Los albores de la cumbre de la OTAN viene generando mucho de qué hablar en estos momentos donde la tensión mundial está centrada en ucrania y los efectos inducidos con el movimiento de armas y tropas en los países que integran la alianza policial mundial (la OTAN), es un mensaje no solo a Rusia sino al mundo entero, la posición guerrerista y las ansias de dominio son los primeros puntos tomados en esta agenda, ya muchos perfilan un escenario igual a la guerra fría y el sistema financiero trasnacional gira la orden de iniciar la feroz campaña en contra de Moscú, campaña inyectada por los acontecimientos de ucrania como trofeo del imperialismo norteamericano pero que sin duda alguna terminara por iniciar a los que muchos les han temido "una guerra a escala global" con incidencias atroces para la humanidad.
El kremlin ha enviado mensajes diplomáticos pero sin embargo se ido rearmando en función de una agresión cada vez más latente donde las amenazas por parte del imperio global que ya no le temen a las cientos de cabezas nucleares de la antigua URSS si no que emplazan a despertar al gigante nuclear donde el mismo, tiene una estrecha relación con China pero esta tiene sus propios problemas locales pero, dado que ambos son los principales enemigos de la "democracia occidental" modelo que se impone a sangre y bombas inteligentes cuando de imponerla se trata. Entonces la cumbre contra Rusia es un cerco mediático internacional que permita crear y justificar a un monstruo que solo se encuentra en las viejas películas de Hollywood hechas para hacer quedar a los E.E.U.U. y sus aliados como los salvadores de la humanidad, entonces esta llamada cumbre militarista está dispuesta a marcar un precedente con el plato fuerte "Ucrania" y para eso recurrirá a todos y cada uno de los escenarios posible y para esto Kiev ya está preparada para enrolarse en sus filas.
La diplomacia rusa ha sido eficaz para detener ciertos avances expansionistas de la OTAN pero aun así la situación en ucrania y el triunfo de Moscú sobre Crimea los mantiene en alerta ante una eventual profundización de la crisis y que esta misma se convierta en un medio que más adelante le cueste caro al imperialismo. Las intervenciones de los presidentes "democráticos" que participan en la cumbre tuvieron como inicio catalogar a Moscú como el fantasma del mal; el cual hay que encerrarlo debido a que no permite que se imponga la justicia de la metralla aun cuando se han fabricado cientos de falsas pruebas, bloqueos económicos y un cerco mediático internacional atroz que si los gobiernos del mundo no detienen a tiempo estos juegos infernales no quedara nada que salve a la humanidad de la voracidad capitalista.