Esta Ley le da el verdadero poder al pueblo, pero ha sido atacada por la oposición, llamándola “antidemocrática”. Le preguntamos a la gente del taburete del dominó (o la mesita que ya casi se desploma porque se le partió una pata): ¿Quieren más democracia participativa y protagónica?
La MUD, o mesita unida del dominó, donde cada puesto tiene un valor inconmensurable porque cada puesto cuesta una realada en billetes verdes, porque cómo se explica que los candidatos a diputados jamás fueron electos por la base de sus respectivos partidos, sino dispuestos entre cantos de madrugada bajo una lámpara cómplice en un cuarto escondido de la ciudad. ¿Qué valor le da la oposición en el estado Bolívar a su dirigencia? ¿Bajo qué premisa u hoja de servicio fueron escogidos los candidatos de la oposición a la Asamblea Nacional?
¡Ojo pelao, ciudadanos que residen en nuestro estado! ¿Es algo más antidemocrático escoger los representantes del pueblo a la Asamblea Nacional a dedo? ¿Qué valor tiene para los candidatos de la ultra-derecha acérrima a la AN la opinión de su base militante? Yo tengo la respuesta: ¡Ninguna!
Ahora, ellos se dedican a llamar a todo el régimen, antidemocracia, dictadura, que no hay libertad de expresión. Connotados dirigentes, líderes en materia de ruedas de prensa, declaraciones y artículos de opinión, pero sin pueblo, sin electores o seguidores, intentan distorsionar la Ley de las Comunas, que es una deuda del gobierno bolivariano con los Consejos Comunales, en el marco de la opinión de nuestro Comandante Presidente Hugo Chávez Frías cuando nos alerta: “Para que haya revolución, debemos darle más poder al pueblo”.
Las Comunas es la máxima expresión de la organización de los Consejos Comunales. Una Comuna puede estar conformada por varios Consejos Comunales en función de una unidad socialista que resuelve y gestiona soluciones para cada uno de ellos.
Es la máxima expresión de la democracia popular, de la organización interna de los consejos comunales unidos en función de darle sentido geopolítico, estratégico, económico-social, de la comercialización de bienes y servicios bajo una óptica socialista, cuyo único interés no sea ganar-ganar, sino consolidar el esfuerzo de muchos en un sistema que tenga un poder adquisitivo para todos.
Que los bienes y servicios sean accesibles para todos por igual, sin exclusiones de ningún tipo es la más pura expresión de nuestra democracia socialista.
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