No tengo trono ni reina
ni nadie que me comprenda
pero sigo siendo el rey
José Alfredo Jiménez
pero sigo siendo el rey
José Alfredo Jiménez
Por los vientos que soplan a diez años de Revolución Bolivariana en nuestro "Táchira Grande" (que recién el ciudadano gobernador Dr. Mazamorro ha descubierto o hace empeño en ello, como su anterior colega de gobiernerías, quien también tenía su flamante lema -subcontratado quizás a Rendon Group o a ARS publicidad- como El Gobierno de la Participación de su familia -nada que ver con la candidata de marras al miss Táchira, Mónica, y su actual gestión de propiedad familiar heredada de su consorte- junto a aquella banda de los "parroquia" caraqueños que hicieron la revolución económica -contratos de obras públicas, exquisitos guisos, donaciones terrenales y dádivas divinas por mandato de Dios, hasta que borraron de un plumazo a Banfoandes, compraron todos los cines para los evangélicos, llenaron la ciudad de templos religiosos como mierda de pollo, pintarrajeando paredes a diestra y siniestra con los diez mandamientos de la manipulación sionista como propaganda política en todos los confines de nuestra región, que ya de por sí bastante asfixiada estaba por la más ramera de todas las religiones hasta la saciedad, sin invertir ni comprar una sola casa para nuestra sede del PSUV -el cojo Walter Márquez, buen apostador polítiquero, una vez prestó la suya para el MVR en tiempos de cosecha cuando haciéndose el indio fue embajador de la India-, estrategia admirable de los adecos que en cada barrio implantaron una sucursal del "partido del pueblo" y por eso estamos como estamos) sin dar pie con bola, porque miren ustedes estos flamantes "revolucionarios": predicadores -como los susodichos y prevaricadores también- del socialismo del siglo XXI, en el sempiterno negocio de la manipulación política, recurriendo a todo símbolo a que haya menester, mientras resignadamente, desde el gallinero -porque la barrera es algo inalcanzable-, el soberano ve los toros, en tanto estas castas privilegiadas al compás del jingle bells, en verdadero espíritu de lucha cristiano y navideño, quizás anden en el corri-corri de aumentarse sus magras dietas, todo producto de la incontrolable inflación generada por el malsano capitalismo y los factores de oposición que como María Cristina nos quieren gobernar y no nos dejan multiplicar los peces ni los panes prometidos en la campaña admirable que nos llevó de ser unos pelabola a unos pate'rolo por ahora.
De acuerdo al paneo anterior... no nos agarra fuera 'e base lo reportado por los Cayaperos antichepacandela del colectivo juntador de palabras e imágenes Rajuli-Voyeristasamateur.com de la ventana indiscreta de Guásimos, donde los mirones no son de palo -pero si provoca dárselos a esos balurdos- que permiten incubar los distorsionados valores que adecos y copeyanos en sus gloriosos años de reinado universal -bajo égida de miss Osmel Sousa, Cisneros & Cía-, pervirtiendo bajo patrones capitalistas de extorsión y explotación la verdadera esencia y belleza de la condición de ser mujer, la mayor parte de los capos del narcotráfico recluta sus amantes en concursos de belleza, clonada reproducción de los aparatos ideológicos de propaganda del sistema de dominación hegemónica el cual enfrentamos al declararnos anti-imperialistas, a menos que sea mera retórica para ser asalariado del estado, es lo que hemos visto reproducirse en las instalaciones de la UBV Táchira, ah malhaya misterio o ministerio de mujer, que con todos sus fueros de alienación, hasta en nuestros emblemáticos predios académicos, se ha logrado infiltrar tal degradación de la heroica mujer venezolana, digna heredera de Matea, Hipólita, Luisa Cáceres de Arismendi, Ana María Campos, y en nuestro patio María del Carmen Ramírez.
Reiteramos que no nos sorprende lo expuesto antes, y por qué el fascismo -como el Plan colombia- instaló sus bases en nuestra región. Los patéticos resultados de los últimos procesos electorales son baremo para medir la mediocridad de esa "vanguardia política" que medrando, al igual que sus colegas de oposición, de los dineros públicos, su labor ha sido una oda al nepotismo, al aprovechamiento o enriquecimiento personal. ¡Son la quinta columna de la revolución! El chavismo con Chávez o el chavismo sin Chávez les garantiza iguales dividendos. E igualmente, a estas alturas del juego, no es extraño que un diputado elegido por la oposición a la asamblea nacional en nuestro estado, esté igualmente inscrito en el PSUV.
Mientras cuelgue la piñata petrolera siempre habrá quien quiera caerle a palos, pero no todos entrarán a la fiesta, 117 instituciones nacionales todavía restan en nuestro predio de gobernabilidad gentilmente compartido con Mazamorro, y sus patrocinantes sin rostro... <<Lo arrecho -como dice la gente del pueblo- es que no se sabe cuáles son esas instituciones en su mayoría, ni quienes usufructúan sus cargos -orgullosamente escuálidos en su mayoría como lo son los ganapanes del SENIAT y otras canonjías- y por quiénes -bajo qué criterios o enroques- fueron elegidos en estos tiempos de legítima participación popular.>>
La elección de una reina pareciera ser algo casual cuando cada quién elige la suya, y si a ver vamos no es juego inocente tal nostalgia monárquica que bien temprano es inyectada en el carnaval escolar . Ninguna fémina se elige reina por sí misma, eso no está en la condición existencial de la mujer, sólo el poder asecha y seduce a la princesa, haciéndola cómplice en su próxima acción que va a ser la instauración temporal de su reinado, donde podrá ostentar su corona y satisfacer sus más anhelados caprichos.... Sucede que casi siempre, cautivados por la majestuosa belleza de la reina, ignoramos el interés y el sentido del poder que subyace detrás de toda elección. Desde la más temprana infancia tales misterios no se revelan porque pierden su encanto o su efectividad, no sabemos si aún de adultos estemos concientes de ello también.
Después del susto a Galileo Galilei -retractándose- y enseguida que la iglesia eliminó el limbo sin avisar, si hay quien se chupe el dedo todavía, pasamos a creer que los camaradas patrocinantes o promotores del reinado de la UBV Táchira no ignoran el significado de ninguna elección, así como aquellos "elegid@s" del conspícuo PSUV regional en terapia intensiva desde que nació, mientras la canción de Jose Alfredo se sigue entonando con sentimiento popular .