Las primeras manifestaciones de organización del movimiento obrero venezolano, tiene sus antecedentes allá por los inicio del siglo XX, cuando un grupo de trabajadores caraqueños decidieron organizarse y publicar un periodiquito llamado “Unión Obrera” quizás emulando a la “Izkra” (la Chispa) de Lenin, provocando con ello que en 1908 se fundara la Asociación de Obreros y Artesanos del Distrito Federal, convirtiéndose a partir de ese momento, junto a otros grupos organizados, en la primera vanguardia del movimiento obrero revolucionario del país.
Otro salto cualitativo y el de mayor trascendencia histórica, por su contenido antiimperialista, se dio cuando los obreros petroleros decidieron alzarse entre tolvaneras, betumen y los rayos incandescentes del sol, por aquí por estas tierras calientes de Cabimas, San Lorenzo, Mene Grande, Bachaqueros y Mene Mauroa y en el campo de Cumarebo en el estado Falcón en el año 1936; levantándose así las primeras revueltas contra el imperialismo internacional, representado en aquel entonces en las empresas, Caribbean Petroleum Company, La lago Petroleum Company y la Venezuela Oil Company.
Con la formación y desarrollo de los partidos políticos y el transito hacia la democracia representativa, los trabajadores venezolanos se agruparon en las hoy casi desaparecidas, Central de Trabajadores de Venezuela (CTV), Confederación de Sindicatos Autónomos de Venezuela ( CODESA), Confederación General de Trabajadores (CGT) y la comunista Central Unitaria de los trabajadores de Venezuela (CTUV)., organizaciones estas que tuvieron su origen central en el I Congreso de Trabajadores de Venezuela que se comenzó a organizar a mediados de 1936 a través de la Confederación Sindical Obrera de Venezuela y la Asociación Nacional de Empleados (ANDE).
Al margen de la dispersión y conflictividad por el liderazgo político en el movimiento obrero, éste ha adquirido una rica experiencia en su combatividad clasista y anti patronal; de tal forma que también en los cuarenta años cuarto republicano, muchos han sido los combates y jornadas revolucionarias libradas por los trabajadores.
Huelgas y paros obreros como la recordada huelga de los obreros de la Ford allá en Valencia, la huelga de los trabajadores del aseo urbano en Maracaibo, las luchas de los textileros en Aragua, los caucheros en Carabobo y en particular la desarrollada en la empresa Uní royal, las temidas huelgas de los matancero allá en Sidor y la más reciente y no terminada aun conflictividad en Ternium – Sidor, dan cuenta del carácter anti patronal, anti imperialista y revolucionario de la clase obrera venezolana.
Ahora bien, surge la pregunta de Perogrullo, ¿Y cual debe ser la conducta del movimiento obrero y su vanguardia en la revolución bolivariana?, es indudable que la repuesta surgirá del propio movimiento obrero, ya vimos como los trabajadores de PDVSA, en los momentos del paro golpista encararon el saboteo de la principal industria del país y evitaron con ello que el mismísimo gobierno del comandante Chávez cayera.
Es la reciedumbre de su combate lo que hace que los trabajadores de Guayana, prácticamente obliguen al propio presidente a destituir su ministro entregado a la patronal y anunciar la renacionalizacion de esta industria pesada.
Los trabajadores aun no han tomado el sartén por el mango en este proceso, pero hacia ya van, y cuando comencemos a ver que en las empresas básicas del estado y las renacionalizadas se les permita a sus trabajadores el derecho a la cogestión laboral y al control definitivo de su producción , solo entonces estaremos en presencia de una verdadera revolución, mientras tanto solo será un proceso al que todos estamos obligados a acompañar y a colocarlo al servicio de la clase trabajadora y de la sociedad toda
Douglas.zabala@hotmail.com