La simpatía que algunas personas expresan por Estados Unidos -lo que no es criticable, porque se puede tener cualquier tipo de sentimiento- siempre chocará contra la experiencia negativa de los ciudadanos que han vivido en carne propia los abusos de la élite imperial de ese país.
Si se hiciera una encuesta honesta, muy ética, entre los habitantes – ni los gobiernos ni los partidos- de Puerto Rico, Japón, Cuba, México, Las Filipinas, República Dominicana, Vietnam, Grenada, quienes vivieron en la extinta Yugoeslavia, Panamá, Irak, Afganistán, Libia, Siria, Palestina, Brasil, Bolivia, Uruguay, Paraguay, Chile, Colombia y Venezuela, sin contar otras regiones, la élite de millonarios que gobierna a esa nación saldría muy mal parada.
Entonces, nada tiene de extraño que por estos días – ya cansados de tanto padecer- los naturales habitantes de Alaska y Hawai, los autóctonos, quieran independizarse de Estados Unidos, porque se consideran mucho mas que burlados.
Representantes de esos grupos originarios consideran que "...sus territorios fueron anexados fraudulentamente..." y por ello vienen reclamando su derecho a independizarse, separarse de Washington.
Pero si nos ponemos a reflexionar un poco las cosas, los reclamos son mayores porque, por allí andan los texanos, cuyo territorio siempre perteneció a los apaches y los comanches, pero por allá se dejaron caer los conquistadores españoles y le metieron mano a esa región y siempre tuvieron sus enfrentamientos, pero conquistaron todo lo que es México, lo que hoy es Texas, hasta California. Luego los anglosajones se llegaron hasta esas regiones y se apropiaron de todo cuanto pudieron.
Allí lo que hubo fue despojo y mas despojo hasta el enfrentamiento de México con los texanos y esta nación fue despojada también. Los texanos salieron de los mexicanos y fueron a caer en manos de los estadounidenses.
Lo cierto del caso fue que, hubo una gran cadena de despojo desde los pueblos originarios hasta los propios texanos y mexicanos y USA se quedó con todo, pero en Texas quieren también independencia y se aprecia, que no parece haber en la historia ningún tipo de sentimiento positivo hacia EE.UU., porque ¿quién puede sentirse feliz al ser agredido?
Creemos que nadie, salvo que esté padeciendo una enfermedad viral muy fuerte y esto pareciera ser lo que ocurre con cierta gente hoy día, que aplaude y clama porque EE.UU siga agrediendo al mundo.
Y si vamos a hablar de otros agredidos, pues solo hay que mirar hacia adentro, donde las agresiones se están dando con mucha mas fuerza y con modalidades diferentes.
Tenemos, por ejemplo, las agresiones a las familias a través de las hipotecas de sus casas. En USA prefirieron financiar a los banqueros que apoyar a las familias, muchas de las cuales se fueron a dormir en carpas.
No hay que dejar afuera del conteo de daños a quienes despidieron de sus trabajos cuando esa crisis bancaria que, de paso, despojó de su dinero a unos cuantos ciudadanos, gringos y no gringos. Citan al Stanford a título de ejemplo. Lo cierto es que por esa conocida crisis, un gentío continúa viviendo en las calles.
A lo anterior hay que sumar el irrefrenable atropello -destaca el asesinato- a la gente de color y a los hispanos; a los primeros por la rabia contra los negros que no ha desaparecido y a los segundos por no conformarse con la vida gitana que llevan de ilegales y esclavizables y por querer estar con sus hijos nacidos en USA.
Sumemos dos daños mas: El del petróleo, por el cual insaciables empresarios capaces de todo, vienen dañando los ambientes.Un ejemplo de cómo se lavan las manos estos empresarios los tenemos en la Shell, cuando en 2012 admitía que "...no puede efectivamente limpiar eventuales derrames de petróleo, y su barco de respuesta ante emergencias, el Arctic Challenger, no está en condiciones de resistir una tormenta en la zona". El otro mal que los afecta, es el fraking y ya salió por allí un gobernador a decretar decretar en su estado, que no se puede legislar en contra de ello, aunque perjudique a los agricultores que se la están viendo feas.
Estados Unidos ha dejado un reguero de daños en el mundo, que no existe una pala gigante como recogerlos. Los mas cerca que están pueden ser visto en el Medio Oriente con el denominado Estado Islámico -dicen que USA es su progenitor-, la solapada y auspiciada agresión en Ucrania y los intentos de torcerle el cuello a Rusia y Venezuela, los mas cercanos porque tienen entre ceja y ojo emprenderla contra los chinos.
Si quisiéramos alargar el asunto, habría que incluir en estas cuartillas los asesinatos y desapariciones de líderes en su propio patio y en otras latitudes, a través de sus cuerpos de inteligencia, además del espionaje de sus ciudadanos, gente amiga y a los que consideran enemigos. Y el gran daño, que por supuesto no le genera simpatías ni aplausos a la élite imperial, es el de creerse dueño del mundo y en consecuencia violar todas las leyes y soberanías de las demás naciones de este planeta.
¡¡ Todo un record mundial !!