Aunque las encuestas revelan un amplio respaldo al Sí a la reforma constitucional a plebiscitar el próximo domingo 25 de enero, similar a la votación obtenido por el presidente Evo Morales en el pasado referendo revocatorio, el primer mandatario ha reclamado en diversos actos una concurrencia masiva a los locales de votación para terminar de decidir el rumbo de los cambios en el país.
"Por primera vez en la historia boliviana, una nueva Constitución, que se ha redactado con muchas dificultades, se somete al voto del pueblo” destacó Morales y reclamó un “esfuerzo por el cambio, por las transformaciones profundas”.
El presidente Evo Morales destacó insistió en los beneficios que la nueva carta magna apotaría al conjunto de la sociedad boliviana, al asegurar el respeto a los derechos humanos, el derecho a la vida, al reconocer los derechos de los pueblos originarios, reconoce y protege la propiedad privada y asegurar la redistribución de las tierras.
"Esta nueva Constitución Política del Estado va a ganar aunque digan que no; no quieren una nueva constitución que gane con más del 80 u 85 por ciento, por eso se están oponiendo", exclamó Morales en un reciente acto en las afueras de Santa Cruz, bastión de la oposición derechista.
Encuestas otorgan más del 65% al Sí
La encuesta realizada a mediados de diciembre (entre el 11 y 23 de diciembre) indica que el Sí a la reforma de la Constitución sería aprobado con un 65 por ciento de votos a nivel nacional, y que la reforma –rechazada por la oposición- triunfaría hasta en los departamentos gobernados por los prefectos separatistas que impulsan el No.
La consulta de diciembre, última conocida hasta ahora, señala que el 65 por ciento de los encuestados votaría por Sí en el referendo del próximo 25 de enero, mientras que sólo 16 por ciento se han definido ya por el No, y el restante 19 por ciento no sabe o no quiere contestar.
Los departamentos de Oruro, La Paz y Potosí son los que más decididos están en respaldar la reforma constitucional sancionada por la Asamblea Constituyente en diciembre de 2007. En estos departamentos, el Sí recoge el 88, 86 y 85 por ciento de adhesiones.
Santa Cruz es el departamento donde la decisión está más peleada. El 41 por ciento se manifestó por el Sí en la encuesta de diciembre, y el 39 por ciento a favor del No, con un 20 por ciento de indecisos o que no quieren manifestar sus intenciones.
En el departamento de Pando, donde en septiembre se produjo la masacre de campesinos ordenada por el ex alcalde Leopoldo Fernández, el SÍ se impone por el 53 por ciento, mientras que sólo un 16 por ciento se manifiesta decididamente por el No.
En Tarija, la encuesta revela una ventaja del Sí con el 47 por ciento de adhesiones, mientras que el No recoge las simpatías del 24 por ciento de los encuestados.
Oponen a Evo contra Cristo
En los últimos días varias organizaciones sociales y el gobierno han advertido sobre las campañas de la oposición que tergiversan el texto de la nueva Constitución y utilizan a la Iglesia Católica en la campaña por el No.
En los últimos días, aparecen propagandas que dicen que si uno cree en Dios debe votar por el No al proyecto de nueva Carta Magna, para rechazar la separación del Estado de la Iglesia.
La propuesta constitucional, en su artículo 4, menciona que “el Estado respeta y garantiza la libertad de religión, de creencias espirituales, de acuerdo con sus cosmovisiones. El Estado es independiente de la religión”.
Asimismo, en los parágrafos 7 y 9 del artículo 30 se reconocen como derecho de los pueblos indígenas la protección de los lugares sagrados y la conservación de sus rituales. En el artículo 86, se dice que “en los centros educativos se reconocerá y garantizará la libertad de conciencia y de fe de la enseñanza de religión, así como la espiritualidad de las naciones indígenas”.
Este reconocimiento a la espiritualidad de las naciones indígenas despertó las críticas de las iglesias cristianas.
En tanto el gobierno lamentó que se haya utilizado la fe y dijo que todas las formas de religión están garantizadas en el nuevo texto constitucional. De esta manera y ante la duda que existe entre algunas personas que temen que la religión sea abolida por la nueva Constitución, el vicepresidente de la República, Álvaro García Linera, explicó que toda fe religiosa tiene igual rango, respeto y protección de parte del Estado. “La nueva Constitución reconoce absolutamente todas las creencias y no se prohíbe ninguna religión ni se reconoce jerarquías entre ellas” señaló García Linera.
