La política no acepta errores. Venezuela es un país sui generis, donde golpistas convictos y confesos, asaltantes de embajadas, guarimberos y descargadores de arrecheras hacen vida política como si nada. Pareciera que el tiempo lo cura todo. Los errores políticos en Venezuela no parecieran tener importancia en el espacio-tiempo.
Un caso emblemático es el lechuguino Capriles Radonski, una especie de Rafael Caldera de los nuevos tiempos. Capriles va en búsqueda del record de Caldera en cuestiones de candidatura presidenciales, aunque Caldera gano dos veces y el lechuguino ha mordido el polvo en dos ocasiones. Radonski participó activamente en el golpe de facto del 2002, allí, trato de invadir la embajada de Cuba, también fue participe como alcalde de Baruta, de la persecución a dirigentes del chavismo, buscando sus linchamientos y el escarnio público. Después de esta acción terrorista, se dedicó desde su reducto de alcalde del sifrinaje a erosionar y torpedear al proceso revolucionario. Activista en reuniones en España y los EEUU, para derrocar al Presidente Hugo Chávez, también se colocó en la aventura del sabotaje petrolero y lockout patronal de finales de 2002 y principios 2003. Todo terminó en fracaso para él y sus adláteres.
Después vino su otra etapa como “líder” de ese esperpento denominado MUD. Fue a unas presidenciales contra el Presidente Chávez en donde no vio luz. De nuevo va a otras presidenciales, esta vez contra Nicolás Maduro y por esas cosas que pasan, llega muy cerca de ganar las elecciones. Pero en vez de reconocer su derrota y así, mostrarse como un político de altos niveles, hizo todo lo contrario, llamo a sus bandas a provocar disturbios que ocasionaron muertes y desolación en las ciudades más importantes del país El lado oscuro de este fascista se manifestó de tal manera, que muchos de sus seguidores lo abandonaron. Hoy invita a votar, pero nadie le cree, su discurso sistemático contra las instituciones venezolanas especialmente contra el CNE, lo han convertido en una especie de anárquico de la ultra derecha.
El sábado 8 de diciembre se celebran elecciones para alcaldes y consejos municipales de todo el país. Las cartas están echadas. Según los números el Gran Polo Patriótico, conformado por el PSUV y sus aliados deben de barrer las elecciones, en números de alcaldes y concejales, como también en número de votos. Las principales alcaldías de Venezuela como son Maracaibo, Valencia, Metropolitana de Caracas, Iribarren de Lara, estarán si todo se concreta según las encuestas del lado de la Revolución Bolivariana. La MUD ganara en alcaldías de menor peso y representación política, pero tendrá su espacio en el acontecer diario de nuestro sistema político.
La pregunta:¿ Capriles Radonski y sus allegados, volverán a cometer los errores del pasado, y no aceptar los resultados?.. Ojalá y no sea así. La política en Venezuela no termina este domingo 8 de diciembre, vendrán otras elecciones, se presentaran coyunturas de diferente índoles, y posiblemente surja una nueva y valorada oposición, dejando atrás, este parapeto llamado MUD.
Recordándole a Capriles y sus facinerosos que el Poder de Fuego está del lado del gobierno. No se Equivoquen¡¡¡