Cuando los latinoamericanos -todos- comprendan que las inmorales conductas de las organizaciones internacionales vinculadas de una u otra manera a la ONU, no son mas que expresiones de las viejas conductas de los absolutistas, burgueses, aristocráticos y fascistas de la vieja Europa, acostumbrada por siglos a esclavizarse unos con otros sus habitantes y luego, esclavizar a los demás.

Porque no fue otra cosa la llegada de esos piratas (españoles, ingleses, portugueses, franceses y holandeses) a nuestra América.

Para comenzar, es bueno recordarle a las ciudadanas y ciudadanos de Latinoamérica, que esos señores piratas nunca abandonaron la idea de robar a los demás. Mucho antes de que se desatara la revolución en Francia todos esos países pasaban el hambre pareja y gracias al famoso tubérculo que conocemos con el nombre de papa (la misma que en algunas regiones de Venezuela le echamos a las hallacas), lograron salir de la hambruna que padecieron y que se llevó la vida de millones de seres.

Y precisamente ante esa y otras situaciones, las regiones y sus habitantes vivían atacándose, invadiéndose y prendiéndole fuego a sus vecinos. Todo el tiempo andaban en guerras, saqueos y robo de mujeres, niñas y niños.

Ese era el pan de cada día de los europeos

Bueno decir, que las latinoamericanas y latinoamericanos no pueden no pueden ignorar ni olvidar el gigantesco saqueo y asesinato de millones de personas que hicieron que hicieron en nuestro continente, con sus diferentes métodos de llevarse todo por delante. De modo que no debe asombrarnos si a los organismos internacionales les resbalan las víctimas que han dejado tanto en Venezuela como en otros países las desatinadas actuaciones de la Derecha Fascista y no les importa, simple y llanamente, porque es a lo que han estado acostumbrados durante todas sus vidas, es lo que están haciendo en Irak, Libia, Palestina y quieren repetir con Siria, en e.

Siempre saquearon, siempre asesinaron y nunca tuvieron el menor deseo de dejar de hacer lo que les caracteriza. Por allí tienen a la denominada organización del tratado del atlántico norte, que junto a los otros piratas, incluyendo el país grande del norte de nuestro continente americano, viven saqueando las riquezas de las demás naciones, planificando y lanzando golpes de estado e instaurando dictadores.

¡No son ángeles, lo han hecho toda la vida!

Entonces, las latinoamericanas y latinoamericanos tienen que estar alertas, mosca, porque las intenciones de la Derecha Transnacional, que vive disfrazada de democracia (como en España, Grecia y Estados Unidos, donde millones de personas son pobres y pasan calamidades), y lo que pretende son las riquezas que poseemos, los recursos naturales como el petróleo, la minería, el agua, el suelo, los animales y las plantas.

Todo el accionar, su desplazamiento diplomático, sus presuntos acuerdos económicos, con sus diversas organizaciones, lo que pretenden es adueñarse de lo que no tienen y vivir de los demás y se valen de todo tipo de engaño para ello.

Nunca -ciudadanas y ciudadanos de Latinoamérica- les hemos importado y si tienen que derramar sangre, pues tampoco les importa ya que se han pasado sus vidas quitándole la vida a los demás, para luego despojarlos de sus recursos.

Si los latinoamericanas y latinoamericanos quieren saber mas de los crímenes que han cometido contra nuestro continente, hurguen en la historia y verán que los libros también sangran, aunque no se note la sangre.

Venezuela casi perdió toda su población en la guerra contra los españoles, pero nunca cedió. Solo basta con leer de nuevo el Discurso de Angostura, en uno de sus párrafos donde el Libertador dijo:

"Convencida Venezuela de poseer las fuerzas suficientes para repeler a sus opresores, ha pronunciado, por el órgano del gobierno, su última voluntad de combatir hasta expirar, por defender su vida política, no sólo contra España, sino contra todos los hombres, si todos los hombres se hubiesen degradado tanto, que abrazasen la defensa de un gobierno devorador, cuyos únicos móviles son una espada exterminadora y las llamas de la Inquisición".

Siempre es bueno leer para recordar y dejar conceptos e ideas muy claras en nuestras mentes y en nuestros corazones, como cuando Bolívar -en el mismo Angostura- añadió:

"Nuestras tropas pueden medirse con las más selectas de Europa, ya que no hay desigualdad en los medios destructores".