El rumiar de la oposición

El psicólogo clínico Walter Riso, quien ha sido o es, profesor de terapia cognitiva en algunas facultades de Latinoamérica, sin proponérselo en cierto modo nos aclara un poco algo de las locuras en las que anda metida la oposición política venezolana, que no logra dar pie con bola, pese a la ayuda y financiamiento de la Corporación Usa.

Y esto lo decimos porque este profesional de la psicología, al abordar el tema del pensamiento repetitivo, lo identifica con el rumiar y así, escribe que el rumiar, es una práctica en la rutina alimenticia de los animales herbívoros, de proceder a masticar por segunda vez su alimento, devolviéndolo de la cavidad estomacal en la que estuvo almacenado.

Riso dice que, por analogía, le dicen a una persona rumiadora mental cuando ésta piensa de modo reiterado y obsesivo el mismo asunto. Refiere así que, por lo general ese pensamiento repetitivo es ubicable, de manera obstinada, en los porqués, los cómo y los qué de una emoción que le perturbe, con lo que busca encontrar una solución o un aplacamiento al malestar. Pese a ello, comenta que aunque en ocasiones ese proceso de rumiar pueda presentar cierto consuelo aparente, las investigaciones realizadas enseñan que en un alto porcentaje o en la mayoría de los casos el alivio esperado no se alcanza y no solo eso, sino ese pensar y pensar y pensar puede llegar a enfermar a las personas, que lo que hacen es reciclar la preocupación y engrandece el esquema negativo.

Llega a tal afirmación, Riso al dejar sentada su consulta a los estudios documentados Journal of Abnormal Psyhcology; Cognitive Therapy and Research y Cognitive Vulnerability to Depresión.

Once años rumiando o repitiendo

No hay, ni siquiera la necesidad de que le preguntemos a los lectores sus opiniones sobre la oposición venezolana, porque desde el mismo momentos en que Hugo Chávez lidera la revolución bolivariana, ellos lo que ha hecho es reiterar las mismas mentiras que la Corporación Usa les preparó para que repitieran una y otra vez.

Han estado repitiendo, por once años, esa información sobre la presunta dictadura venezolana, donde no hay libertad de expresión, etc., etc., desmenuzando las mentiras, adornándolas, maquillándolas y nada.

Al final, nos hemos conseguido con una oposición sobrecargada mentalmente y a la que se le viene devolviendo, como un bumerán, todo lo que vienen planificando.

Allí tienen la actuación de los diputados de la oposición en la Asamblea Nacional y allí están los pobres estudiantes manipulados y hasta empujados por sus propias madres también manipuladas por la obsesiva y ya enferma oposición venezolana.

La oposición política venezolana pudiese tener otra perspectiva, si sus diversos y variados miembros, pensaran más en la nación, en su historia, en su identidad, sus logros, su transformación y, vitalmente, en los seres humanos que son los venezolanos, por quienes debería expresar su solidaridad. Sin embargo, no es así, lo de ellos es la vida fácil y frágil tamizada por el dinero y los placeres. No piensan ni en el futuro de sus hijos.

¡ Que queda para los demás!



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Pedro Estacio


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