Hasta hace pocos meses la oposición venezolana gritaba a todo pulmón que se adelantarán las elecciones presidenciales, y con esa consigna fueron a las calles, en dos ocasiones a matar gente, y a herir unos cuantos más, para que el gobierno se sintiera presionado y abandonara el poder o adelantara las elecciones. Desde afuera Almagro y muchos otros injerencistas apoyaron la solicitud de los integrantes de la MUD. Pero hoy que llegó el momento de ir a elecciones como corresponde en la Constitución Bolivariana de Venezuela, para ellos no es el momento. Son ilegítimas, no cumplen las condiciones, y cualquier cosa que les dé chance de seguir confabulados, con gobiernos extranjeros, para provocar en Venezuela una ola de violencia que solo traerá más destrucción y pérdidas de vidas humanas e inocentes.
Desde la OEA su Secretario General vaticina el nuevo triunfo de la revolución Bolivariana, calificándolo desde ya, como seis años más de dictadura, eso si nos confunde, porque un dictador no lo elige el pueblo, se impone, como se impuso Carmona Estanga en el 2002, como lo hizo Temer en Brasil, y así sucesivamente muchos otros que han tomado el poder por asalto, y cometen atrocidades en nombre de ese poder usurpado. ¿Qué más dictadura se le puede llamar a una elite política que le niega a sus seguidores el derecho al voto? El pueblo quiere votar, lo ha demostrado inclusive dándoles candidatos ganadores en las últimas elecciones de gobernadores y alcades ¿Por qué si saben que el pueblo está de su lado totalmente, no aprovechan este momento para sacar a Maduro del poder, que es lo siempre han querido, ¿Cuál es el miedo? Pero estamos claro que no es miedo, son intereses, le dicen a Maduro dictador pero son ellos quienes quieren tomar el poder por asalto, siempre lo han querido, porque saben que pueblo no tienen, no el suficiente para llegar a dónde quieren, por eso han recurrido a instancias internacionales pidiendo ayuda y si tenemos dudas el señor Julio Borges suelta perlas como esta: Desde la Asamblea Nacional frenamos el financiamiento internacional al gobierno por haber dejado de lado la democracia. Hoy las instituciones financieras del mundo están del lado de los venezolanos y reconocen a la AN como el único poder legítimo en el país. Seguiremos adelante junto a la comunidad internacional hasta lograr que Venezuela cambie de rumbo. Y eso es poco para lo que dice, porque el se da el tupé de exigirle a grandes corporaciones extranjeras que le niegue a Venezuela cualquier financiamiento y negociación que el gobierno bolivariano le solicite.
Entonces son, o no son los culpables de la crisis que vive el pueblo venezolano, los países viven de las importaciones y exportaciones, eso no es un secreto para nadie, porque ningún país produce todo lo que requiere para surgir y satisfacer las necesidades de su gentilicio. Por lo tanto tiene que recurrir a traer desde afuera lo que no produce la nación, pero si encima de esto nos conseguimos con personajes como los que nosotros ostentamos en la oposición, que piden frenar las entradas de productos y cualquier otro financiamiento al país a nivel internacional. ¿A quien creen que afectan? Ese balazo va directo al pueblo ¿Con que finalidad? Asfixiarlo para que se rebele, eso fue lo que sucedió en el Caracazo de 1989, solo que en ese momento ellos no esperaban esa reacción por parte de la gente, que ellos tenían sumida en la miseria y el abandono, y no aprendieron la lección como se debía, sólo lo tomaron como ejemplo, para saber por dónde se le hace mella al pueblo para que reaccione. Pero tampoco les ha funcionado esta vez, y han ido mucho más allá de las fronteras, para castigarnos por la osadía de no salir a matarnos entre nosotros. Y con vil descaro se atreven a decir que las instituciones financieras del mundo están del lado de los venezolanos, y han demostrado que si lo están. Pero no de nuestro lado, sino en contra, el día que nosotros pidamos morir de hambre, ese día nos acercaremos a Julio Borges y su séquito para que hagan su mejor trabajo, porque eso si lo saben hacer bien ¡Traidores!.
Ya basta de hablar de dictadura en Venezuela, quien si tiene una verdadera dictadura en el seno de su organización, es la oposición que juega con la voluntad del pueblo y le tiran a los lobos aquel dirigente que recurra al camino de la democracia con su participación.
Vamos a elecciones y si Maduro saliera perdedor en la contienda, estamos seguros que lo aceptará con dignidad, y respeto al soberano. Y después nosotros nos encargaremos de que no se vulnere, ni se cambie un solo párrafo de la Constitución y lucharemos por nuestros derechos adquiridos.
No le tengan miedo al CNE, y tampoco a Maduro él es un hombre honesto y de palabra, preocúpense por quienes tienen el poder de poner y quitar gobiernos, porque vamos a estar ojo de águila, más nunca volveremos atrás, tampoco dejaremos de ser chavistas y menos revolucionarios y mientras eso sea así, estaremos en la lucha, rodilla en tierra, por esta Patria.
