El conspirativo coletazo de Obama contra Venezuela ha sido la reciente orden dada a sus ciudadanos para que: "Abandonen lo antes posible Venezuela", debido a la situación de inestabilidad que se vive en la patria de Simón Bolívar.
Los tiempos ya casi no acompañan para el objetivo de Obama; como el de la oposición venezolana como es sacar al chavismo del poder, ya que en el caso de Obama sus días están contados hasta febrero del próximo, que será cuando tome posesión Trump. En el caso de la oposición venezolana; es mucho más dramática su desesperación, pues hasta fin de año tiene tiempo de convocar a un referéndum revocatorio; no para sacarlo de Miraflores a Maduro -algo que además habría que ver si sucede- sino para sacar al gobierno mismo del poder, pues de revocar al Maduro, sería el vicepresidente Aristóbulo Isturiz quien le suceda; claro siempre y cuando sea revocado el presidente.
Y es que las posibilidades de la oposición venezolana entonces son tan escasas, como su capacidad de acción mediante la calle para "tomar" Miraflores, pues hasta el día de hoy son más cáscaras que nueces.
En cambio, la estertórea estrategia de Obama, la cual comenzó hace más de un años atrás, cuando en marzo del 2015, dictó un descabellado decreto declarando a Venezuela como una: "Amenaza extraordinaria e inusual a la seguridad nacional y política exterior estadounidenses"; hoy se confirma con ese confabulador coletazo que es la orden de Obama para que sus ciudadanos abandonen lo antes posible Venezuela; tan parecida al peso de la perentoria conclusión de su mandato.
Nadie va a negar la situación delicada por la que atraviesa Venezuela; pero también es cierto que el próximo la situación tenderá a mejorar, debido al lobby logrado por Maduro con la OPEP, para poder estabilizar el precio petróleo; pero además porque el mandato de Obama está agonizando, y el tiempo para apropiarse de las espectaculares reservas de petróleo, se le está agotando.
Trump es una incógnita -aunque es una verdad a gritos que es imposible que evada las presiones para continuar en esa lógica de apropiarse de lo ajeno- que por lo menos da un respiro para concentrase en el acoso local de las fuerzas opositoras originarias, para quienes se les está yendo de las manos la fuerza que tuvieron de la política intervencionista del imperio.
Son entonces manotazo de ahogado lo que acaba de dar Obama pidiendo que sus conciudadanos abandonen Venezuela, después de declararla "amenaza para EE.UU.", pues la derrota electoral de su candidata -por la que personalmente hizo campaña- fue también su derrota; la misma que le ha propinado Venezuela.
¡Aguante Venezuela! ¡Aguante Maduro!
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