A veces nos conseguimos con gentes que uno no se imagina qué pensamiento tienen acerca de la vida, porque, con toda sinceridad, pensar en votar por candidato alguno de la oposición significa ir en contra de lo que es la propia vida.
¿Alguien que piense y reflexione con sinceridad en lo que es la vida de las personas podría estar asaltando una embajada de un país, argumentando mentiras y amenazar a quienes están adentro? ¿Qué tiene eso que ver con la vida?
La vida es algo distinto. Es apreciar como en una mujer va creciendo vida en su vientre. La vida es sentir el movimiento del feto, ver nacer, crecer y desarrollarse a ese bebé, la vida es contemplar y disfrutar de sus movimientos, de sus risas. Eso es la vida y para nada está relacionada con la rabia, la ira y el odio, porque, ¿qué persona puede tener odio contra un bebé?
Un individuo que esté llamando a que un grupo de personas salga a soltar su bronca en la calle, arrasando con todo lo que encuentre en el medio de su camino nada tiene que ver con la vida. ¿Alguien que esté diciendo mentiras de manera permanente qué tiene que ver con la vida de una sociedad, de un país?
¡Nada, absolutamente nada!
¿Qué relación tiene con la vida una persona que esté intentando manipular a los demás con informaciones malsanas a través de un medio de comunicación? Eso está completamente alejado de la vida, porque la vida es florecimiento, la vida es construcción de miles de posibilidades para alcanzar un bienestar, un objetivo cualquiera que satisfaga a miles de personas.
¿El asesinar tiene que ver con la búsqueda de una posibilidad de vida mucho mejor que la que se tiene? Es válida la pregunta porque para nadie es un secreto la aberración que constituyó el anuncio de varias muertes ocurridas el 11 de abril de 2002 cuando ni siquiera habían acontecido.
Pero peor que el anuncio comentado, es el hecho que esa mentira en horas tempranas la convirtieron en verdad horas después, con un terrible derramamiento de sangre. Y aquì es donde uno vuelve a preguntarse ¿Esa gente de la oposición venezolana que se involucró en esa dantesca y deshumanizada acción, tiene acaso algo que ver con la vida?
Y en ese actuar es el que tienen que reflexionar los seguidores de la oposición venezolana cuando vayan a depositar su voto porque, de seguir con ellos, van a votar a favor del crimen, de la muerte y el dolor. ¡Si lo hacen, que Dios se apiade de ellos!
Lee el siguiente blog: wwwpertinentes.blogspot.com (Premio Aníbal Nazoa/2010) Mención Opinión)
