Bernat Muniesta en su libro: “Nudos Gordianos” ya referido en anterior texto escribió que “…a nadie atacó [Karl] Marx con mayor virulencia que a los anarquistas…Marx…le moteja [a Proudhon] con el insulto más agresivo…[de] ´pequeño burgués´…[transformado en el] más definitorio de todos los posibles insultos en nombre de su socialismo científico…” (Idem, pág. 138) Para continuar expresando que “…la pequeña burguesía no es ni burguesía ni clase obrera, o es ambas cosas a la vez…” (Ibidem) Al tiempo, nos dice que Karl Marx consideraba que cuando Max Stirner hablaba de categorías, éste, no mencionaba ni a los burgueses, ni a los pequeños burgueses, ni a obreros, ni al lumpen-proletariat sino que se expresaba, en cuanto a categorías sociales se refiere, como “…mercaderes, dirigentes, esclavos y rebeldes. Humilla las categorías científicas…” (Idem) escribia Karl Marx. Tremendo lío.
¿Quiénes son de clase media? ¿Está la clase media, a su vez, subdividida en sub-conjuntos del subconjunto social considerando a las “clases sociales” como el conjunto? ¿Cuáles son los paradigmas que nos permiten definir a la clase media? ¿Estos paradigmas se sustentan en conceptos de la economía, ideología, etno-antropológía, sociología e, inclusive, sus religiosidades?
Regresamos a JVR cuando nos dice, refiriéndose a los desarrollos históricos del 11A que “…por cierto, caigo en cuenta que nada se ha escrito –acaso alguna anécdota perdida en el contexto de aquella situación- sobre lo que sucedió en los pliegues oscuros de esos momentos críticos…” (JVR, Idem). Para continuar precisando que “…la oposición se lanzó como fieras a la caza de los chavistas; buscó en las barriadas…” (Ibidem)
Las precisiones de JVR nos permiten agregar algún comentario personal en el marco del 11A. Días previos al día del “Golpe del 11A” asistimos a concentraciones y marchas de aquella masa social que se expresaba contra, puntualmente, Hugo Rafael Chávez Frías acusándolo de cualquiera de los epítetos que se siguen repitiendo después de “algunos años”; es decir, que las tesis de que la oposición no ha cambiado en su fundamental discurso y, quizás, sus objetivos fundamentales, es decir, en la estrategia sustentada en la táctica de la salida de Chávez Frías del Poder y del poder criollo siguen vigentes. Pero lo que nos incumbe es cuál era la composición social de aquella masa humana que se concentraba, que marchaba, que gritaba, que se auto-flagelaba, que se exorcizaba. Quizás lo expuesto por JVR que nos hemos permitido escoger refiriendose a que aquella oposición que durante el desarrollo del golpe de estado se dedicaron a buscar “…como fieras…” y a la “…caza de los chavistas…” Ello nos permite, subjetivamente, aceptar que aquella masa golpista ya tenía en mente no solo buscar a los chavistas sino a ejercer los ejemplos históricos que el propio JVR nos ha referido y nos los hemos resaltado en las realidades de la España franquista y el Chile fascistas de Pinochet; con ello queremos precisar que el concepto de “lucha de clases” lo practican, con precisión quirúrgica, las derechas nacionales e internacionales, in extremis, “sin que le quede nada por dentro”. Entonces ¿son los pobladores de las barriadas criollas de “clase media”? Lo que nos obliga a inquietarnos con la pregunta de ¿cómo se comportan los pobladores de las barriadas frente al consumismo? Y vamos más allá con nuestras dudas: ¿Con cuál baremo analizaremos las “delicias capitalistas” del consumismo y cómo afecta el consumismo en los diferentes sectores sociales de las sociedades citadinas y no citadinas de Venezuela?
Es cierto, nos los hemos
mareado evitando “mojarnos” (expresión muy castiza) con la pregunta
del título. Nos vamos a permitir cambiarlo por la inquietud sin respuesta
de ¿podrían expresarse las clases madias, políticamente, por ejemplo,
como clases que se comprometieran con un proyecto nacionalista, humanistas,
socialista? Y si no ¿por qué no se adscribirían a esas propuestas
de progreso nacional?