El mes de mayo, mes de los trabajadores y trabajadoras, ha empezado con un escalamiento en el conflicto, en esta guerra no convencional que se viene aplicando en Venezuela desde 1998, pero que ha tenido un recrudecimiento en este último año y medio. Estamos pasando por el momento más complejo, y en estos momentos, la etapa más peligrosa en contra de la Revolución Bolivariana.
Quiero, para poner las cosas en su contexto, por eso me referiré en primer término a lo electoral. Ya los técnicos de la Junta Nacional Electoral han elaborado algunos escenarios de cara a la convocatoria y a fijar la fecha de los comicios parlamentarios de este año 2015. Se manejaban tres fechas tentativas: 22 de noviembre, 29 de noviembre y 6 de diciembre de 2015. Observando el extraordinario programa de Hernán Canorea, "Cantar de Gallos", transmitido de lunes a viernes por Venezolana de Televisión, señaló que estos técnicos se inclinan en realizar dichas elecciones legislativas para el mes de diciembre de 2015, sólo faltaría que esto lo apruebe definitivamente la Junta Nacional Electoral y de ahí, pasar a la discusión y aprobación por parte de los rectores del CNE. La fecha más probable sería el 6 de diciembre de 2015, tal y como lo señalamos en un artículo que escribimos hace más de un mes, y que se puede conseguir vía web en aporrea y otros portales digitales que se tomaron la gentileza de publicarlo.
Por otro lado, la ofensiva y el lobby internacional ha arreciado. Mitzy Capriles de Ledezma, Lilian Tintori, pero sobre todo la labor de Milos Alcalay, quien aprovechándose de la experiencia diplomática que acumulo en el servicio exterior venezolano, anda tocando las puertas de la derecha a nivel internacional. No es casual ni fortuito que el club de los ex-presidentes de derecha de la América Latinocaribeña se hayan pronunciado en contra de Venezuela; el congreso español abogue por la libertad de terroristas como Leopoldo López, Daniel Ceballos y otros tantos que enlutaron hogares de familias venezolanas; el Daily Mail On line de Inglaterra ha calificado a la República Bolivariana de Venezuela como "criminal", y voceros de la derecha que hacen vida en el parlamento brasileño, se han pronunciado también en contra de Venezuela. Cualquier ardimiento producido por la derrota propinada al imperialismo yanqui y a su operador político, Barack Hussein Obama, en la pasada Cumbre de las Américas en Panamá, no es pura coincidencia.
El frente interno no escapa a momentos particularmente difíciles por los que estamos atravesando. Alcedo Mora, dirigente popular, aún se encuentra desaparecido, y nadie da razón ni menciona su caso; los "apagones" en el occidente del país forman parte de la cotidianidad de dichas zonas; se ha hecho un atentado al jefe de seguridad de Winston Vallenilla, Presidente de la Televisora Venezolana Social (TVES), los trabajadores y trabajadoras de Sateca, en el Municipio Chacao, que tienen una justa lucha laboral y reivindicativa, han sido reprimidos de la manera más salvaje por la policía de dicho municipio, y no conforme con ello, a sus líderes, han sido objeto de toda clase de amedrentamientos y amenazas, incluyendo amenazas de muerte; los Valles del Tuy, se han vuelto particularmente muy violentos los últimos fines de semana, sobre todo la crudeza y violencia de los ataques se han centrado en urbanismos de la Gran Misión Vivienda Venezuela; en el estado Bolívar, un camión que tenía cauchos, fue saqueado por particulares que tenían necesidad de los mismos, pero esto se concatena con la advertencia lanzada por Pedro Carvajalino en su programa "Zurda Konducta", al señalar que empezarían a ocurrir "extraños volcamientos" de gandolas y camiones contentivos de alimentos, (también de bienes y servicios para nuestro pueblo, agregaría yo) y que algunos medios empezarían a darle extrañamente un matiz publicitario especial. A eso hay que agregarle ese matiz que le dio el diario regional de extrema derecha, Correo del Caroní, a esta última información que menciono.
