La Misión Alimentación es uno de los logros más preciados de la revolución y, como tal, debe cuidarse en todos sus detalles. Recuerde el consejo del Comandante Chávez en el cuidado de los detalles.
Con satisfacción vi su programa ¨Contacto con Maduro¨ del martes 26 y vi que el gobierno propuso una Ley y un Sistema de Misiones para mejorar su eficiencia y alcance, esto me parece muy bien y ojalá repercuta en resolver la desorganización que tiene la Misión alimentación en la base popular. Al respecto, muy humildemente, le haré algunas sugerencias:
-No acepte Presidente más aumentos de precios en Mercal, la excusa de que es para evitar el contrabando de extracción no es pertinente, ese contrabando no se evita capitalistamente, si no con organización popular en la distribución y venta de los productos. Ya el esquema del mercalito no sirve, está penetrado hasta los tuétanos por los contrabandistas. Ahora, es necesario crear el Mercal por comuna y hacer un registro biométrico de sus consumidores por consejo comunal, adscritos en cada comuna. Debe haber supervisión de la Misión Eficiencia o Nada, para ver si los alimentos llegan a su destino. Incluso, los Consejos comunales deben organizar su distribución por cuadrantes de paz y la PNB debe estar pendiente de su cumplimiento
Una experiencia que debemos tener en cuenta es la experiencia española con la seguridad social, que está completamente organizada sobre el territorio y funciona muy bien. Cada quien se inscribe y es atendido en el centro de servicio que le corresponda y funciona eficientemente.
Igualmente, cada Consejo comunal, inscribe a sus miembros en el registro biométrico del Mercal comunal correspondiente, presentando su cédula y recibo de servicio público para comprobar su dirección. La distribución y venta de los productos, de esta manera, evitará las humillantes colas en la red de Abastos públicos y mercados a cielo abierto que hacen que el beneficio recibido sea anulado por el maltrato que sufren los usuarios en dichas colas.
Ya es hora de optar por otra modalidad más cómoda y equitativa que el mercado a cielo abierto, lo ideal es la organización por la base, a través de los consejos comunales para que cada familia reciba los productos subsidiados en su casa y haya un camarada del referido consejo, con teléfono, que garantice el abastecimiento.
-La población no organizada en comuna debe recurrir a la Red de Abastos Bicentenario y PDVAL, los cuales deben organizarse por parroquias no abastecidas por Mercal y hacerse también un registro biométrico de estos compatriotas.
Los Abastos Bicentenarios funcionan muy mal, la negligencia de su personal se ve a distancia, eso es falta de supervisión. Sus pisos sucios, las cavas no las lavan adecuadamente, el aire acondicionado, por lo general no funciona, no hay carritos para compras, las cajas funcionan a medias y su personal no es cortés con los compradores. Varias veces he ido para el Abasto Bicentenario de Costa Verde en Maracaibo para registrarme y allí desconocen el registro biométrico. Envíe los inspectores presidenciales, para que vea Presidente, y no se coma los cuentos que le dice el Ministro.
-El Mercal obrero está funcionando a medias, no siempre llegan los mismos productos, no se previene la correcta distribución. Quienes opten por esta modalidad deben ser excluidos del Mercal comunal, de allí la importancia del registro.
Si falla el Mercal el pueblo pasa hambre y eso si es grave Presidente, porqué los supermercados privados no están al alcance económico de los pobres, a quienes nos debemos. La SUNDECOP debe inspeccionarlos a todos. ¡HASTA LA VICTORIA SIEMPRE! ¡CHAVEZ VIVE!