La Constitución, que nos dimos venezolanas y venezolanas en diciembre de 1999, la Bolivariana, consagra Derechos Sociales fundamentales para el ejercicio de la función sindical como nunca antes en toda nuestra historia republicana hemos gozado. La Libertad Sindical está garantizada por nuestra Constitución Bolivariana, “Los trabajadores y las trabajadoras, sin distinción alguna y sin necesidad de autorización previa, tienen derecho a constituir libremente las organizaciones sindicales que estimen convenientes para la mejor defensa de sus derechos e intereses, así como a afiliarse o no a ellas, de conformidad con la ley. Estas organizaciones no están sujetas a intervención, suspensión o disolución administrativa. Los trabajadores y trabajadoras están protegidos y protegidas contra todo acto de discriminación o de injerencia contrario al ejercicio de este derecho…” (CRBV, Artículo 95).
En la cuarta república, la CTV monopolizaba su control sobre las organizaciones sindicales sobre la base de los llamados “cabilleros”, agrupación paramilitar que sometía, por la fuerza, a aquellos/aquellas que pretendían desafiar la hegemonía sindical de los adecos. El poder del Estado burgués, se empleaba a fondo para garantizar tal hegemonía; todo el gobierno, actuaba entonces, en esa dirección, dar prioridad y jerarquía a la burocracia sindical cetevista, a la cual satisfacían a plenitud en procura de garantizarle la dirección de los sindicatos en la Administración Pública; con ello, la burguesía se garantizaba también, el control de las organizaciones de las/los trabajadores. Actuaba, la burocracia sindical, como simples peones de la burguesía, garantizándole el sometimiento de la clase trabajadora a sus dictámenes. Ese era el papel que le tocaba jugar a la CTV en esa obra de teatro llamada “democracia representativa” que marcó esa parte de nuestra historia conocida como cuarta república.
Hoy, las cosas no terminan de cambiar, valga decir, de revolucionarse, por llamarlo de alguna manera. La clase trabajadora, ha ido impulsando con mucha fuerza sus organizaciones de clase, los sindicatos. Algunas de esas organizaciones, han terminando cediendo su independencia a favor de la burocracia gubernamental, convirtiéndose con ello, en sindicatos patronales; otros, en cambio, han mantenido su independencia de clase, rigiéndose solo por las órdenes emanadas de sus trabajadoras/trabajadores afiliados. Entre estos últimos, tenemos que en el mundo universitario habrán pasado apenas 4 ó 5 años, para que viera luz una nueva organización sindical: Fetrauniversitarios. Apenas constituida, lo ha hecho al calor de la lucha de clases, enfrentando tanto a la derecha fascista que dirige las universidades autónomas como a los funcionarios gubernamentales del ministerio de educación universitaria y de Opsu, caracterizados todos/todas, con la excepción del ex ministro Samuel Moncada, por impulsar desde ese despacho, políticas de marcado carácter neoliberal, denegadoras de sus conquistas históricas en materia laboral.
Fetrauniversitarios, le ha dado a la lucha de las/los trabajadores universitarios una dinámica constante de combatividad, contra políticas que, tanto autoridades universitarias como autoridades ministeriales y de opsu, han emprendido contra sus derechos laborales. Constituye, en sí misma, una Reserva Moral de buen sindicalismo y, por ello, se le ve, tanto para la derecha fascista como entre los robolucionarios rojos rojitos, como un mal ejemplo que debe ser destruido. Así, durante todas sus acciones de combate, la constante ha sido la reiterada acusación de parte de la derecha fascista universitaria que dirige nuestra universidades autónomas de ser “chavistas”, mientras que, de parte de los robolucionarios rojos rojitos del ministerio de educación, opsu y sus organizaciones sindicales (Fetrauve, Fenastrauv y Fenasinpres), la acusación constante de “guarimberos” y contrarrevolucionarios. De hecho, en los medios públicos se les estigmatiza e invisibiliza, aplaudiéndolos solo cuando las protestas se dirigen hacia lo interno de las universidades públicas, valga decir, contra la derecha fascista que las dirigen. En fin de cuentas, hoy por hoy, Fetrauniversitarios se ha convertido en una “piedrita en el zapato” tanto para el gobierno como para la oposición. Los hechos recientes, al menos, así lo constatan.
La última lucha librada por esta Federación clasista, data del año pasado, cerca de seis meses estuvieron las/los trabajadores universitarios librando batallas contra la derecha fascista en las universidades y en las calles de Caracas, Maracaibo, Valencia y otras ciudades, también, contra la política ministerial y de Opsu por cercenarles sus reivindicaciones y derechos consagrados en sus contrataciones colectivas. Ese conflicto concluye en octubre 2011, con cuatro puntos de acuerdos entre los cuales, el de las interescalas entre grados de los Tabuladores Salariales sigue sin solución y que, dado el incremento del Salario Mínimo, se ha venido profundizando. Pero, ahora siguen añadiéndose nuevos problemas, en estos casos propiciados desde el mismo Gobierno, en particular la directora de Opsu y sus federaciones de maletín: Fetrauve, Fenastrauv y Fenasinpres.
