¿Qué está pasando en el mundo que Venezuela se estremece de rabia y de alegría a la vez? Pues se le ha ido un líder que hasta no hace muchos días después del 28 de julio fue aclamado por la oposición como el candidato "ganador" de las elecciones presidenciales que, con MCM vis a vis quiso imponerlo en el poder desde la misma noche del 29 de julio en adelante que hasta a lo Nerón lo celebró en pleno S-XXI sin importarle un carajo a quien se llevaban por delante, claro está que las victorias se celebran pero no con actas chamuscadas y, desde ese día a nivel mundial hasta don Rafael habló.
Una mayoría de opinantes -sean quienes sean- con pocas excepciones se inmiscuyen en la situación política del país y, como lo que se dice se sabe de inmediato de acuerdo al cotilleo de las redes, el que puede se impone o sino siembra sus dudas y las respuestas no llegan, por lo que el cuchicheo sigue día tras día y, la vaina de las elecciones sigue en remojo mientras las dudas gotean.
Pero lo cierto es que la UE y los EEUU y sus cómplices se han quedado sin presidente, porque según ellos era, Edmundo González Urrutia que, con un 67% acaparó la mayoría mientras, Maduro se quedó atrás con un 30%, por lo que más claro no canta un gallo, pero ninguno de ellos ha mostrado el basamento del supositorio que le quieren meter al mundo, incluyendo a Maduro y su gobierno que calme con demostración lo que afirman, ya que las actas por ninguna parte aparecen, a no ser que lleguen muy pronto a España que ha corrido con la suerte de que nunca quisieron a Bolívar como héroe venezolano y ahora quieren a Edmundo González Urrutia que de acuerdo a la delicadeza verbal de Pedro Sánchez es su gran "héroe" que, pronto se sabrá de las grandes batallas emprendidas y logradas que hasta Rodríguez Zapatero sea su gran mentor a no ser que haya muchas noches de tinieblas tras del poder.
Quien no ha dicho ni pío es María Corina Machado que, hasta posible es tenga una gran crisis de angustia prematura al no esperar Edmundo su toma de poder que sería en enero del año por venir y, ella sola sin el candidato debe estar en penumbra en una vorágine de dudas con Maduro bochando a su gusto que hasta las Navidades las adelantó y le quitó el pan de jamón de su boca y su destino se ve negro muy negro y solitario dentro del planetario de sus comodines que no le quedan, a no ser que después de noviembre la vicepresidenta Kamala Harris como posible presidenta de los EEUU le sacuda sus angustias problemáticas y la lleve al paraíso de la lista de espera que nunca es tarde cuando la dicha está por llegar.
Lo que si es seguro dentro de lo posible es que, Edmundo González Urrutia, está en España, que después de un largo viaje de horas con todas las comodidades que se le dan a los "héroes", se pudo tomar dos copas de champaña en primera clase a la salud de los venezolanos que dejaba ensartados como pajaritos volanderos y en su mente acariciaba sin rencor alguno "Cabeza de hacha", la canción que sonó años atrás cuando el dictador Marcos Pérez jiménez, "Que ya me voy de esta tierra y adiós. Buscando yerba de olvido olvidarte. A ver si con esta ausencia pudiera. En relación a otros tiempos olvidarte. He vivido soportando martirios, martirios. Jamás debo de mostrarme cobarde. Arrastrando esta cadena tan fuerte. Hasta que mi triste vida se acabe. Ay ya me voy de…" Y con un sofoco de perturbación Edmundo pensó, en MCM, y dijo, que se joda, que se joda. Roncó un buen rato entre sueños turbios muchas vainas que ya no recuerda y llegó al Aeropuerto de Barajas cansado y turulato, distraído, el cambio de horario lo viró un poco, es decir, el jet lag, le pegó y pensó en la fábula China del, "viejo tonto que removió las montañas", y él, perdía a Venezuela sin saber lo que le espera en España como el espanta pájaro que será en lo adelante. Y solo le restó decirse que, sea lo que sea, pero presidente, ni de vainas…
Sus ínfulas las traía acojonadas de vergüenza y con ellas llegó.