"Humanidad, humanidad
Hay motivos de alegrías
Pero de tristezas hay mucho más"
Utilizo esta estrofa de la Canción de Alí Primera, Humanidad, en su Álbum Canción Mansa para un Pueblo Bravo, que data por allá de los años setenta, para comentar la Carta dirigida a la 77 Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas, que se realiza actualmente en Nueva York, en los Estados Unidos, por el Presidente Nicolás Maduro Moros, de la República Bolivariana de Venezuela.
En dicha canción, cita Ali, la situación de pobreza en los niños campesinos, de los abandonados en las calles, de los niños de Vietnam, víctimas de una guerra imperialista y la dura existencia de los negros en los Estados Unidos, marginados y reprimidos. A pesar de que expresa alegría, y esperanza por resolverlos, Ali, está consciente de estos problemas y la existencia de muchos más, que acuciaban al mundo para esa época. Por eso afirma, que a pesar de la alegría, los motivos de tristeza son muchos más.
Y ya en pleno Siglo XXI, los temas citados por Ali como motivo de tristeza, continúan y agravados, porque la tal humanidad, se va al garete con sistemas y gobiernos dominantes, que tratan, por encima del interés general de los hombres y mujeres que habitamos en este mundo, buscan satisfacer en forma egoísta, los intereses locales de sus naciones, aunque sea sobre la base de la explotación y el dominio de los demás.
Quizás con la misma esperanza de ser oído, las mismas que tenía Ali, de que las cosas se arreglaran, el Presidente Nicolás Maduró puntualizó algunos tópicos: El primero de ellos, fue alertar al mundo, sobre la despiadada campaña mediática que se ha desatado contra Venezuela, impulsada desde los Estados Unidos, secundada por Inglaterra y países europeos, agresión que se concreta, luego, con la imposición de medidas sancionatorias ilegales, que han generado caos, desequilibrio económico y hambruna sobre Venezuela.
A nombre de los 30 millones de venezolanos, el presidente denuncia que sobre nuestro país se han impuesto 913 sanciones ilegales que en sus palabras "han impedido a Venezuela vender y comprar lo que produce y necesita para el desarrollo y goce de nuestra existencia individual y colectiva"
El presidente denuncia y califica estas medidas como crueles y crímenes de lesa humanidad. Al punto de causar daños irreparables, afirma, que el país ha perdido más de 150.000 millones de dólares y que incluso durante el lapso más agudo de la Pandemia que azotó a la humanidad se le impidió a Venezuela comprar insumos médicos, medicinas y vacunas.
Bastaría sólo esta información, para apreciar hasta donde ha llegado la crueldad y deshumanización, de medidas imperiales, que le impiden a un pueblo la asistencia médica, incluso recomendada por Organismos Internacionales, adscritos a la misma ONU, como la Organización Mundial de la Salud (OMS), y someterlo a la desasistencia medica, la inclemencia del hambre y la miseria.
Denuncia, igualmente, el Presidente Nicolás Maduro Moros, que la campaña de estigmatización ha servido como coartada a Europa y los Estados Unidos, para cometer contra nuestro país el mayor expolio contra el patrimonio y bienes de Venezuela: más de 31 toneladas de Oro, depositado por Venezuela en los Bancos de Inglaterra, calculadas en más de en mil trescientos millones de dólares se mantienen secuestradas, así como el robo de Citgo, Petroleum Corporation en febrero de 2019 y a esto debe sumársele Diez mil millones de dólares de depósitos y fondos venezolanos en bancos extranjeros, bloqueados ilegalmente.
Las cifras son realmente alarmantes y deberían llamar a todos los mandatarios y representantes de gobiernos presentes en esta 77 Asamblea General de la ONU, al ver la magnitud de la Piratería del Siglo XXI, que se ejerce contra las naciones, por el sólo hecho de querer ser soberanas e independientes, por cierto conceptos, englobados en la Auto Determinación de Los Pueblos, que es un derecho consagrado en la Declaración de los Derechos Humanos, validada por todos los países asistentes a esa Asamblea. Estas cifras deben llamar la atención a los asistentes a tan importante Foro Mundial, porque no se trata sólo de Venezuela, sino, que estas agresiones pueden en cualquier momento, imponerse contra cualquier país, que en palabras del ex presidente Barak Obama, los Estados Unidos asuman el derecho de controlarlos: "A veces torcemos el brazo a otros países para que hagan lo que queremos. Es decir, torcerle el brazo a todos los que han intervenido en este foro mundial abogando por la Libertad, la Soberanía, la Independencia y la conformación de un mundo multipolar, no hegemónico y respetuoso de las relaciones internacionales.
Hizo énfasis también el Presidente Maduro en la Crisis Climática, Alimentaria, Económica, Social, Energética, que ponen en peligro la paz mundial. No podía dejar de mencionar como elemento constitutivo de la crisis mundial, lo relativo a la La Verdad. En consecuencia, denunció en su misiva la manipulación informativa y a las denominadas Fewknews. Afirma en su misiva, el presidente, que se ha utilizado a las modernas tecnologías comunicacionales a la mejor conveniencia de países poderosos, tergiversando la realidad y manipulando hasta las emociones del ser humano.
Al respecto agregamos, que nuestro país ha sido sometido a un verdadero bombardeo comunicacional, dirigido a dividirnos, a enfrentarnos a unos con otros, a odiarnos, a sentir incluso, rechazo por nuestra propia nacionalidad, originando olas migratorias, todo con el propósito de confundirnos, para en medio de la confusión, con una red de mentiras y manipulaciones, atraparnos, lavarnos el cerebro y facilitarse así, cualquier propósito de colonizarnos nuevamente. Porque eso es lo que pretenden estos grupos de poder internacional, colonizarnos.
Ojala, que estas denuncias, realizadas ante el más alto organismo internacional, realizadas con toda la esperanza de Alertar al Mundo y que las entuertos se corrijan, no caigan en el vació, ni se estrellen contra la pared de la indiferencia. "Lo preocupante no es la perversidad de los malos, sino, la indiferencia de los buenos" Martin Luther King.
