En efecto el burócrata Cantón lanzó su ataque contra Venezuela, su gobierno y el presidente Hugo Chávez por uno de los más asquerosos, reaccionarios y fascistas periódicos argentinos, Clarín de Buenos Aires, quién no sólo publica el vil escrito de Cantón sino que incluso un fulano caricaturista, Horacio Cardo, hace una miserable y racista caricatura donde el presidente de Venezuela lo pinta como un simio, mancha vil que expresa el odio y la bajeza humana de los directivos de ese panfleto propagandístico que tanto daño le ha hecho al pueblo argentino.
Mostrando la herida que a la oligarquía yanqui y sus cipayos como Cantón le causó el definitivo ingreso de Venezuela al Mercosur, tratando de asociar la salida de Venezuela de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos con una presunta violación de los derechos humanos en Venezuela por parte del gobierno revolucionario, atacando frontalmente a Brasil, Argentina y Uruguay que favorecieron en ingreso venezolano al organismo económico.
“Personaje de los bajos fondos ideológicos”, como lo llamó acertadamente el embajador Roy Chaderton Matos, este traficante de los derechos humanos, socio de los golpistas venezolanos que derrocaron por 47 horas al presidente Chávez el 11 de abril de 2002 y puso a su servicio la Comisión de los Derechos Humanos en vez de proteger al presidente secuestrado, al pueblo asesinado, a la democracia conculcada y a la Constitución eliminada con un decreto autoritario y golpista, se lanza al ruedo como crítico político.
En no buena medida el retiro de Venezuela de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos está asociada a lo que personalmente, como agente y vocero del imperio yanqui, convirtió esa institución, una instancia al servicio, por ejemplo, de los fascistas y golpistas venezolanos, que con más de cien “denuncias”, contribuyeron a convertir la institución en un supra gobierno jurídico cuyas decisiones están por encima de la Constitución Bolivariana y por encima de las leyes venezolanas. Baste mencionar solamente la “defensa” que hizo la CIDH de Leopoldo López, vulgar ladronzuelo de los dineros del Municipio Chacao por lo que le fue inhabilitado por la Contraloría General de la República para postularse a candidaturas de elección popular; conspirador y golpista convicto y confeso que personalmente, junto con Capriles Radonski, conspiraron con los golpistas paraguayos para que vetaran y frenaran el ingreso de Venezuela al Mercosur.
Cínico como pocos, Canton dice en su panfleto que le publicó Clarín: “El reciente anuncio del presidente Chávez de retirarse de la Corte Interamericana de Derechos Humanos y su política de rechazo a las decisiones y supervisión de organizaciones internacionales independientes es una mala señal para la defensa colectiva de los derechos humanos”.
Valdría más bien decir que la fulana comisión interamericana de los derechos humanos por Cantón dirigida, manejada y manipulada por los sectores más torvos y enemigos de los pueblos, ha permitido la violación masiva de los derechos humanos por años y años. Volvamos nuevamente a Venezuela donde por 40 años (1959/1998) los gobiernos oligárquicos y pro imperialistas del bi partidismo, los partidos AD y Copei, violaron los derechos humanos del pueblo venezolano sistemáticamente, mencionemos la masacre y el genocidio del 27 y 28 de febrero de 1989 donde perecieron asesinados más de 5 mil personas por las fuerzas policiales y el Ejército. ¿Dónde estaba la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos?
Pero vamos a acontecimientos más recientes, el golpe de Estado con el presidente Zelaya. ¿Cuántos hondureños asesinó el gorila Micheletti, nombrado “presidente” por el Congreso Nacional hondureño? ¿Dónde estaba Cantón y la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos? ¿Dónde estaba el burócrata cuando meses atrás una minoría de senadores paraguayos derrocó al presidente legítimo de Paraguay, Alfredo Lugo?
En Colombia, bajo el gobierno fascista y ultra criminal de Álvaro Uribe, entre las muchas masivas violaciones de los derechos humanos durante ese asqueroso gobierno, fue público y notorio el descubrimiento de fosas con más de dosmil cadáveres, ¿qué hizo Cantón para que en Colombia se hiciera justicia con ese genocidio?
Cantón tiene la osadía de pretender presionar a los gobiernos que conforman el Mercosur: Argentina, Brasil, Uruguay para que eviten la salida de Venezuela de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. ¿Piensa realmente este enemigo de los pueblos latinoamericanos que los países del Mercosur se sienten a gusto con la OEA y sus organismos que no defienden los derechos humanos de los pueblos latinoamericanos y caribeños sino los intereses de los poderosos? ¿La creación de la CELAG no le dice a nada al tarifado funcionario?
En su miserable escrito Cantón, en un gesto de abierta injerencia en los asuntos internos y soberanos de Venezuela, ridiculiza el ingreso del nuestro país al Mercosur aun cuando reconoce que nuestro ingreso fortalece la institución. “El ingreso pleno de Venezuela al Mercosur, más parecido a una novela venezolana con engaños, traiciones y amoríos, que a los procedimientos formales y protocolares de nuestras democracias, crea un poderoso polo político y comercial mundial”. ¿Qué reflejan esas afirmaciones si no temor al `proceso revolucionario bolivariano?
Desde 1999, cuando el pueblo venezolano aprueba la Constitución Bolivariana, los derechos humanos de nuestros compatriotas quedaron plenamente consagrados y han sido respetados de una manera tan escrupulosa que pocos países en América pueden ostentar un récord de respeto a esos derechos como nunca había ocurrido desde la independencia 200 años atrás. ¿Qué es lo que le preocupa al panfletario y a sus amos imperialistas? Que el ejemplo de Venezuela se convierta en un dominó que se reproduzca masivamente en la mayoría de los gobiernos progresistas y revolucionarios de América Latina y el Caribe. La fulana Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA está guindando sin ser bombillo, su tiempo de vida se acorta en proporción directa a la moribunda vida de la OEA, ministerio de colonias norteamericanos venida a menos. La degradación de funcionarios y burócratas como Cantón y su desaparición de la escena pública la veremos repetirse masivamente. No nos hiere y daña quien quiere, esos maquiavélicos deseos no empreñan.
Cantón es un conspirador más de la legión de subversivos al servicio del imperio yanqui, le ordenaron la tarea de atacar a Venezuela precisamente cuando la campaña electoral entra en su fase crucial, cuando mercenarios y terroristas yanquis y de otras nacionalidades tratan de infiltrarse en Venezuela para subvertir el proceso ante la imposibilidad de Capriles de ganar las elecciones el próximo 7 de octubre. Pero la inteligencia y la seguridad están funcionando y al terrorista que asome la cabeza, ¡duro con él! como acaba de ocurrir.
El
Plan Cóndor mediático está en marcha, ya no es sólo en el Cono Sur como
en los años 70’, es a nivel continental y Europeo y concentrado en
Venezuela, el objetivo imperial a destruir. En vano, las fortalezas de
la revolución bolivariana, antimperialista y socialista son ya
continentales, atacar a Venezuela es encender el más terrible Vietnam
del siglo XXI, así que los yanquis y sus cipayos lo piensen bien.
Con Chávez y la Revolución, todo
Libertad ya para los 5 patriotas cubanos presos en las cárceles yanquis
¡No a la intervención extranjera e imperial en Siria!
humbertocaracola@gmail,com