Uno de los jerarcas esclesiásticos más activos en la campaña por el No es el Arzobispo de Sucre, Jesús Pérez, que la pasada semana participó en una “oración” organizada por los prefectos opositores donde se convocó a votar No.
Constitución asegura la autonomía
Morales denunció que los prefectos opositores, que en las negociaciones de los últimos meses del pasado año avalaron la nueva constitución tras las reformas introducidas, ahora están operando por el No. En un acto en el departamento de Santa Cruz, sostuvo que está seguro que la derecha internacional, y el saliente gobierno norteamericano de George Bush, , instruyó a sus "operadores internos para impedir la aprobación del nuevo texto constitucional, después que dijeron que sí durante los días de las negociaciones".
En ese sentido ejemplificó el cambio de actitud del partido Unidad Nacional (UN), que había apoyado la reforma, y ahora su principal figura, el empresario Samuel Doria Medina, aparece en algunos medios de comunicación para pedir el voto por el No, aunque esta posición es rechazada por otros militantes de ese partido como los diputados Alejandro Colanzi y Guillermo Mendoza, que apoyan el Sí.
De acuerdo con el líder del MAS, en la postura de los opositores Rubén Costas, máxima autoridad local de Santa Cruz, Ernesto Suárez (Beni), Mario Cossío (Tarija) y Sabina Cuellar (Chuquisaca) hay una contradicción.
Ellos se declaran autonomistas y ahora promueven el No a una Constitución garante de ese estatus, comentó. Morales recordó las casi 60 competencias autonómicas plasmadas en el texto, la mayoría de ellas exclusivas. El presidente advirtió también a los opositores que de ganar el NO, el anhelo de las autonomías deberá aplazarse por varios años.
Si en el referendo del próximo 25 de enero la Carta Magna es rechazada, pasarán más de 10 años para poder implementar esas potestades territoriales, advirtió. Morales se dirigió a los cruceños, benianos, tarijeños y pandinos para decirles que los impulsores del NO los están engañando, y que “si gana esta Constitución no va haber autonomías por mucho tiempo”.
El mandatario explicó que según las leyes vigentes, un nuevo proyecto autonomista en la Constitución, deberá esperar hasta después de concluir su mandato en 2011. Señaló que la derecha fascista y racista debería ganar las elecciones de diciembre de 2010 y obtener los dos tercios del Congreso Nacional para sancionar una Ley de necesidades de reformas a la Constitución Política del Estado, que comenzarían a aplicarse recién a partir del 2021.
Función Social de la tierra
El vicepresidente de la república, Alvaro García Linera, destacó que el nuevo texto constitucional introduce por primera vez en el país el concepto de la función social de la tierra, para impedir la existencia de tierras ociosas.
"Por primera vez, constitucionalmente, se define con precisión lo que es la Función Económica Social, cosa que no había en la antigua Constitución, sino que era una ley, y ahora es un tema constitucional", aseguró el vicepresidente.
En el referendo del 25 de enero se decidirá los límites a la tenencia privada de tierras que quedará entre 5.000 ó 10.000 hectáreas, aunque no será de carácter retroactivo. Además, de acuerdo al artículo 397, capítulo tres, del proyecto de Constitución, la Función Económica Social debe entenderse como el empleo sustentable de la tierra en el desarrollo de actividades productivas, conforme a su capacidad de uso mayor, en beneficio de la sociedad, del interés colectivo y de su propietario.
Según García Linera, con la aprobación del nuevo texto, quedará consolidada la reversión al Estado de aquellas tierras improductivas que no cumplan con esos preceptos. García Linera indicó que si una persona posee 100 mil hectáreas de tierra y no realiza ninguna actividad en ese espacio, el Estado, por proceso de saneamiento, revertirá esas propiedades para su posterior redistribución.
Sobre la distribución, a partir de la vigencia de la nueva Carta Magna, los únicos sectores que podrán acceder a nuevas dotaciones de tierras fiscales son las comunidades campesinas, pueblos indígenas y pequeños productores agrarios.
El viceministro de Tierras, Alejandro Almaraz, agregó que el nuevo texto constitucional va más allá sobre la redistribución de tierras, ya que incluso dispone que la propiedad sea revertida al Estado si allí se ejerce el trabajo en condiciones de servidumbre. Almaráz explicó que la vigencia de los límites de extensión de tierras no tendrá retroactividad, y que sólo será exigido a predios adquiridos con posterioridad a la aplicación de la nueva Constitución.
ernestotamara@gmail.com
barometrointernacional@gmail.com