Carta abierta a Juan Vené, en respuesta al caso Magglio Ordóñez
Estimado Sr. Vené:
He leído con atención su tradicional columna “Juan Vené en la pelota”, publicada en el diario Últimas Noticias el día lunes 16 de los corrientes y en la cual manifiesta un rechazo contundente al abucheo del cual fue víctima nuestro compatriota Magglio Ordóñez. Ciertamente, pertenezco a esa proporción abrumadoramente grande de venezolanos que repudiamos tan deleznable actitud, que sólo puede ser justificada por mentes disociadas, que han perdido toda capacidad de raciocinio. Aún cuando en ese artículo defiende la libertad de cualquier ciudadano de tener la posición política que desee, es menos asertivo cuando de repartir responsabilidades se trata.
Con el respeto que merece su reconocida trayectoria como periodista especializado en el béisbol, no encuentro justificación alguna para la forma con la que se refiere al Sr. Presidente de la República, al decir que, cito textualmente: “Algunos venezolanos han abucheado a Magglio en el Clásico. Craso y ridículo error. Copian el estilo agresivo y gritón de borracho callejero en madrugada dominical, que adopta el presidente Hugo Chávez en sus alocuciones”. Tales comentarios, no sólo constituyen una falta de respeto a la investidura de la figura presidencial, sino que muestran la intolerancia existente y la incoherencia de su discurso: Por un lado, se izan las banderas de la tolerancia, del respeto y las libertades políticas, condenando la violencia y los intereses mezquinos de algunos, pero por el otro, el lenguaje utilizado para dirigirse al Presidente de TODOS (si señor Vené, de todos) los venezolanos es peyorativo, insultante y bastante intolerante, por decir menos.
Adicionalmente, muestra a quienes abuchearon a Magglio Ordóñez como víctimas, al hacer recaer las culpas de su mezquina y apátrida actitud sobre las espaldas del Presidente y de los dirigentes opositores, con el argumento de que “… esos bocasueltas de las tribunas no son culpables. Es que sólo siguen ese patrón trazado en Venezuela, tanto por Chávez como por quienes dicen ser líderes de la oposición. Ellos han sido los culpables de la división del país en dos mitades irreconciliables de chavistas y antichavistas”. Perdóneme Sr. Vené, pero no es argumento utilizar la polarización política existente para justificar la ausencia de criterio propio, eso es aún más grave que decir que actuaron en nombre de la libertad de apoyar las ideas políticas con las que simpatizan.
En la vida, al igual que en el juego, todos estamos obligados al cumplimiento de las normas o reglas, cada uno es responsable de las faltas que comete y no podemos excusarnos de su cumplimiento escudándonos en actitudes o comportamientos ajenos. Teniendo las reglas claras, aunque el lanzamiento sea bola, strike es strike si el bateador pasa el bate, estamos obligados por civismo y comportamiento democrático a respetar las autoridades libremente electas y a todos nuestros conciudadanos, independientemente de su posición política.
Me uno a su argumento cuando manifiesta que: “Se usa la violencia cuando la razón, la inteligencia y la sensatez han sido vencidas por la ignorancia o por intereses mezquinos…” por eso no puedo aceptar que al mismo tiempo que llamamos a la concordia y entendimiento entre las partes, insultemos a una de ellas. Esta inconsistencia nos pone en un terreno fuera de regla, donde cada novena jugaría según sus propias reglas y conveniencias, sin someterse al convenio de las normas vigentes.
Para finalizar, por lo bochornoso del comentario despectivo hacia el Presidente e indirectamente hacia todos aquellos que le apoyamos, hago mía su recordada frase, claro está, aunque en sentido inverso, para decir: “No me la vuelvas a poner”.
(*)Dr. Antropólogo-Sociólogo
Rector de la Universidad Iberoamericana del Deporte
pedro_garciaa@yahoo.es