Muchos estarán por gritar: en que nos metieron los Estados Unidos.
En plenos acontecimientos en Europa del Este donde el escenario envuelve a Ucrania en contra de la Federación Rusa más la OTAN y Estados Unidos. En medio de estos a un lado esta Irán de quien muchos se preguntan si podrá reemplazar a Rusia en sus exportaciones de petróleo, o tendría posibilidades de quitarse las sanciones aprovechando la actual situación.
Las reservas de Irán sobrepasan dos terceras partes del petróleo del mundo. Eso matemática o ingenierilmente medibles son ciento treinta y seis mil millones de barriles de crudo. Esto da cuenta que ocupa el segundo lugar en reservas por encima de Canadá en petróleo no convencional. Aproximadamente representa el 10% total de las reservas mundiales.
Irán es uno de los mayores productores de crudo en todo el planeta, superior a la producción de muchos socios en la OPEP donde los persas ocupan el segundo lugar. Para 2006 se estimó que su producción estaba casi en cuatro millones de barriles por día, equivalente al 5% de la producción mundial.
Irán tiene petróleo para los próximos cien años. Si certifica los nuevos yacimientos aumentarán sus reservas. Apenas el 15% de sus reservas las comparte un consorcio petrolero Zatcom de su archienemigo los Emiratos Árabes Unidos.
Para 1976 antes de la revolución islámica la cual triunfó el 31 de marzo de 1979 había llegado a una producción diaria de seis millones de barriles, hoy, desde fuera de su territorio nadie podría asegurar que esos sigan siendo sus actuales objetivos.
Los persas son una nación de ochenta y cuatro millones de habitantes y son los dueños del controvertido Estrecho de Ormuz, el cual mantiene límites marítimos con Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Omán y Qatar. Sus límites terrestres son con Irak, Azerbaiyán, Armenia, Uzbekistán, Afganistán y Pakistán. Sus principales estrategias es la venta de crudo hacia el Asia concretadas con la India y China.
También son líderes en las Reservas del Mar Caspio dónde están las quintas partes globales de todo el petróleo y el cual es compartido por las naciones de Irán, Azerbaiyán, Kazajistán, Turkmenistán y la Federación Rusa.
Han sido objeto de sanciones por parte de Europa, EE.UU. y Canadá. Sin embargo, con los demócratas han tenido un mejor desenvolvimiento tal y como se dio bajo gobierno de Barak Obama donde se llegaron a acuerdos significativos entre ambos, treinta y tres sanciones les fueron retiradas.
En cuanto a enriquecimiento de uranio estos acuerdos fueron pisoteados por la administración de Donald Trump, una de las cosas que pidió Obama a Trump fue cuidar los acuerdos que se habían alcanzado, pero se hizo lo contrario.
Pero los persas saben que las acciones contra Libia, Siria, El Líbano, Irak, han sido dirigidas para tratar de llegarles y golpearlos. Existen intentos y posibilidad de quitarlos y aprovechar cualquier vacío que se presente para propiciar su derrocamiento. Para eso juegan el frente de las Petromonarquías por supuesto a la cabeza Arabia Saudita o el mismo tema con Bahréin, Emiratos Árabes Unidos, Catar, Kuwait y Omán.
Pero todos saben que Irán es el centro mundial chiita en la interpretación del Corán y Estados Unidos no tienen interés en enfriar sus encendidas relaciones mantenidas hasta ahora, igual pasa con Cuba, Nicaragua y Venezuela, todas estas relaciones se han mantenido encendidas.
Desde EE.UU. perciben que Cuba y Nicaragua harían parte de la circunferencia geopolítica con toda la intención de integración con Venezuela y saben que estos países son interlocutores para llegar a acuerdos con Irán, Rusia, y China.
EE.UU. considera para llegar a un país y conquistarlo debe destruir otras naciones. Irán tiene una producción acelerada y una maquinaria militar afinada, y en un conflicto fuerte de dimensiones inimaginables como una tercera guerra mundial participaría o bien sea en el frente de guerra o en su producción de petróleo.
Y ahora que se ha provocado a la Federación Rusa y ella ha respondido los gringos gritan a la comunidad internacional señalando: venimos por más, pero las decisiones del presidente Putin son contrarias y van dirigidas a los intereses de la naciente República Popular de Donetsk donde el mensaje ha sido recuperar estos importantes territorios.
Mientras la composición del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas conformado entre Francia, Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, República Popular China, Estados Unidos de Norteamérica y la Federación Rusa, y en el cual uno de ellos de manera protagónica está dentro del tema de la guerra. La Federación Rusa está en guerra y se la ha declarado su par de EE.UU. interponiendo a Ucrania y peleando a través de terceros.
