Leyendo un artículo de la BBC, fue que pude comprender un poco más de la profunda división política y social que atraviesa ahora mismo, el gigante del norte, Los Estados Unidos.
Este país cada 4 años, celebra elecciones de medio mandato. A esta fecha se han renovado 36 gobernaturas de los 50 Estados y, como ocurre cada dos años, la totalidad de la Cámara de Representantes y un tercio del Senado.
De todo esto el veredicto final ha sido un empate entre las ideologías opuestas de los demócratas y republicanos, éstos últimos liderados por el actual presidente Donad Trump, es importante decir que tras las elecciones ha aumentado la brecha que separa a demócratas y republicanos.
La geoestratégica conducta del presidente norteamericano ha resultado positiva en varios aspectos, sobre todo para seguir imponiendo la hegemonía en la Unión Europea (UE); ésta última; atribulada por el Brexit de los ingleses y su ola de dimisiones, además de la partida de Ángela Merkel, de la cancillería alema, el altisonante discurso del gobierno de Italia que se niega a modificar sus presupuestos para 2019 pese a las reclamaciones de la UE; y las divisiones marcadas por el sistema monárquico español, Cataluña y su independencia, los enfrentamientos de derechas entre el Partido "Socialista" Obrero Español, el Partido Popular y Ciudadanos, fuerzas opuestas un rato sí, otro no, a la "nueva izquierda" de Pablo Iglesias y su Unidos PODEMOS, y los independentistas catalanes. En fin; un caldo perfecto para que Trump y sus políticas, sigan el dominio de la Europa coetánea, que ahora propone en la vocería de Emmanuel Jean-Michel Frédéric Macron y secundado por Merkel, crear un "ejercito de Europa" para quitarse la "protección" (…), gringa en La Organización del Tratado del Atlántico Norte, (OTAN); esto considerado por expertos, una utopía dado a que Francia, a diferencia de Alemania, pertenece al Consejo de Seguridad de Las Naciones Unidas de manera permanente y de paso, con armas nucleares que los alemanes no poseen y por ende, supone una traba, a la hora de escoger un comandante, mientras tanto; Trump sigue siendo el jefe de los ejércitos que "resguarda" a los europeos y de ñapa, les cobra por eso.
Por otro lado, donde el presidente norteamericano si "se la ve fea" es en Latinoamérica, especialmente en el Sur, pues a pesar de contar con gobiernos como el argentino de Mauricio Macri; y gobiernos como el colombiano, ecuatoriano o el chileno; que verdaderamente representan a los "perritos falderos" de los que hablaba el otrora presidente peruano Pedro Pablo Kuczynski; sigue teniendo sus "anti sinergias" con gobiernos como el boliviano, el nicaragüense, el cubano y sobre todo, su mayor dolor de cabeza, el del presidente Venezolano Nicolás Maduro Moros.
A diferencia de lo que pudieran pensar los estrategas políticos del presidente Maduro, Estados Unidos; sí ve, y con mucha atención; el hecho que la oposición de ese país, no termina de salir del letargo político en el que cayeron, luego de ganar las elecciones parlamentarias del 2015.
La oposición, a diferencia del chavismo que sí se reagrupó y, buscó la reconexión con la gente, que a la fecha, tal vez halla perdido otra vez, nunca ha procurado juntarse por una causa común, y hoy día; esperan al "mecías" pelo amarillo que ordene la intervención del país, sin importar ninguna consecuencia, cosa que sí hace la Casa Blanca, al actuar con mesura, pese a bloqueos económicos que sufre la nación Suramericana, impuestas por el sistema capitalista estadounidense y su gobierno. No es fácil tomar esa decisión para EEUU; para los gringos no se trata de cambiar un gobierno a la fuerza y ya; se trata de construir una opinión internacional y nacional (dentro de EEUU) que justifique una acción de esa naturaleza. ¿Está Estados Unidos, cohesionado como sociedad, para apoyar una intervención en Venezuela? Creo que no, en tal sentido, no se vislumbra esa salida violenta que auspician una parte de extrema derecha venezolana, cada día cobra más fuerza, el diálogo; a pesar de la soez postura de algunos en las Redes Sociales, que son ahora mismo, la trampa donde se encuentra encerrada, la oligarquía partidista de derecha en Venezuela.
