La Cumbre del Grupo de Río en México, se amplió a todos los países del Abya Yala, la América Meridional. Ósea, la de los Incas, Aymaras, Mayas, Aztecas, Caribes, Arawakos, Mapuches; la de la gran familia indígena; la mestiza, la descendiente de África. Claro está, aún representada por sus gobernantes, muchos de los cuales han comprendido el mensaje que desde hace 200 años legara Simón Bolívar Palacios: Integridad para hacer de ”…América la más grande nación del mundo, menos por su extensión y riquezas que por su libertad y gloria”, que deseaba el Libertador ya en 1815, antes de ver coronada la gesta de la independencia política de Suramérica.
Libertad para Simón encerraba integralmente el significado amplio de soberanía política, económica, cultural, social, territorial, defensa, bienestar (“la mayor suma de felicidad posible para el pueblo). Gloria para nuestro Libertador era “ser útil” a la gente, era “ser grande” en el servicio público, superar las dificultades y erigir a América como una gran nación de Repúblicas.
La Cumbre en Cancún, da un nuevo paso hacia el ideario bolivariano, el ALBA, la UNASUR, la Primera Cumbre de Jefes de Estados de América Meridional celebrada en Brasilia, apuntaban en esa dirección: A dejar el tutelaje de Estados Unidos y sus socios. Ahora bien, en el conocimiento de las situaciones políticas de cada uno de las repúblicas meridionales, la segunda gran tarea será la búsqueda de las coincidencias. Queremos unirnos para ser invencibles. Para el 7 de Julio de 2011, por sobre las contrariedades ideológicas, deberán estar sobre la mesa los tópicos, temáticas, complementariedades en las cuales cada república esté decidida a avanzar en conjunto.
reibol@gmail.com