Desde ya las consecuencias son graves, y con estas situaciones se crean unas nuevas relaciones internacionales. Habrá de ahora en adelante países seguidores de Rusia. Volvemos abiertamente a un mundo multipolar y esto se ha conseguido a través de esta guerra. También hay que decirlo: esta guerra era inevitable pero también necesaria para seguramente no irse a una más grande que signifique la III Guerra Mundial.
Pero esta guerra ya toma matices mundialistas. Los efectos en los precios del gas se hacen sentir desaforadamente como uno de los más elevados en toda su historia y sus proyecciones son deslumbrantes. Todos los días hay cambio en su precio incluyendo al barril de petróleo que bien pudiera estar rozando de radicalizarse la guerra y si EE.UU. termina de quitarse su careta interviniendo directamente, pues el tonel estaría rozando los 200 dólares.
Las consecuencias en Europa no se han dejado esperar. Saben muy bien a lo que se enfrentan. Desde ya lo saben: no hay proveedores de gas ni petróleo que puedan sustituir a Rusia al menos desde el 2022 al 2030.
Estados Unidos y sus privados que más han conspirado en el supuesto lanzamiento de una energía alternativa ahora están más atados al petróleo. Y sus proyecciones de acabar este negocio por uno más lucrativo y desestabilizador se extiende más allá del 2050.
Pero al comienzo de toda guerra sabían que las acumulaciones de gas y petróleo para los anaqueles era una carrera contra el tiempo. Varios informes públicos y confidenciales daban cuenta de este desespero. Los anaqueles se vacían pues en su afán de impactar los precios del crudo las reservas se han abierto como nunca antes y acaban de tomar la decisión más desesperada: fatigar el mercado con sesenta millones de barriles mantenidos en reserva, eso no sirve más allá de una semana y solo lo han hecho para ganar unos días más de tiempo y por si sucediese algún evento que los beneficiara. Juegan al azar.
Antes de cruzar esta línea de la catástrofe mundial todo terminara en una negociación donde el gran vencedor ya tiene su puesto: Rusia. A quien abiertamente van a tener que darle garantías como ganador de esta guerra.
Y los grupos de mercenarios—neonazis compuestos entre otros por treinta y tres mil (33.000) terroristas los cuales previos a estos indetenibles sucesos fueron entrenados por el "imparcial" gobierno de Canadá, todos tendrán que ser desarmados.
Rusia no saldrá de Ucrania si no siente que su agresor es un país neutral y hostigará lo necesario; EE.UU., Alemania, Polonia, Inglaterra y la OTAN tendrán que comprometerse en dar esa seguridad. Esa seguridad llevará amarrado que Ucrania no podrá ser miembro de la OTAN. Ucrania tendrá que ser desarmada militarmente. Todas las armas llevadas por la Unión Europea y EE.UU. tendrán que salir de territorio ucraniano.
Crimea terminará siendo reconocido como territorio ruso y tendrán que reconocerse las independencias de la República Popular de Donetsk ubicada en la región Este de Ucrania y la región de Luhansk.
En estos puntos se centrarán las negociaciones y a estos puntos Rusia no va a negociar. Esta guerra se produce porque de alguna manera es necesaria. Esta situación bélica es la única que estaría evitando una gran guerra del futuro.
Pero si Rusia no siente las garantías entonces seguirá luchando por su futuro para no ser bombardeado ni cercado con bases militares como lo han pretendido la OTAN y EE.UU. quienes desean dividir a Rusia, balcanizarlo al igual que lo hicieron en contra de Yugoeslavia.
El sueño de los imperialistas es trocearla en varios pedazos y con ellos una vez divididos crear nuevas repúblicas con el fin de dividir el gran territorio ruso. Ese es el gran proyecto post II Guerra Mundial el cual ha venido planteando Norteamérica para seguir dominando al mundo. Y para dominar el planeta vienen planteando la teoría de divide y vencerás.
Las negociaciones se concentrarán en sacar a tropas extranjeras de la región. Ya hay cientos de capturados y Rusia a dicho que no tienen estatus de guerra, es decir son mercenarios movidos desde el Golfo Pérsico hasta estas áreas.
Otro de los principales miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas también podría entrar en guerra: China. Recuérdese la longitud de kilómetros los cuales superan los once mil km entre la Federación Rusa y China. El ministerio de Defensa de China ha declarado su coalición con Rusia.
Este escenario desmovilizador centrado en tanta declaración y sanciones busca perder sedes, escenarios conquistados por los rusos en sus actuaciones políticas, Rusia no está dispuesta a perder cada paso alcanzado, lo cual representa un gran esfuerzo.
