A mediados del siglo XX apareció en la prensa una tira cómica algo surrealista titulada "El extraño mundo de Subuso". Este personaje representaba a un ser que veía las cosas como le convenía y por lo tanto su comportamiento era inexplicable. Su característica personal más destacada era la miopía, esta lo constreñía a usar enormes gafas que le consentía ver las cosas como él las quería, además, su conducta era irracional y extraña. Sin embargo, pareciera que sus lentes le permitían ver, desde su óptica, como si todo estuviera marchando normal y deseable.
Indudable que las cosas desde aquella época hasta ahora han cambiado mucho, ya no son necesarias unas grandes gafas para ver mejor, hoy se utilizan lentes de contacto o lentillas hasta de color para cambiar de apariencia. Así mismo, en la actualidad cada quien se puede construir su propio mundo utilizando las redes sociales en sus diversas modalidades: twitter, you tube, Facebook, instagram, linkedin, tic tok, badoo ente tantas, las cuales son utilizadas por los usuarios como una manera de socializar. Esto contribuye a que algunos de los interesados se muestren ante sus amistades no como son en realidad, sino como quieren que los vean. Así, por ejemplo, una dama pasada de peso cuelga una foto en Facebook de cuando estaba joven, con buena figura y con el cutis terso. Esto lo hace para buscar un novio virtual, evitando en lo posible un contacto persona a persona para no generar desengaños. Del mismo modo, existen caballeros de la tercera edad que cuelgan en instangram la foto de un fisicoculturista que encontró en revista, como parte de su autobiografía, para conseguir pareja. Evidentemente, siempre evitará tener contacto personal con alguna aspirante con el fin de no crear desilusiones. Como se ve, en ambos casos, tanto la dama como el caballero, utilizan las redes sociales para crear su propio mundo y a través de chateo y de nuevas fotos pareciera que todo marcha normal, de acuerdo a lo que a ambos le conviene, tal como lo hacía Subuso.
En el mundo existen políticos, presidentes, primeros ministros, ministros de gabinete, senadores, diputados, en fin, toda esa macolla de personajes que hicieron de la política un instrumento para engañar. Pero estos personajes no necesitan unas enormes gafas para ver el mundo tal como ellos quieren. Cambiaron las gafas de Subuso por las redes sociales.
El ejemplo, en esta época, que encarna a Subuso de la mejor manera es el orbicular y racista Donald Trump. En su caso particular cambió las enormes gafas por el twitter y desde esta plataforma virtual él ve el mundo que quiere ver.
Basta que el maléfico Donald escriba un twitter anunciando, sin conocimiento alguno, que descubrieran una veta de oro en California, la más grande del mundo, para que el precio del oro baje. Esto fue lo que pasó con el petróleo cuando se propuso quebrar la industria energética en otros países. Bastó que el rubicundo anunciara por twitter la extracción de petróleo por el método "fracking", cuando de inmediato los precios del crudo bajaron. Evidentemente a este ignorante no le importó el daño al medio ambiente, con tal de causarle perjuicio a Rusia, Venezuela, Irán y a otros países productores.
Los twitter concebidos en la cabeza del gordinflón Donald, por general, tienen graves consecuencias. Su mundo de empresario le permite emitir órdenes para que la gente las cumpla, en este caso se trata del pueblo de EEUU. Los residentes de este país leyeron el twitter donde el ignorante presidente les recomendó cloroquina para prevenir y curar el coronavirus. De seguida parte de la población, igualmente en permanente ayuno de conocimientos, acataron la orden de alguien que no es infectólogo, tampoco epidemiólogo, ni médico, con las graves consecuencias de ingerir un medicamento recomendado para otros usos. Pero en el extraño mundo del twitter de Trump todo es posible y por eso en su preocupación por la pandemia recomendó por la misma red social, su arma secreta, inyectarse desinfectante y también exponer a los enfermos a la radiación de luz ultravioleta. En el extraño mundo del presidente de USA todo es posible, dado que el paciente después de inyectarse creolina se morirá y de seguro no sufrirá de coronavirus.
El arrogante colorado presidente de EEUU, actúa como los vaqueros de las películas de Hollywood, siempre tiene el dedo en el gatillo, en este caso, lo tiene en las teclas de su IPhone 10 preparado para lo que sea. Por ejemplo, cuando tuitió: "Alemania debe grandes sumas de dinero a la OTAN y Estados Unidos debe recibir más dinero por la poderosa y muy cara defensa que proporciona a Alemania". Evidentemente al loco del twitter le importa un bledo la diplomacia y no tiene idea de cómo funciona de las relaciones financieras de la OTAN con sus aliados. Para superar del impase Angela Merkel se lo explicó.
En el mundo tuitero de Donald no admite a la gente de la comunidad lgtbi y por tal razón prohíbe el ingreso de transexuales dentro de las filas del ejército de EEUU. Esto lo anunció por un twitter, alegando el alto costo médico que esto acarrea.
Pero en el extraño mundo tuitero del rubicundo Donald no admite a los homosexuales, tampoco disimula su racismo contra los negros y los latinos. Prueba evidente es el siguiente twitter: "tristemente son los negros y los hispanos quienes comenten la abrumadora cantidad de crímenes violentos en nuestras grandes ciudades, y es un tema que se debe discutir". Parece no recordar los asesinatos contra el pueblo sirio que comete el ejército de EEUU en alianza con los terroristas del estado islámico.
El demente del twitter no solo arremete contra la comunidad lgbti, contra los negros y los latinos, también utiliza las redes sociales para insultar a sus connacionales como por ejemplo el siguiente: "todas las encuestas me ponen a la delantera por mucho. Si escuchas al tonto de Karl Rove, un amigo de Trump se podrá pensar que voy mal". Tambien arremete contra las damas cuando escribe: "Huma Abedin, la asesora principal de Hilary Clinton y esposa del desagradable pervertido Anthony Wiener, era un riesgo de seguridad importante como recolectora de información".
Al feroz Donald no se le escapó ni la OMS al referirse que las medidas sugeridas por la Organización Mundial de la Salud habían sido "defectuosas" y enfocadas completamente en China.
El ministro de relaciones exteriores es el twitter, mediante esta red social él puede vender un país como Puerto rico y también pretender anexarse como un estado de la unión, en su intento de incorporar las riquezas de Venezuela al presupuesto de EEUU.
En fin, en el mundo tuitero del amargado Trump, hasta utiliza la plataforma social para dictar sanciones contra Venezuela, China, Rusia, Nicaragua, hasta ataca a a su aliado y amigo Duque por ser incapaz de controlar la producción de cocaína en Colombia. Es tal el mal uso que este rubicundo hace de esta red social que la empresa que maneja Twitter le ha cerrado las cuentas de este gorila enrojecido por estar recomendando medicinas, sin el reconocimiento de OMS, para curar el coronavirus.
El extraño mundo de Subuso es un mundo ideal, de lo que se quiere que sea pero que no es. Similar al mundo Donald, pero lamentablemente entre el mundo del twiter y el real hay un espacio infinito. Quizás por esto el escritor ruso Fedor Dostoievski escribió: "El hombre que se miente a si mismo y escucha su propia mentira llega a un punto en el que no puede distinguir la verdad dentro de él". Lee que algo queda.