¡Patricia Rodas: próxima presidenta de Honduras!

Suenan las tablas del escenario con fuerza, la sala se llena de voces y discursos y todo el público está de pié y aplaudiendo. Honduras, Honduras estas escribiendo la historia del siglo XXI, las fuerzas del cambio de Centro y Suramérica producen ataques de pánico y de histeria en el pentágono, en los viejos cuarteles de los halcones y en las respingadas oficinas de los perros de la guerra.

Las banderas blancas Zelaya, las banderas blancas de la paz serán finalmente tus armas para entrar a tu patria nuevamente, ¡bien! ¡muy bien! Será con esas banderas que comience la batalla, la historia, cuando se hace, nace día a día, como está naciendo en Honduras y en cada uno de nuestros corazones, será la paz nuestra arma, echaremos a volar a todas las palomas blancas de la tierra. Quedará en sus almas llenas de vileza la decisión de mancharlas con la sangre de los pueblos.

Empezó el camino que la historia imponía, se atascaron los engranajes de la maquinaria obsoleta del imperio, ¿Qué van a hacer ahora que el pueblo comenzó la marcha a la frontera? Empezó la madre de las batallas por la América, un sismo gigante en donde los espíritus de los mayas, de los caribes, de los incas, donde los espíritus de Bolívar y Morazán irán al frente, llegó la hora de vestirnos de soldados del futuro, de empuñar el grito y de tomar el cielo por asalto.

Tiembla la tinta en los tinteros de CNN, la humanidad se asquea de mentiras, se levanta indignada y decidida a pasar por encima a las viejas fuerzas de dominación, los niños de las escuelas salieron a las calles a pedir su democracia, el pueblo entero recorre el camino a la frontera, los demás esperamos la señal para marchar en conjunto por todo el suelo de nuestro continente y aplastar con las banderas del socialismo cualquier intento de convertir nuestro sueño en pesadilla, el insomnio desvela a los burgueses, el imperio no tiene como imponerse en base a falsedades, las caras humildes de la clase trabajadora, las pisadas hermosas de los jóvenes, la inmortal alma de los pueblos originarios indígenas, los trabajadores y campesinos del mundo están decididos a vencer de una vez por todas y a jugarnos el resto ante las convulsiones imperiales que pretenden amedrentarnos, si ellos ganaron tiempo en estas dos semanas es mucho más lo que hemos ganado en conciencia popular.

Todos los espíritus de nuestros ancestrales héroes marchen contigo Zelaya y con el pueblo, nuestras almas están con ustedes, tendrán que llenar de sangre todos los ríos y cordilleras y aun así seguiremos adelante. Llegaremos a Tegucigalpa, llegaremos, el destino glorioso de los pueblos sublevados se hace indetenibles y ellos lo saben. Pase lo que pase, llegaremos.

Un ejemplo hermoso lo han dado las mujeres de Honduras, las madres de esa tierra castigada por soldados traidores, las mujeres son quienes han marchado al frente, quienes han golpeado a los traidores soldados que entraban a tomar la Casa Presidencial, quienes han jurado sobre el cadáver de un hijo muerto para alcanzar la victoria, maestras de escuela que cerraron los colegios, mujeres que entienden que sin revolución no tendremos futuro, mujeres cuyos vientres parieron a los que defenderán a nuestro planeta de su destrucción en manos de los esclavos del dinero, mujeres que a diario despiertan a sus hijos para que tomen las calles, mujeres con vientres llenos de sueños y esperanzas.

Se llegará a la victoria, a la primera gran victoria, a la restitución del mandato del presidente electo, pero desde ya se respira el perfume de esa enorme cancillera, valiente como pocas, que seguramente tendrá que ser la mejor de las armas que asuma el pueblo organizado, será la candidata con que será derrotado el fraude y el continuismo gorila en Honduras luego de finalizado el mandato de Zelaya, Patricia Rodas ya tiene ese compromiso en su sangre y en la nuestra, ya su mirada se llenó de la furia que produce la indignidad, ya su temple está listo para que aquellos que crean que con que se termine el mandato de Zelaya todo volverá a ser como antes, ¡no! ¡más nunca será como antes! Cuando los pueblos avanzan de su corazón van naciendo sus nuevos héroes, sus líderes y ésta mujer gallarda ya empuña el alma de toda Honduras.

¡No se detenga mi América bella, adelante, siempre adelante, todos juntos venceremos!!!!

brachoraul@gmail.com


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Raul Bracho


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