis contra Cuba, no pasa de ser uno más de los poco seso que dirigen La Casa Blanca, y desde hace seis décadas no quitan el bloqueo homicida a Cuba, afectando niños, ancianos y enfermos, disposiciones salvajes que no las retiran ni porque pierden en la ONU en votación año tras año exigiendo el cese del bloqueo criminal, que la "democracia" gringa extiende a Venezuela mientras deforma la opinión internacional sobre nuestras administraciones electas por mayoría. Que este 25 de Julio de la fundación de Caracas hace 454 años, sirva para establecer las diferencias entre el imperio insoportable de los USA, y las sociedades en Cuba y Venezuela, distintos caminos socialistas y humanistas.