No es la primera vez, que el imperio Norteamericano, agrede, al pueblo Venezolano, con el propósito de adueñarse, de sus riquezas naturales, ni, que utiliza y manipula, ambiciosos dirigentes políticos y militares, para lograr sus objetivos.
En el año 1943 nace una novedosa, Ley de Hidrocarburos, marcada esencialmente, por un profundo sentimiento nacionalista. Las riendas del país, las llevaba, un hombre, con firme convicción patriótica, me refiero, al General Isaías Medina Angarita, quien gracias a esta ley, saco a la industria petrolera de una situación de simple arrendatario, a socio, por primera vez, Venezuela comenzó a percibir, ganancias de la explotación y refinación del petróleo, logro sentar las bases, para que la industria pasara a manos de los Venezolanos, en cuarenta años, lapso de tiempo, suficiente, para que los Venezolanos, tuvieran la capacidad, técnica para manejar la industria, (esto desmonta el mito, de que fue Carlos Andrés Pérez, quien nacionalizo el petróleo, de hecho ese adelanto, de diez años, en lo que se llamó, la nacionalización del petróleo, le costó a la República, mucho dinero, por tener que resarcir, algunos daños, que las empresas trasnacionales reclamaron), pero volviendo a la época del General Medina, este acto patriótico que se reflejó, en esa Ley de Hidrocarburo de 1943, género en el gobierno imperial de la época, cierto recelo, contra el Presidente Venezolano, y ayer como hoy, el imperio norteamericano, apoyado por los nefastos, seudo demócratas, de la época, con Rómulo Betancourt a la cabeza, dirigente del partido, Accion Democratico, partido, legitimado, durante la accion de gobierno, del presidente, al cual asestaron, un golpe de Estado, que pretendieron llamar, Revolución, la excusa, para materializar, este golpe, fue porque según ellos, el General Medina, no era un demócrata, ya que, no había realizado, los cambios Constitucionales, para elegir Presidente de la República de manera directa, no olvidemos, que para la época, las elecciones de Presidente eran de segundo grado, claro eso fue la excusa, para derrocarlo. Igual que ahora, la excusa es, que las elecciones, deben ser como la oposición quiere, donde quieren, violando la Constitución, el Imperio, utiliza el mismo guion, una excusa, que les permita apoderarse, de las riquezas del país, y unos títeres, ambiciosos anhelantes de poder.
No hay que olvidar, que durante el Gobierno del General Medina, no solo, se redacta esa novedosa Ley de Hidrocarburos, en esa época, Venezuela da los primeros pasos, para dejar de ser un país rural y nace, la urbanización El Silencio, con hermosos edificios, ubicados, en lo que hoy conocemos, como la Plaza O’Leary, nace la Oficina de Identificación, teniendo el Presidente Medina Angarita, la cédula de identidad número 1, durante la gestión del Presidente Medina, se dieron los primeros pasos, para la creación de la Universidad Central de Venezuela, como la conocemos y donde la conocemos hoy, creo el seguro social obligatorio, en defensa de los trabajadores, gran similitud al gobierno actual, del comandante obrero, Nicolas Maduro, igualmente se logro, que las mujeres, tuvieran derecho al voto y conisidencialmente, al igual que en la revolucion, Bolivariana, durante su gestion, se realizaron multiples elecciones, considerando que era un gobierno, cuyo mandato, era de apenas 4 años, se realizaron, elecciones para elegir concejales, y diputados al congreso, que si se hacia de manera directa, en resumidas cuentas, un gobierno, que presento muchos avances, con políticas públicas, con profundo sentido social, y sentido democratico, por eso ayer, al igual que hoy, el imperio vuelve a sentir el prurito, que le genera, ver una revolución, que avanza, que tiene políticas públicas sociales que benefician al pueblo, más de dos millones de viviendas entregadas, no sé qué cantidad de universidades, en referencia a la salud, podemos mencionar, la creacion de un sin fin de Centros Diagnósticos Integrales, Servicio de Rehabilitación, y en el campo electoral, mas de 20 elecciones, y un sinfín de cosas más.
En la actualidad, existe el agravante, que no solo es por el petróleo. A esta, riqueza le sumamos, el oro, cortan, gas, etc. Pero a diferencia del gobierno, del general Medina, el comandante obrero, Nicolás Maduro, cuenta con militares preparados, no solo en el área militar, también, poseen cultura política, no son los llamados, chopo e piedra, que se dejaron engañar, por los dirigentes políticos de la época, tampoco Medina, contaba con una población, preparada políticamente para defender a su Presidente, ¡no señor!, aquí ahora hay un pueblo preparado, políticamente, para entender lo que es mejor para el país, y en condiciones, para enfrentar, la arremetida del imperio y de los títeres, que pretenden regalar, nuestras riquezas, por las migajas del poder.
De Medina a Maduro, el imperio sigue siendo el mismo, pero han sacado mal las cuentas, porque, aunque ellos, no han cambiado, Venezuela y su pueblo sí. Aquí se acabaron, las tracciones, y el guabineo, por eso, los revolucionarios y la revolución, vivirá y vencerá.