A Cinthya Machado Zuloaga se le cae la cara de vergüenza. Se coloca sus manos en los ojos y dice que no quiere ver a nadie. El mesonero se acerca con la botellita de agua Evián y el café negro. Ve a Cinthya y se persigna y luego coloca sobre la mesa lo que trae en las manos. Y se va de espaldas.
-Nuestros estudiantes han puesto un espectáculo penoso. Ya no tenemos vergüenza, No tenemos ideales. No tenemos imaginación. No tenemos inteligencia. No tenemos oposición.
Y se detiene. Saca de su cartera Prada un pequeño pañuelo y se lo pasa por los ojos. Está llorando la princesa. Está triste, muy triste, la princesa.
- Verlos allí, con los traseros al aire, me di cuenta de que eso es lo único que tienen para dar. No tienen una idea. No tienen creatividad. Y qué lamentable. Uno ya no tiene en quién creer. Te confieso amigo que aquello daba pena ajena. Hemos dado motivos para la burla. Ellos han dejado a la oposición desnuda. Mi padre está que no quiere saber nada de Ramos Allup, y de Teodoro, y Luis Miquilena, y del Ismael García ni se diga. No tenemos a quién defender, amigo.
Agacha su linda y preciosa cara y solloza por un momento. Me tomo el café y espero. Sigue triste la princesa. Se quita la mano derecha de la cara, y dice:
- Yo no voy más nunca con esos estudiantes a ninguna parte. Si quieren enseñar el trasero que se tomen las fotos y las monten en Internet como lo hizo Julio Rivas, y que resuelvan sus problemas eróticos entre ellos, pero no que se pongan a dar la espalda al país, me imagino que tu Presidente debe estar muerto de la risa, porque se la han puesto en bandeja de plata. Es infantil. Es estúpido. Es imbécil, como diría tu ídolo Teodoro Petkoft.
La gente que pasa cerca de la mesa donde estamos sentados en el café del Centro Comercial San Ignacio, ve a Cinthya con admiración, porque a pesar de que está triste, su cuerpo sigue irradiando salud y deseo.
- Roberto, así no se llega a ninguna parte. Se han burlado hasta el cansancio de esos muchachos porque ellos dieron el tema. Y de Julio no te quiero hablar, ni estudiante era y lo estábamos vendiendo como estudiante, y entonces ¿quién va a creer en nosotros? Y para colmo salió un loco diciendo por allí que él proponía tres candidatos para el 2012: Pablo Pérez, Léster Rodríguez y Cecilia García Márquez, en fin amigo, todos estamos enloqueciendo. Yo no soy vulgar, amigo, pero te diré que, mientras el pueblo pela bola, nuestros estudiantes pelan culos.”
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