La recta aplicación de la ley es la fortaleza de la República y la sociedad, no la anarquía y las constantes amenazas, tanto por propios y extraños, que anteponiendo su intereses personales, grupales, políticos , ideológicos, económicos, religiosos y de otra naturaleza, pretenden vulnerar el Estado de Derecho y hacer de sus propias acciones una confusión que nos llevaría al caos total, como lo registra nuestra historia en pasadas épocas de enajenaciones, guerras, muerte y desolación; precisamente por los desacatos a las leyes.
Revisando la ¨LEY ORGANICA DEL PODER ELECTORAL¨, tácitamente entendemos el por qué, la Dra. Tibisay Lucena actuó ajustada a su decálogo legal, artículos: 3; 7; 33, numeral 29 y el 38 sobre sus atribuciones. LA LEY ES DURA PERO ES LA LEY, es el imperativo de garantizar la estructura, política, social, económica de libertades, justicia, paz y soberanía, tal entendemos son los postulados de nuestra CONSTITUCIÓN BOLIVARIANA DE LA REPÚBLICA DE VENEZUELA, aprobada en la Constituyente y refrendada por el pueblo en Referendo en Diciembre de 1999, extraída de la ¨Doctrina Política de nuestro Libertador¨.
La expulsión del señor Herrero, es un explícito acto de soberanía nacional por inmiscuirse directamente en asuntos internos del País, sus declaraciones insolentes y de profanación al suelo patrio, sus declaraciones evidenciaron una clara manifestación en contra de la autonomía del poder electoral, quien es el ente que por ley le corresponde reglamentar las leyes electorales y referendos, y este señor vino desde España, traído por ¨venezolanos¨, para que criticara y pusiera en duda el horario de votación en el referendo de la enmienda, hasta –dijo- que tal medida podría prestarse a dudas, y, además habló de violación de Derechos Humanos y como cualquier negador de la oposición venezolana, asumió una retórica política, para apoyar a los MULETEROS de la colcha de retazos que, lamentablemente no se hayan suficientes para dar la libre batalla de las ideas.
Por aquí han desfilado muchos críticos y opositores de la derecha mundial y libremente han estado en foros, seminarios, reuniones, declaraciones y ha dicho lo que les ha venido en gana y no fueron expulsados, claro, no vinieron en plena campaña electoral a hacer propaganda por sus similares aquí en Venezuela, aunque muchas veces se salieron del riel y por demasiada tolerancia no se les aplicó la ley; después de tantas incursiones extranjeras y atrevimientos a actuar como si siguiéramos siendo el patio trasero de sus correrías, es que ya, como que abrimos más los ojos, para tener una óptica amplia y nos destapamos o limpiamos los oídos a fin de que estos sentidos contribuyeran a percibir o captar lo que como patria nos corresponde a los venezolanos de a verdad.
Aplicar la ley con justicia, es lo que garantiza la estabilidad de una República, nuestro Libertador en múltiples pensamientos asentó principios relacionados con esta necesidad como reglas de conducta fundamentales en la vida humana y nosotros en nuestra patria estamos obligados a enderezar los entuertos originados de el entreguismo, la anarquía colonial e imperial, que por siglos nos aplastó por la traición de quienes nunca han tenido solidez patriota e Identidad Nacional. El despertar de los pueblos abre brechas con nuestra CONSTITUCIÓN que cobija bondades nunca antes originadas por la conciencia de libertad y justicia del pueblo, que ya por extensión abraza poco a poco a la América que soñó BOLÍVAR.
