La lucha de nuestra vinotinto contra la poderosa oncena argentina el 5 de Septiembre 2017, empate a un gol, nos dio el primer punto logrado en campo gaucho en la historia entre nuestra modestia futbolística, y Argentina, campeón mundial 2 veces. El encuentro en Buenos Aires fue una lección de pundonor del pueblo venezolano luchador, soberano, generación de oro, y colectivo mundial emprendedor que somos.
Todos esperaban la goleada de Leonel Messi y demás figuras, a la selección venezolana dirigida por Rafael Dudamel, quien por cierto en un encuentro cuando Rafael era jugador, marcó un gol de tiro libre al ángulo izquierdo, imposible para el portero albiceleste, eran otros tiempos, perdimos 5 goles a 2. Hoy Dudamel el deportista, dirige a Venezuela en fútbol, una lucha que traducida a la vida en general, supera el criminal TO-CO, el Todos Contra Venezuela, en el campo de la intriga internacional.
Con toda razón, el economista Peter Koenig renunció al Banco Mundial, denunció las intenciones de Trump y envió una carta al Presidente Maduro calificando de acción homicida contra Venezuela rendirnos por hambre, criminal agresión de "la economía de la codicia", que dijo, representa el gobierno de Washington al pretender ahogar un pequeño país y poner en peligro la vida de 30 millones de habitantes.
Entretanto embajadores y cónsules de minúscula mentalidad diplomática, atacan descaradamente al gobierno y al pueblo de Venezuela, en medio de la descuidada indiferencia de algunos compatriotas "caídos de la mata", que niegan la guerra económica, estrategia criminal de intriga propalada por vende patria dirigentes de la oposición, quienes en el exterior apoyan acoso financiero contra su nación, e indirectamente la amenaza Trump de posible invasión.