Mientras la Unión Europea actúa y estudia sacar a Rusia del sistema de pagos y de datos bancarios tras un arsenal de medidas, es hora de terminar de dar pasos y relacionarse más profundamente con un resto del mundo el cual lleva años esperándole.
Rusia ha declarado total y tajantemente responder por los constantes acosos al igual que lo hizo en contra de otras regiones las cuales en su momento emprendían los mismos hostigamientos y China advierte a Norteamérica el riesgo de quedarse por fuera y perder todo su control de Europa y la misma suerte correrá la OTAN frente a su país —China—. Esto es solo una muestra del acelerador que se pusieron los mismos agresores.
Pero mientras muchos creen que a los rusos les interesa capturar y tener el control sobre Ucrania no se dan cuenta que lo que están haciendo —los rusos— es neutralizando a los militares ucranianos que quieren invadir su territorio. Incluso el retirado coronel estadounidense Douglas McGregor ha afirmado: Las tropas rusas se comportan muy correctamente en el territorio de Ucrania. Sin dudas un descalabro más para Joe Biden y su equipo,
Por eso en medio de todas estas tensiones Irán puede ser un suplidor importante de petróleo. Pero para llegar a Irán hay que mantener la paz con otros países, entre esos Venezuela, hoy un importante socio de Irán y de peso en el seno de la OPEP.
Esto enseña que para cualquier decisión hay que hablar con los países productores, entre esos tiene una enorme fuerza Irán. Igual que Irak, Libia y Venezuela con quienes hay que suspender las hostilidades si el mundo desea seguir consumiendo petróleo o desean irse a un paro global.
Por eso también los países reunidos en los OPEP—Plus han tenido un liderazgo. Todo ese papel protagónico y dirección, molesta, incomoda a la OTAN y a Europa con sus cuarenta y cinco naciones más Estados Unidos y Canadá, quienes se esfuerzan por cada decisión y acción en controlar vocerías, presidencias direcciones, gerencias generales y secretarias principales de todos los organismos internacionales.
Pero las relaciones internacionales ahora están en manos de grupos más importantes en el planeta como Rusia y China, y ese es el nuevo mundo que puede estar naciendo. Su cantidad de recursos y fuerza dan control lo cual será ejercido con otras tantas naciones. Esta situación logra poner en aprietos a varias diplomacias entre esas la norteamericana.
Las maltrechas relaciones internacionales bastante complicadas por Donald Trump pasan ahora a Joe Baiden en los primeros años de su mandato y no es suficiente tiempo para obtener una mejoría en su sintonía. EE.UU. se ha cercado su propio escenario internacional con ingredientes de confusión y perdida de equilibrio.
Su inflación interna va alcanzando un 10% y esta amenaza en seguir aumentando. El precio del galón de gasolina para marzo 2022 se ha adelantado a lo planificado para el verano. La salida del invierno arrebato los precios de verano, imaginémonos a como llegarán al Summer Season. El galón de gasolina Regular va a sobrepasar los 6,69 dólares, Special 6.95$ y la Super 7.25 $. Una increíble exageración y desequilibrio.
Los que andan en esta agresión de guerra indudablemente se ven debilitados cuando el kremlin emite sus declaraciones. Cuando convoca al ejército ucraniano a dar un golpe de Estado está enfrentando a Norteamérica. A pesar que países de la Comunidad Económica Europea acuerden aplicar sanciones a Putin saben que deben estar dispuestos a negociar con las condiciones que Rusia impondrá sobre Ucrania.
Esta situación que llevó a comenzar una guerra premeditada va a tener consecuencias muy graves en los programas de gobierno de toda Europa, EE.UU. y Canadá, en esto sus agendas estarán ocupadas por los próximos años.
Los competidores de esta guerra lograron que todas las cancillerías petroleras estén muy activas en este momento y demasiado alarmadas por la situación que viven ante una apertura de consecuencias inimaginables donde cualquier escenario será lo bastante fuerte frente a una nueva aventura de esta naturaleza. Ahora, otras serán las relaciones internacionales y crecimiento político y militar de Rusia frente a todo el planeta.
Cualquier escenario no dejaría de ser real entre el acercamiento que Norteamérica podría hacer con Irán. Y cual será respuesta iraní: espacio, tiempo. En qué parte de la escalera, o del ascensor esperarán a los Estados Unidos al recordar todos los hechos graves de agresiones como el asesinato premeditado del General Qasem Soleimani al cual han jurado venganza los chiíes.
Son hechos que a Estados Unidos hoy le costará llegar, como disculparse, acercarse a un país necesitados de combustible. Veamos en qué posición y espacio se ha colocado después de este conflicto. Será lo más interesante
Hasta más pronto…
Marzo 2022
