Una nueva mascota para la Casa Blanca

Vaya revuelo causo a ultima hora la elección del afrodescendiente Barack Obama, como presidente de los Estados Unidos de America; mucho se dijo durante la campaña de que el color de la piel del candidato no garantizaba cambio alguno a favor de los pueblos latinoamericanos, africanos o cualquier otro que no fuera hermano de sangre de la superpotencia (es decir socio socio de verdad verdad).

A pesar de todo lo que se dijo durante la campaña, parece que el resultado revivió, de todas maneras, las esperanzas de que el color de la piel del nuevo presidente sirviera de puente para recomenzar las relaciones entre el mundo y la superpotencia.

Vimos a un pueblo afrodescendiente norteamericano soltar lagrimas de alegría mientras se abrazaban con gente blanca, todos apiñados como verdaderos hermanos, en el Parque Grant de Chicago escuchando con sublime emoción las palabras del presidente electo, quien cual serie de televisión se abrazó a su vez con su bella esposa vestida de pericoca (negro con rojo) y a sus también hermosas hijas; por supuesto que la guinda del pastel la puso el abrazo comunitario entre blancos y negros dado en publico entre las dos familias que coronaron los mas altos puestos de la política mundial.

Mientras eso sucedía en Kenia se declaraba día festivo nacional en tributo a la familia Obama y se sacrificaban vacas para repartirlas en grandes comilonas de vecinos (estos sí, todos de la misma raza) en honor el gran negro que logró el máximo cetro del mundo.

Todo eso esta muy bien como guión de película, pero eso no es lo que el pueblo necesita, dennos mas pan y menos circo, el pueblo merece respeto; ¿Hasta cuando las grandes corporaciones se burlan de de la esperanza y la fe de la gente?.

Partamos por el principio, Barack Obama no tiene absolutamente nada que ver con la noble raza negra que habita los Estados Unidos de America, este señor no es como el famoso caso de Kunta Kinte; cuyo descendiente, después de una larga investigación familiar y mas allá, llegó a descubrir cual fue el primer negro de su familia en llegar a suelo norteamericano, en que condiciones llegó y como la familia sufrió su destino hasta llegar a la época moderna.

No, este señor no es descendiente de ninguna sufrida familia negra proveniente de Kenia durante la época de la esclavitud (aunque la familia que queda en aquel país no esta muy bien de situación que digamos), este caso es diferente; es la historia de un señor procedente de África que se enamoró de una mujer blanca (procedente de Kansas) mientras se encontraban en la norteamericana isla de Hawai, se casaron tuvieron al pequeño y antes de que este cumpliera los dos años, se separaron y el padre se fue a estudiar a Harvard y de allí a Kenia para trabajar para el gobierno de aquel país, después de eso su hijo lo vio solo un par de veces en su vida. La mamá se casó nuevamente, con un trabajador petrolero de indonesia, tierra donde se vivió Obama hasta los 10 años, cuando regresó a Hawai a vivir con su abuela blanca, quien lo crió.

El revuelo causado, entonces por el color de la piel del nuevo presidente es una creación de los artífices de la campaña, quienes crearon una imagen de cambio solo por la descendencia del candidato; el Señor Obama no es un negro sufrido, proveniente de las calles del Bronx, ni siquiera se puede decir de él que le tocó vivir un 1% de la vivido por el personaje de Willy Smith en la película “En búsqueda de la Felicidad”…No mis amigos este señor se crió comiendo lomito y con los mas exclusivos servicios de vida que puede tener un ser humado lleno de billete.

Ahora bien, todo esto se aclaró durante la campaña, entonces no se entiende porque a última hora, después de electo, se habla de él como si fuera una esperanza para la raza negra o mestiza del mundo.

Claro que no se puede pasar por alto el que haya llegado a ese puesto, definitivamente y por lo que haya sido es tremenda hazaña; pero hasta ahí…eso se le aplaude y nos quitamos el sombrero…pero eso no significa que el tipo sea una esperanza para nada ni para nadie, ni siquiera para los que votaron por él; quien ganó definitivamente fue el partido Demócrata, y ya lo demostraron al poner en el gabinete del “nuevo” gobierno a la misma gente que tenia Bill Clinton, quien no pasó ni un día de su mandato sin bombardear algún país del mundo (sobretodo a los enemigos de Israel).

Sin embargo un cambio se avecina en la casa blanca…Una familia “negra” de la misma clase social de Condolezza Rice y Colin Powel (esperamos que no de las mismas costumbres) habitará la mansión…y traerá consigo algo mas insólito aun, después de discutirlo en familia y recibir comentarios por Internet, la nueva familia real norteamericana tomó la decisión de llevarse a vivir con ellos una mascota que, según el propio Obama sea “hipoalergénica y preferiblemente procedente de un refugio para animales”…

Ojalá que no sea ese el único cambio que se realice en la casa Blanca, ojalá que además de eso se deje de conspirar contra el resto del mundo y se tomen políticas que promuevan la paz y la sana convivencia entre los ciudadanos del mundo…Ojalá el negro se rebele contra los que lo ayudaron a colocarse en ese puesto y, con el apoyo del esperanzado pueblo norteamericano, rompa con esa dictadura que los oprime desde tiempos inmemoriales…Ojalá que las lágrimas de Jesse Jackson cuando se anunció el triunfo de Obama, hayan sido de felicidad y no de frustración por lo que se avecina.

Ojalá que consiga su mascota hipoalergénica en algún refugio y entonces la lleve a la Casa Blanca junto con el cambio que todos desean pero que casi nadie espera.

Y, como dijo nuestro comandante, ojalá que se logre colocar a la altura de las circunstancias, y se olvide por un momento del color de su piel…y piense en todos como hermanos empezando por sus propios conciudadanos.

oscarajimenezr@gmail.com




Esta nota ha sido leída aproximadamente 3105 veces.



Oscar Jiménez


Visite el perfil de Oscar Jiménez para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Oscar Jiménez

Oscar Jiménez

Más artículos de este autor