“La mayor parte de los hombres,
emplean la mitad de su vida en
hacer miserable la otra mitad”
La Bruyére
“La ética biófila tiene su principio
del bien y el mal. Bueno es todo lo
que sirve a la vida; malo es todo lo
que sirve a la muerte”
Eric Fromm
Esta distinción que he venido exponiendo, de personas que aman la vida i otras que parecen amar la muerte, lo que no es así, sino la muerte de los demás, de los que los adversan, sea en ideas, arte, ciencia, creatividad, o fundamentalmente en ideologías, en posiciones políticas, aunque casi siempre no tienen ideologías, sino que constituyen una “familia” mafiosa, en búsqueda poder i de dinero. Nada más; lo otro, como para ellos la filosofía, es simplemente paja no mui especial para el ganado. I esa mafia, está en gran parte en el comando de campaña del nada recomendable candidato opositor, porque no creo que la familia normal que le compró titulo i cargos, no está dispuesta a desperdiciar mucho dinero i al contrario, quieren aprovecharse de los billetes verdes que viene del norte. Por eso como dijo esta inteligente segunda vice presidenta de la AN, Blanca Eckou, el signo patognomónico de esa campaña electoral de oposición, la necrofilia: están en el plan B buscando saboteos, atentados i muertos. Ejército, Guardia Nacional, Policía Científica i otras instituciones de orden público i servicios como el Cuerpo de Bomberos, no solamente deben cuidar el Puente sobre el Lago de Maracaibo, los Puentes sobre el río Orinoco, las represas de los sistemas eléctricos, los aéreo puertos, los Ferris de Margarita, Puertos Marítimos, las Minas i cuanta cosa destruida pueda causar daños o desesperación, porque la oposición se sabe perdida electoralmente i están desesperados. Para colmo, abundan las mentes necrófilas i paranoicas. I esta alerta también es para el pueblo en general, ahora bien organizado para combatir.
Recomiendo a los lectores, leer un pequeño pero interesante libro de Eric Fromm (de donde ha sacado muchas de las cosas expuestas), titulado EL CORAZÓN DEL HOMBRE, del cual trataré, para finalizar estos tres artículos, pintar cómo se comporta una mente deteriorada por el odio, la maldad i lo inhumano, en el agredir como fiera salvaje.
“Las tendencias que se dirigen en contra de la vida –dice Fromm− que forman el núcleo de grandes enfermedades mentales (i Capriles i López están ya bastante enfermos) y que pueden considerarle las causas del verdadero mal”. De esas distingue tres clases: la necrofilia, narcisismo y fijación a la madre. El autor, para mostrar, las formas malignas de las tres orientaciones que acaban por conformar el síndrome de decadencia, es al mismo tiempo un estado patológico más grave i raíz de la destructibilidad o inhumanidad de las más graves. Cita entonces las palabras de un discurso del Gral. Millán Astray, en la Universidad de Salamanca, de la cual era rector don Miguel de Unamuno. Este general franquista, cuando comenzaba la Guerra Civil española, tenía como tema favorito gritar ¡Viva la muerte! I lo seguían sus partidarios. Cuando terminó su discurso, Unamuno se levantó i dijo: “Ahora acabo de oír el necrófilo e insensato grito, ¡Viva la muerte!, y yo he pasado mi vida componiendo paradojas en contra...etc. Agregando: Millán Astray es un inválido de guerra, como también lo fue Cervantes; pero desgraciadamente en España hay actualmente demasiados mutilados. Y si Dios no nos ayuda, pronto habrá muchísimos más. Me atormenta el pensar que el general Millán Astray pudiera dictar las normas de la psicología de la masa. Un mutilado que carezca de la grandeza espiritual de Cervantes ,es de esperar que encuentre un terrible alivio viendo cómo se multiplican los mutilados a su alrededor”. Lo que la gente común repite como loros: mal de muchos, consuelo de todos (agregado mío). En ese momento el energúmeno de Astray se levantó i gritó: ¡Abajo la inteligencia! ¡Viva la muerte! (Me parece recordar a un Ismael García, por ejemplo) clamoreado por los falangistas. Pero Unamuno continuó: este es el templo de la inteligencia. Lo que sigue lo dejo a la voluntad del lector, si quiere leer el libro, i para no alargar más.
Lo cierto es que estamos viendo una oposición necrófila i unos opositores paranoicos, otros demenciales i finalmente por qué no, realmente estúpidos o brutos. Escupen hacia arriba, cuando mal ponen a tu patria u ofenden al más grande de los libertadores de la historia, cada vez que pueden, Ahora han sacado un billete con la cara del Libertador, i el valor del documento de pago bancario es de cero (0) bolívares. Una ridiculez, producto de una mente que ha perdido sustancia gris i neuronas en cantidad irrecuperable. Es el narcisismo de los borrachos, como señala Fromm, al individuo que habla de manera superficial i trivial, tal como un chocolatico dulce o un chocolate nuevo que, en su patología maligna le sirve para ofender, casos de Nerón i Calígula o hasta Hitler i Stalin. Además, el narcisismo así, dice el mismo autor, es antagónico a la razón i al amor. I en cuanto a la tercera causa, la relación simbiótica de la madre, una especie de adhesión pre-edípica de los niños i las niñas a sus madres, es más complejo i extenso el hablar como médico i como filósofo; pero obviamente una de las causas fundamentales, de la enfermedad de los necrófilos. I en política, al lado de los dinosaurios, alcatraces i caimanes dormidos de la IV República, siguen desestabilizando todavía, verdaderas momias como Pompeyo Márquez, Claudio Fermín, Eduardo Fernández, Enrique Mendoza, Antonio Ledezma, Omar Barboza, Gustavo El Matacuras Castillo, Gustavo Cisneros, Héctor Ravel, Marcel Granier, El Especulador Zuloaga, Ramos Allup, Carlos Ortega, Henrique Bobolongo Otero, etc., etc., (así como tantas cariátides i brujas femeninas) i quizá la momia más persistente en sacudirse de vendajes, insectos i escaras, como es la de Teodoro Choro Petkoff, quien me recuerda una serie que vi en el bachillerato, en el cine Variedades de Maracaibo, titulada Los Tambores de Fu Manchú. Déjenlo de entrevistar, dejen de presentar en otros programas, sus comentarios estúpidos, (desde que fue candidato presidencial lo diagnostiqué) dejen de nombrar su panfleto Tal Cual, dejen de percibir su mirada extraviada i su boca hundida entre pelambre canosa, que aparenta sin dientes, solamente por semanas o uno o dos meses, i esa momia antimarxista e izquierdosa, desaparecerá en la forma que señala el cura Lückert, o en la película citada, cuando a paso lento llega al ataúd en una pirámide de Egipto, quizá de las más viejas, como la escalonada del Sakara, i la momia Petkoff no volverá jamás. ¡Los necrófilos i las momias, no volverán!
robertojjm@hotmail.com