Es un hecho comunicacional, público y notorio que el vergonzoso Colegio Nacional de Periodistas, sin ningún empacho, se ha declarado abiertamente, con sus actuaciones en un partido político más; sin pensarlo dos veces y por decisión de una minoría de estos profesionales, que son los que eligieron a la cúpula de ese gremio, que no es otra cosa que un apéndice del canal del terror y de la mentira; Globovisión, como que nada menos que el presidente de la directiva, entre otros, pertenece al staff de esa cloaca mediática.
Su descarada parcialización desde los medios en los cuales se desenvuelven, sumada a sus gestión gremial, dedicada a hacer oposición abierta al gobierno en lugar de velar por los intereses y las reivindicaciones de los periodistas, todos, no solo los afiliados, descalifica totalmente a quienes están perdiendo la oportunidad de realizar una vendedera actividad gremial, comenzando por sentar a los dueños de los medios para conminarlos a que traten a los profesionales de la prensa como lo que son, y no como borregos y esclavos, mal pagados y pisoteados en sus derechos laborales, como lo denunciaron el primero de mayo los trabajadores de El Nacional.-
Es tanto el odio y la parcialización que con sus absurdos comunicados en los que acusan al gobierno de persecuciones y de violaciones a la libertad de expresión, no se dan cuenta que están por ellos mismos desmintiendo lo que reclaman pues realizan actos insultantes, ofensivos e irrespetuosos contra el Presidente de la República y a diferencia de otros países donde osaran hacer lo mismo, no les sucede nada; es lamentable pues que en Venezuela tengamos un grupúsculo de personajes que no son otra cosa que “caciques sin indios” o “generales sin ejército”, que se abrogan una representación de minorías, generalmente obligadas por un bozal de arepa y bajo una especie de espada de Damocles que les impide, aun a sabiendas de cómo con su actitud están pisoteando su ética, actuar en consonancia con la veracidad y objetividad a que están obligados.-
MÁS SOBRE LA ONIDEX EN EL TÁCHIRA
En diario La Nación de San Cristóbal aparece de nuevo otra denuncia, que viene a confirmar, que a las irregularidades que ya son frecuentes en la ONIDEX, pareciera que nadie se interesa en ponerle coto, y adecentar definitivamente un servicio indispensable para venezolanos y extranjeros.
Trascribo esta nueva denuncia con el ánimo de contribuir de alguna manera a que la Revolución se deslastre de estos vicios, de los cuales tiene fama bien ganada esta dependencia, no desde ahora sino de tiempos inmemoriales, pero además cumpliendo con el deber que todo venezolano que ame a su Patria tiene de denunciar hechos como éstos tan negativos para un gobierno, que como lo ha manifestado el líder de la Revolución esta decidido a acabar con la corrupción en todos los niveles. Los peligros y oportunidades para que la corrupción se amplíe sobre todo en las oficinas regionales aumentan ahora cuando se han ampliado las atribuciones y la mayoría de los servicios que antes se llevaban en la Oficina Central de Caracas ahora pasan a nivel regional, por lo que sobre todo la contraloría social debe intensificarse.
Ahí les va la nueva denuncia:
“El ciudadano Jairo Oscar Gil, denunció falta de seriedad y abuso por parte de los trabajadores de la Oficina de Identificación y Extranjería (Onidex) con respecto a un presunto descontrol que existe en la base de datos de ésta, pues los estados civiles y otros datos han sido alterados "y los afectados son los que tienen que pasar un suplicio para arreglar esos errores".
En tal sentido, Gil indicó que el Registro y Notaría introdujeron los datos de la Onidex en una base informática en la que trastocaron la información, tanto así que cambiaron el estado civil de las personas, algunas aparecen fallecidas y otras desaparecieron del sistema, y al introducir el número de cédula, sale información de otra persona.
--Cuando uno va a la Onidex a sacar los datos filiatorios para arreglar esos errores, hay que llegar en la madrugada, hay un letrero que dice que atienden sólo 30 personas pero nada más reparten 20 números, la atención es pésima y no hay quién proporcione información. La Onidex dice que es culpa del Registro y viceversa.-
Asimismo, manifestó que ese procedimiento "lo establecieron de forma premeditada con el objetivo de apoderarse de una unidad tributaria por cada ciudadano, quien tiene que pagar sin tener la culpa de los errores de la Oficina". Finalmente, hizo un llamado al Ministerio Público y la Defensoría del Pueblo para que hagan acto de presencia en la Onidex y observen la situación por la que pasan los ciudadanos a la hora de gestionar la correcta modificación de los datos alterados”.
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