Desde el mismo momento en que supo la noticia sobre la
autoproclamación, Carmona Estanga, decidió subirle el tono a su "aipo"
y dio la orden a la servidumbre para que mantuvieran los teléfonos de
habitación desocupados. El chaparrito Carmona abrigaba la esperanza
que por su teléfono celular entrarían muchas llamadas y los teléfonos
de su residencia, no pararían de repicar. Pensó y se dijo: Urosa
Savino y Luis Ugalde ya deben de estar marcando.

Decidió ver su autoproclamación. Debo -se dijo muy interiormene-,
estar listo para las entevistas y para atender muy seguidas llamadas
desde Caracas. Se sentía como un tronco de asesor en asunto de
eliminar poderes. Se vía en Caracas con sus asesores jurídicos
cerrando Comunas, Consejos Cmunlales, alcaldías y Consejos
Lgislativos

Pasan los días y el breve no tenía quien lo llamara. El celular, como
nunca, permanecía en reposo. La angustia y la expectativas que sentía,
fue transformándose en una oscura depresión y comenzó un proceso de
auto flagelarse mentalmente bajo ese profundo cuadro depresivo.

El proceso de auto flagelación comenzó por una reconstrucción mntal
de su golpe de Estado. Vio todo el esfuerzo que realizó por meses. Se
veía aclamado en las marchas. Repaso mentalmente cada una de las
entrevistas que ofrecíó a cada momento en su ascenso a la condición de
breve. Recordó lo que había dicho para volver por su liderazgo.

En ese breve momento de recuerdo de su breve gloria cmo líder y breve
com dictador, se le apaeció el fantasma de la depresión. Coño -se dijo
muy interiormente-, no puedo tener tan mala leche. No es posible que
mi brevedad se extienda más. Esa brevedad la pague con horas sin poder
dormir y reuniones interminables. Tuve que calarme las ladillas de los
obispo y aguantarme al rector de la UCAB Luis Ugalde. ¡Dios mío!
Soporté al injerto de ladilla y garrapata Carlos Ortega para hoy no
ser nadie.

Horas en marchas con multitudes y navegando en la cresta de la Ola.
Me jalaron bolas hasta no pder antes de mi brevdad. Aún guardo como un
tesoro, el video en donde se oye al fondo ¨te quremos Pedro¨.
Heme aquí angustiado porque no tengo quien me llame. Nadie me pide
que vuelva a Caracas y continúo en el anonimato. Y este Guaidó que se
autoproclamo en un callejón ya tiene varios días sintiéndose más
títere que yo, que si le eche bolas. Yo que daba conferencias sobre
todo los temas y problemas. Guaidó por pelarse las nalgas una vez,
mírenlo.

A medida que se iba sumiendo en su depresión, Carmona iba repitiendo
más seguidamente el nombre de ¡Guaidó! El ama de llamas, sintió
curiosidad y decidió llevar el registro del ruido que salía del
patrón. Fijó un intervalo de media hora entre un ¡Guaidó! y el segundo
¡Guaidó! Ya a la hora de su compota, el ama de llaves le pidió a una
segunda empleada que registrara mientras le servía la compota, las
veces que mencionaba la palabra Guaidó.

Al rato, la empleada pegó un grito: Pedrito está como un disco
rayadao. Cómo así, le pregunta el ama de llave. Así mismito mi
patroncita, el hombre está con un GuaidóGuaidóGuaidóGuaidó.
Días después de esta oscura depresión, el ama de llaves va llevarle su
atol. Esa noche lo había dejado sumido en su condición de disco
rayado.

El ama de llaves al entrar si tocar previamente prque esperaba
encntrarlo como lo había dejad, se frenó violentamente y el psillo de
atol se derramó. ¡Qué! ¡Dios Santos!

Mi patrón, luce usted muy jovial hoy. Se ve rozagante.

Pedro, con voz de democrata dice: Mire, hoy no voy a desayunar. Hoy
salgo del aislamiento y la oscuridad al que me han sometido los medios
y la oposición venezolana. Hoy me visto brevemnete de democráta.
Pensó y se dijo: Ya en Venezuela nadie se acuerda que di un golpe de
Estado. Nadie se acuerda que elimine a través de un decreto todo.

Como eso no existió; hoy salgo denunciando la tiranía de Maduro y
apoyando a Guaido. Diré que Guaidó es legitimo, pero debe "ceder su
puesto en breve ya que debe tener un papel temporal" porque no pudo
quitarme mi condición de breve.