Muchas cosas quedaron por decirse en la breve conversación que se realizó ayer por la tarde en la carpa del parque Los Caobos de Caracas. Sin embargo, las cosas que se dijeron tienen mucha importancia para el futuro próximo de la política del Estado con referencia a la literatura y los libros.
Quedó manifiesta la acción transformadora que se ha llevado en la política editorial del Estado, tanto desde las empresas editoriales estatales: El Perro y la Rana, Monte Ávila y Fondo Editorial Ayacucho; las cuales, navegando a favor de la corriente revolucionaria, han avanzado lo más que han podido por cambiarlo todo, para que el ámbito del libro y la lectura en Venezuela deje de ser “más de lo mismo”.
Quedó evidente también el descontento de algunas pequeñas editoriales privadas, cuyos dueños aún no han comprendido lo ventajoso que es para sus objetivos, el cambio social que se está realizando en nuestro país. Queda mucho por conversar con ellos, porque es indispensable que todas las personas involucradas en el “hecho literario” dejemos de mirarnos el ombligo para observar lo que está ocurriendo a nuestro alrededor, y lo que está ocurriendo es la Revolución.
Finalmente, quedó demostrado que falta mucho que hablar sobre el tema de los Derechos de Autor, y la contrapropuesta socialista de una nueva doctrina, popular y revolucionaria, acerca de los derechos culturales, expuesta brevemente por Arlen Piñate -Directora General del SAPI- la cual implica echar de lado los contenidos y los lenguajes de la doctrina neoliberal de la propiedad intelectual, para desarrollar una política cultural soberana.
Una articulación pronta y completa, entre los entes culturales del Estado y el SAPI, es necesaria para que se dé un intercambio de ideas que permitirá unificar los pensamientos y los lenguajes porque, pese a que hubo una aparente diferencia en la conversación, bastará compartir los códigos lingüísticos para darnos cuenta de que, en el fondo, tenemos el mismo pensamiento.
Derechos de autor como propiedad intelectual vs Derechos culturales socialistas, es un tema que proponemos para la discusión fraternal, con el fin de unir los criterios de los funcionarios de ambas instituciones, que, juntas, constituyen una fuerza revolucionaria que difícilmente podrá ser detenida por los opositores y obstaculizadores, abiertos y embozados.
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