Confieso públicamente que las matemáticas nunca fueron de mi simpatía. Traté, sin mucho éxito, de evitarlas, pero los programas de estudio del Ministerio de Educación las incluía en cada año, desde primaria. Llegué a pensar, incluso, que la vaina era personal.
Pero ante acérrimo enemigo no me quedó alternativa que unirme a él. Y así fue. Después de muchas batallas perdidas – que no la guerra- logré llegar al quinto año y obtener mi título de bachiller. De todas maneras “las vendas” que aparecían en mi constancia de notas, hablaban de las tantas heridas sufridas en esa confrontación. Pero gané la guerra.
Curándome en salud – o por lo menos tratando- decidí estudiar periodismo – aunque antes tuve que aprobar la matemática de Estudios Generales- pero ya en campos de batallas más tranquilos, y con la vocación de manifiesto, obtuve la licenciatura de Comunicación Social. Así fue que, parafraseando a Hemingway, dije: “Adios a las Matemáticas”.
De todas maneras tengo que decir que las cuatro operaciones elementales: Sumar, restar dividir y multiplicar las aprendí muy bien, o eso creí, porque las nuevas versiones matemáticas –que he dado por llamar las Matemáticas del Siglo XX- me tienen más confundido que gay en fiesta de lesbianas.
En verdad no hallo que hacer-. Ya consulté a mi solidario libro de Aurelio Baldor, hablé con José Lamus, quien es ingeniero y maneja bien los números, utilicé la calculadora – la personal y la del computador- y en todas partes aparece que 98 es más que 65.
La oposición y su nueva versión matemática me tiene todo confundido. Juraba y perjuraba que 2 es más que uno, en lo elemental, claro. Pero lo que aparece en los diarios , en los medios audiovisuales y en Internet del escualidísmo dicen lo contrario.
Como comentarista deportivo -35 años en la profesión - siempre he considerado que en béisbol 7 x 0; 5 x 0 es paliza. En fútbol 3 x 0 , 4 x 0 es paliza; en baloncesto 98 a 65 es paliza. Incluso, en dominó -aunque cambia el término- se le dice Capote a la paliza de no agarrar un solo punto.
Pero resulta que estos señores –sin la licencia de la Federación Internacional de Matemáticos, si es que existe- han decidido por decreto del desespero que 65 es mayor que 98. Esto, indudablemente, viene a ratificar aquello de que ”Chávez los tiene locos”.
Esta situación de tratar de imponer una matemática bizarra o mundo al revés – como diría Galeano- por parte de la oposición, le permitirá a mi apreciado amigo el ingeniero Nelson Romero Díaz introducir ante la Liga de Béisbol Profesional un recurso de amparo, ya que desde ese punto de vista los “ Navegantes de Magallanes” fueron los campeones de la temporada 2.009-2.010.
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