El negocio de la guerra se refiere al ciclo económico en el que se toman decisiones políticas relacionadas con el gasto militar, la investigación y desarrollo de nuevas armas, y la producción en la industria de defensa. Es un negocio monopólico, donde participan solo 4 o 5 naciones que dominan todo el mercado mundial de armas, con algún desarrollo excepcional que haga algún país ya que las fuerzas que cercan las iniciativas de otros países como por ejemplo Brasil y Argentina, las cuales mansamente han entregado sus iniciativas a empresas imperialistas.
En el negocio de la guerra se incluye el llamado complejo militar-industrial conformado por actores como oficiales militares de alto rango y empresas que influyen en las decisiones sobre la política militar y la compra de armamento y por supuesto un grupo de políticos guerreristas que le dan soporte legal a las iniciativas de este complejo, cuya mayor magnitud se encuentra en los Estados Unidos.
El negocio de la guerra abarca una amplia gama de actividades comerciales y financieras relacionadas con la fabricación, venta y distribución de armas, municiones, equipamiento militar, tecnología de defensa y servicios de seguridad. Este sector genera enormes ganancias para empresas y contratistas que participan en la producción y suministro de productos y servicios militares.
Las inversiones en el negocio de la guerra suelen ser significativas, ya que los gobiernos de todo el mundo destinan una gran parte de sus presupuestos a la defensa y seguridad nacional. Además, la demanda de equipos y tecnología militar se mantiene alta debido a las políticas imperialistas que inevitablemente llevan a conflictos armados, tensiones geopolíticas y la necesidad de mantener fuerzas armadas modernizadas y eficientes. Llegará un momento, si no es que ya llegamos a él, en que solo los países ricos podrán hacer la guerra pues los pobres no podrán costeársela, a menos claro que volvamos a las lanzas y las flecha; digo por ejemplo, una hora de un avión f22, norteamericano tiene un costo de unos 60.000 dólares. O dolores según se vea.
Las empresas que operan en este sector pueden beneficiarse de contratos gubernamentales a largo plazo, lo que les proporciona estabilidad financiera y oportunidades de crecimiento, aunque entre ellas también hay una guerra feroz, que se convierte en otra razón para impedir o sabotear nuestros intentos de tener, no digamos un Complejo Industrial sino algunas empresas especializadas y fabricantes de los productos más comunes.
Así el negocio de la guerra es una industria poderosa y compleja que sigue siendo una fuente importante de empleo, innovación tecnológica y desarrollo económico en muchos países imperialistas, Rusia, China.
La fabricación de armamento es uno de los pilares fundamentales de la industria e incluye la producción de armas de fuego, misiles, vehículos militares, sistemas de defensa aérea, entre otros. Las empresas fabricantes buscan innovar para ofrecer tecnología militar más avanzada. Esto genera un mercado global para la venta de armas y equipamiento militar, donde se realizan grandes negocios multimillonarios.
Se incluye dentro de esta industria las inversiones en investigación científica y tecnológica a fin de proveer de armas de avanzada y otros suministros los cuales vienen vinculados directamente al avance en tecnologías científicas realizadas por las universidades y centros de investigación.
Todas esas actividades generan a su vez empleo muy calificado para, obreros, administradores, ingenieros, etc. que encuentran ocupación en esa industria. Así, siguiendo con la referencia de Estados Unidos se estima en millones de personas involucradas en la industria de defensa y militar en diversas capacidades vinculadas como Contratistas de defensa, con cientos de miles de empleados directos en las principales empresas de defensa, como Lockheed Martin, Boeing, Northrop Grumman y Raytheon. También se generan millones de empleos indirectos en sectores como la manufactura, la investigación y desarrollo, la logística y los servicios.
Aunque la industria de la guerra puede generar millonarias ganancias a las empresas que en ella participan, no hay que olvidar que la ganancia capitalista se obtiene básicamente por la plusvalía que se obtiene por el trabajo no pagado a sus trabajadores y ahora a la sociedad en general. La guerra es una medida de excepción.