Las motivaciones para movilizar la clase de las/los trabajadores universitarios (empleados/empleadas y obreros/obreras) son muchas, el desconocimiento del Derecho Constitucional a la contratación colectiva (el firmado en 2008 ya está vencido), la pretensión de desconocer la deuda por mala aplicación de la Fórmula Opsu para el cálculo de los bonos de aguinaldo y vacaciones, la negativa a corregir los interescalas de los Tabuladores Salariales, la pretensión de desconocer las Sentencias emanadas del TSJ que garantizan el Derecho al voto a empleados/empleadas y obreros/obreras, para la elección de sus autoridades en las universidades públicas, entre otras causas de protestas. Es por ello, que Fetrauniversitarios desde el lunes 16 giró instrucciones a sus sindicatos afiliados a poner en movimiento a sus trabajadoras y trabajadores afiliados, a fin de dirigirse hacia el Mppeu y Minpptrass y hacer entrega en ambas instancias de sendas comunicaciones contentivas de sus quejas. Apenas hecha pública la intención de salir a las calles de Caracas, se activo todo un mecanismo propagandístico cuya única finalidad era satanizar el legítimo derecho a la protesta que nos hemos ganado venezolanos y venezolanas, tanto de oposición como revolucionarios y revolucionarias, mucha sangre ha costado reivindicar ese derecho. El martes 16, se hacían públicas declaraciones de la directora de Opsu, Tibisay Hung: “Trabajadores universitarios venezolanos recibieron el pago de la deuda correspondiente a aguinaldos y bonos vacacionales del año 2009, informó la adjunta a la dirección de la Oficina de Planificación del Sector Universitario, Tibisay Hung, quien agregó que el pago se hizo efectivo en la última quincena de marzo, faltaría por cancelar lo correspondiente al año 2010, lo cual "se saldará antes de julio de este año". Explicó que el despacho educativo reconoció que hubo un error, en el año 2008, en cuanto a la elaboración de la fórmula para calcular estos beneficios laborales, y en respuesta a ello se procedió a tomar las mediadas correctivas. En este sentido, Hung considera que "esta situación no debe ser un justificativo para la realización de protestas o cierres de casas de estudio, por lo que los compañeros manifestantes deben revisar la efectividad de la agenda que emplean". (AVN, 17-04-2012). Resaltemos sus declaraciones: "esta situación no debe ser un justificativo para la realización de protestas o cierres de casas de estudio…”, en otras palabras, no tienen razones para protestar, todo está de maravilla!!!
En la otra línea de disparos, se colocan las federaciones de maletín que dirige esta señora directora de Opsu, Fetrauve, Fenastrauv y Fenasinpres. Ese mismo día, martes 17, Fetrauve hace público una nueva Circular la Nº 8, titulada: “AVANCE VICTORIOSO DE LOS TRABAJADORES Y TRABAJADORES VENEZOLANOS Y UNIVERSITARIOS. LA GUARIMBA INTENTA CONFUNDIR A LOS TRABAJADORES DE LA EDUCACIÓN UNIVERSITARIA, LLAMANDO A MOVILIZACIONES DE CALLE A “LUCHAR” POR REIVINDICACIONES QUE YA HAN SIDO GARANTIZADAS POR EL GOBIERNO BOLIVARIANO”. Como podemos apreciar, el término “guarimba” entra en acción, con ello, las/los trabajadores universitarios son colocados en la acera de enfrente; convertidos en enemigos de una Revolución, cuyo líder, Hugo Chávez Frías, ha definido su gobierno como: Obrerista.
Siguiendo la lectura de la Circular, se deja colar todo un conjunto de reivindicaciones y logros que ha ido obteniendo la clase trabajadora universitaria mediante su lucha y que, en honor a la verdad, han sido logrados a costa de Fetrauve, quien se auto adjudica como su victoria, reivindicaciones en las cuales no ha tomado parte. Tibisay Hung y Fetrauve, se han convertido en los tirapiedras oficiales de la Revolución contra la clase trabajadora universitaria, a quienes odian. Muy mal, dejan la pretensión del camarada Chávez de convertir su gobierno, nuestro gobierno, en obrerista. Cada vez que abren sus bocotas, miles de votos se pierden a favor del oposicionismo apátrida.
Pues bien, el miércoles 18, las/los trabajadores universitarios tomaron las calles de Caracas nuevamente, en defensa de sus reivindicaciones, en el Mppeu los recibió una comisión encabezada por el Consultor Jurídico de dicho ministerio, quienes recibieron la comunicación. De allí, la marcha siguió hacia el Minpptrass, el órgano rector en materia laboral, allá recibieron a los camaradas dirigentes de Fetrauniversitarios con un tobo de agua fría: “la regularización de Fetrauniversitarios como Federación sindical, está en el congelador, depende de una decisión política…”, sí, así como suena, como en la cuarta república, se actúa como lo hacía la extinta CTV, quien dictaminaba sí tal o cual organización se legalizaba o no. Al parecer, en el ámbito universitario, es Fetrauve quien toma esa decisión y el ministerio procede en consecuencia. ¿Sabrá el camarada Hugo Chávez de esta situación tan deplorable, violatoria de nuestra Constitución?
Con ello, se agrega una nueva reivindicación a la lista antes formulada de las razones para protestar a la clase trabajadora universitaria, su derecho a tener su Federación sindical independiente, clasista y revolucionaria de verdad: Fetrauniversitarios.
Aún no termina la jornada, y mientras caminábamos por el centro de nuestra capital, reflexionando sobre lo ocurrido, ya culminando la tarde, se nos ocurrió comer y beber algo, allí ingresamos, algunos metros antes de la Vicepresidencia, al Mesón, local muy concurrido por la burocracia gubernamental, pedimos comida y “refresquitos”, ¡Oh sorpresa!, mesas adelante, se encontraban en estado nada sobrio, un grupo de personas entre las que destacaban la presencia de dos personajes de la política robolucionaria, degustando sus 18 años, Carlos López, sí el de Fetrauve, y su mentor político, el diputado Osvaldo Vera. Mientras Carlos López festejaba, las y los trabajadores universitarios protestaban!!!
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