Pero la información más escalofriante, versa sobre un macabro hallazgo que paso de seguidas a comentar: Se trata de que fueron encontrados siete cuerpos sin vida en avanzado estado de descomposición (seis hombres y una mujer) en una fosa común ubicada en medio de una trocha que conduce al corregimiento San Faustino, ubicado en la zona limítrofe entre Colombia y Venezuela, en el sector La Mulata, Municipio Pedro María Ureña del estado Táchira. Llama la atención, de que los cadáveres masculinos estaban uniformados de "militares", por lo que se presume, estas siete personas habrían sido asesinadas por encontrarse al margen de la ley, además de que el sitio es utilizado como "aliviadero" de cadáveres de personas asesinadas en el vecino país. ¿ Paramilitares?
Pareciera que el tema de la guerra económica e inflación sea desplazado un tanto de las principales matrices de opinión, para retomar y ubicar como tema de primer orden el tema de la criminalidad y la violencia "producto de la delincuencia". Pero, lo que no se detiene el común de las personas es en analizar, que los modus operandi de los últimos crímenes de impacto que han ocurrido en estos últimos días, incluso en las últimas horas, no reflejan que sea de delincuencia común, ni siquiera forman parte de los que aplica la delincuencia que opera en nuestro país, sino que antes bien, contiene importantísimos elementos importados. ¿Tendrá esto que ver con los contactos hechos por el presidente de la Polar, Lorenzo Mendoza, a la empresa gringa Blackwater, contratista de paramilitares y mercenarios, para la activación del denominado "Plan Garra"? ¿O con lo denunciado en los "mazazos" del diputado y presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, lanzados desde el Programa "Con el Mazo Dando", del miércoles 6 de mayo de 2015?
La derecha busca que el Gobierno centre su atención y esfuerzo político-económico en resolver "un peligro" que realmente ellos no tienen trazado dentro de su plan estratégico para tumbar a Maduro. Lo utilizan sólo para dispersar. Inducen a las fuerzas revolucionarias a batallar en escenarios reales (y conflictivos), pero que no forman parte del verdadero Plan Estratégico, orquestado y financiado por EEUU. Una de las características de la Guerra No Convencional (GNC) desarrollada en Venezuela, consiste en obligar al Gobierno a mirar "un peligro" que oculte las verdaderas intenciones golpistas. De esta manera, van ocasionando un desgaste táctico, humano, político y económico. El Gobierno va ganando batallas y batallas, pero son escenarios montados, astutamente por la derecha, sólo para desviar la atención.
En Venezuela existe un peligroso cóctel narco-paramilitar, advirtió ayer el Ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Gustavo González López, y no en balde ha sido objeto de ataque por parte de los personeros de la "Mesa de la Unidad Democrática" (MUD), al exigirle a este servidor público, "que presente un plan de seguridad". La derecha está reagrupando sus células terroristas en Baruta, Sucre y Chacao. Lo mismo ocurre en las zonas fronterizas. Las operaciones psicológicas se centran en elevar los niveles de insatisfacción, para incrementar la histeria colectiva y poder actuar.
El verdadero plan no es constitucional. No es electoral. No está planteado en el plano de la Alta Política. El plan es criminal. "¡ALERTA VENEZUELA! Un gran desastre se avecina…", publicó ayer una de las plataformas criminales de difusión que emplea EEUU en Venezuela.
El plan es claro, se busca promover las tesis del Estado Fallido y el Estado Forajido. El Estado Fallido, a lo interno, para dar la sensación de que las instituciones venezolanas, "no funcionan"; el Estado Forajido, para el lobby internacional, a los fines de justificar la intervención extranjera.
Me preocupa sobremanera, que estos inusuales hechos violentos, nuestra sociedad los esté viendo como algo normal. Sin duda, al pensar en el título de este artículo, hubiese sido mucho más fácil y sencillo achacar toda la responsabilidad al Gobierno, pero no, la responsabilidad no es sólo del Gobierno o del Estado si incluimos a los otros poderes que lo conforman. La responsabilidad también es nuestra , como pueblo, como sociedad, que debemos reaccionar y movilizarnos en contra de estos hechos. No queremos violencia, sino la paz.
Culmino estas líneas, condensando todo lo expresado, en estas afirmación: Estamos viendo y evaluando la Alta Política y consideraciones de Estado, pero, nos están reventando por las cosas que parecen más sencillas: (Abastecimiento, Seguridad, Empleo, Educación, Inflación, Movilidad, Bienes, Servicios, etc.)
¡Bolívar y Chávez viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Hasta la Victoria Siempre!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!