No podemos negar que la ley de la costumbre es la que aun prevalece en nuestros diferentes modos de conducirnos , tanto ayer como hoy las miles de leyes han venido siendo letra muerta, se han cumplido a medias o se aplican por conveniencia económica, social, cultural, política y otros tantos vicios a las que han sido sustraídas las normativas legales. Sabemos que no estamos lejos de lo cierto, es vox populi, este tema en todos los gobiernos, la gente siempre alega que la ley no se cumple, es verdad, recordemos las críticas de hombres de leyes del pasado, cuando se dijo que la ley se aplicaba a los pendejos. Estos elementos, de tradición cotidiana deben de servirnos para ubicarnos en otra dimensión del presente, pues seguir con la ley de la costumbre, la República se hundirá, os devorará la anarquía como sentenció el Libertador, ahora tenemos nueva Constitución y se están creando leyes desgajadas de la CARTA MAGNA, si las nuevas estructuras Institucionales guiadas por mujeres y hombres, no hacen los supremos esfuerzos por cambiar mentalidad de funcionarios y funcionarias que dejen atrás lo que ya pertenece a entelequias o conductas negativas al avance e independencia de las naciones que libertó Bolívar. Dejar al garete o al vaivén del tiempo, sin regirnos por una mentalidad despierta y humana, de respeto y consideración a las ideas o libre pensamiento, es como seguir arando en el mar. Conocemos de la impunidad, casi siempre quienes tienen que cumplir y hacer cumplir la normativa legal, son los que más malos ejemplos han dado, casos de jueces, fiscales públicos, amén de funcionarios policiales y públicos del poder Ejecutivo, que vulneran sus responsabilidades prestándose para manejos reñidos contra la moral y las buenas costumbres, ejemplos: corrupción a través de diferentes procedimientos que burlan, derechos, deberes, responsabilidades al margen de las leyes y en contra de la sociedad.
Llegó la hora de hacer valer la CONSTITUCIÓN Y LAS LEYES, sin distingos o discriminaciones de ninguna índole, para lo que es menester efectuar una extensa campaña educativa de obligatoriedad en planteles educativos en todos los niveles, Liceo y la Universidad no pueden estar aislados de este aspecto, los medios de comunicación públicos en primer lugar y los privados también, de acuerdo a lo que rezan las leyes en la materia, educar. Orientar, difundir, contribuir con el pueblo, sin que tengan que erogarse sumas de dinero para este tipo de labor social y educativa.
Pensamos que la iniciativa legal de la doctora Tibisay Lucena, debe ser como un punto de partida para que el estamento legal se aplique a los de aquí y de allá que atenten contra la ley, basta ya que exista UNA LEY POLITICA DE LA COSTUMBRE para cometer todo tipo de arbitrariedades contra ciudadanos y bienes nacionales, que se mate, que se importen criminales a contrato para eliminar a campesinos, trabajadores, o que se secuestre al trabajador y productor del campo, tan solo por contribuir con el desarrollo agropecuario, nos referimos a productores o ganaderos hechos a punta de cincel y que producto de su trabajo y esfuerzo, sin quitarle a nadie han hecho riqueza, que invierten aquí, tienen sus hijos aquí, educan aquí, comparten y son solidarios con la patria. La mayoría de venezolanos o extranjeros que han hecho riquezas al calor del erario público se fueron del país a disfrutarlas afuera, aunque aquí hay mucho rico que se deja entusiasmar por enemigos de la patria y juegan a la inestabilidad legal.
Lamentable es que aquellos que sustrajeron dineros públicos y se fueron al exterior hubieran sido objeto de sanciones legales para que retribuyeran lo sustraído a la Nación. ¿Es la debilidad de la ley o de quienes tienen el deber de su aplicación? Es bueno acotar que, la expulsión del eurodiputado es una lección de apego a la patria y la ley, pues aquí extranjeros desde que está el Presidente Chávez en el poder, han venido a ser asesores y conspiradores y hasta ahora se está haciendo justicia. En Europa no se permite este tipo de actuaciones y les aplican de inmediato el abandono de su territorio, en EE.UU. no se diga, en Colombia ni los dejan llegar, en México igual, de manera que en Venezuela no debe ser la excepción y más con tanto chantaje como se atrevió a hacer el señor Luis Herrero en contra de las instituciones soberanas emanadas de la voluntad popular.
Muy bien, buena ciudadana, Tibisay Lucena, bien por el poder femenino en el CNE. En la Fiscalía, y en el máximo tribunal de la República, TSJ. En esa honda legal debe proseguir la Democracia Participativa, con elecciones cada vez que sea necesario para dirimir y decidir el rumbo de la patria, así lo planteó el Libertador en Angostura, las dictaduras de partidos y sus élites están en plena decadencia, así como perecieron las dictaduras gorilas de nuestra América que eran aupadas y apoyadas por el imperio y sus aliados. Una decisión de grandes ligas, la de la Dra. Tibisay Lucena.
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