En 2013 conocimos una insólita decisión de la Alcaldesa de Maracaibo Evelin Trejo, esposa de Manuel Rosales, prófugo de la justicia y que recibió paliza electoral cuando fue candidato presidencial compitiendo con Hugo Chávez.
Electa en sustitución de su consorte huido, Evelin autorizó envenenar perros y gatos en la capital zuliana, pero fue más allá pues el veneno utilizado no era efectivo de inmediato sino que producía en los indefensos animales, atroces dolores, naturalmente previos a la muerte.
La animalada de esta Alcaldesa opositora que en Miraflores le guiñó un ojo al Presidente Maduro, (vimos por televisión tan amistoso gesto), dio luz verde a disociados marabinos que aprendieron la lección y en rabiosas manifestaciones con sobredosis de odio, entonaban el himno anticonstitucional “Maduro vete ya…” y les pareció protesta pacífica asesinar a balazos perritos y gaticos, según noticia del diario Panorama.
Esos manifestantes “sociedad civil”, cortan árboles con motosierras o amarrándoles guayas y sogas para derribarlos utilizando rústicos y camiones, a fin de contribuir a las güarimbas con barricadas y quema de basura, contaminándonos y estúpidamente contaminarse, secuestrando a sus propios vecinos a fin de obedecer a María Machado y Leopoldo López, en la muy pacífica sugerencia de “seguir en las calles, hasta que este gobierno renuncie…”.
Si a semejante infantilada antidemocrática de instigación a delinquir, le unimos la suspensión de celebrar Carnaval en seis muncipios de los 335 que tenemos en Venezuela, e igual medida dictada por la Gobernación de Miranda, llegamos a la conclusión de por qué han sido, son y serán minoría.
90 de cada 100 venezolanas y venezolanos, amantes de la paz apoyamos los diálogos y reuniones de gente sensata y las conferencias convocadas por el Presidente Nicolás Maduro y el gobierno revolucionario.
Quienes no asisten, tampoco condenan de manera contundente los hechos violentos y parecen dar visto bueno a derribar árboles, o asesinar perros y gatos como parte de “manifestaciones pacíficas…”.