Es una importante demostración de la posibilidad de llegar a acuerdos si el debate se conduce de manera que nadie quede excluido, que se escuchen todas las opiniones...

A pesar de la campaña en contra que se desató apenas se conoció el texto sobre la ley del deporte, después de un intenso debate, en el seno y fuera de la Asamblea Nacional, tales eran las contradicciones y opiniones adversas, así como la relevancia de sus interlocutores, fue aprobada por unanimidad. Creo que es la primera ley que aprueba esta AN sin votos en contra. La gente vinculada al deporte debemos estar satisfechos porque una materia como esa hubiese logrado el apoyo de las bancadas del gobierno y de la oposición.

Es una importante demostración de la posibilidad de llegar a acuerdos si el debate se conduce de manera que nadie quede excluido, que se escuchen todas las opiniones, y que hubiese habido, como en efecto la hubo, la voluntad de hacer concesiones para recibirlas de la parte opuesta.

Uno de los primeros foros que organizamos en Últimas Noticias precisamente abordó el tema de este proyecto, y allí fue posible escuchar opiniones favorables y reservas respecto, por ejemplo, al derecho de los atletas a elegir y a ser elegidos. En la ley quedó consagrado el principio, y corresponderá a las federaciones introducir los cambios necesarios en sus estatutos para hacerlo viable. No son lo mismo federaciones como las del beisbol y del fútbol, que tienen centenares de miles de jugadores afiliados, que las de esgrima o boxeo. Si en estas pudiera entenderse la votación universal, en las anteriores tendrán que establecer limitaciones.

La materia mas controversial fue la del Art. 66 (hoy 68), sobre el patrocinio de las empresas privadas, que aun después de aprobado, necesitó de últimos esfuerzos, en reuniones especiales de alto nivel, entre el ministro Rodríguez y los dirigentes de las ligas profesionales, en busca de coincidencias, que permitieron llegar al acuerdo final.
El gran ganador será el deporte todo.

Omisiones del proyecto. El proyecto de Ley de Comunicación para el Poder Popular (Lcpp) presentado el jueves con el apoyo de 26.821 firmas es un documento inédito en la legislación comunicacional venezolana, y eventualmente, de América Latina. Recoge una realidad que se ha desarrollado en los últimos diez años, y comenzará discutirse en breve.

Una primera lectura me mueve a formular estas interrogantes: ¿Cuántas de las 26.821 personas que lo presentaron participaron en la redacción del anteproyecto del 3 de abril? ¿Cuántas estuvieron de acuerdo en eliminar el Art. 13 que obligaba a cada entidad estatal o municipal, a destinar 50% de su presupuesto de publicidad a los medios comunitarios?
Este proyecto tiene dos omisiones inexplicables. En ninguna parte aparecen los consejos comunales, e incluso los eliminaron del Art. 2 del anteproyecto de abril. Si son órganos tan importantes en la formación de una sociedad participativa y en la creación de las comunas, ¿cómo es que no fueron valorados ni para hacer la contraloría social? Apenas figuran en el Art. 5, pero sin atribuirle ninguna función. Honestamente, no entiendo esa omisión. Supongo que los consejos comunales pedirán que les sean asignadas, al menos, las funciones de contraloría social previstas en el Art 11.

La otra omisión es que en ninguna parte aparece la palabra ética. ¿Cómo se va a legislar sobre los medios comunitarios y alternativos sin que la ética periodística, ni la ética publicitaria, ni las de los medios, aparezcan en ninguna parte? ¿No están copiando las carencias del periodismo que se observa en muchos medios, así como de la publicidad comercial? ¿Los mensajes y particularmente los informativos que se transmitan por esos centenares de medios podrá hacerse sin atender a los mínimos requerimientos éticos? Ni siquiera la veracidad, el derecho a réplica, principios constitucionales, así como otros contenidos en códigos universales, serán respetados por esos medios?

Tiene tiempo para llenar esas omisiones.

Dinero.com, de Bogotá, incluye este comentario: "En lo que respecta a las exportaciones hacia el vecino país, las sospechas comenzaron en voz baja, pero poco a poco crecieron, al punto que hoy muchos de quienes trabajan en comercio exterior aceptan que el gobierno de Chávez tenía razón al demorar los pagos pendientes con exportadores colombianos". Ya se pagaron 880 millones de dólares, pero unos 600 están bajo investigación en la Fiscalía.

En menos de un mes, el presidente Chávez hizo tres advertencias a la Fuerza Armada. Primero dijo que ratificó el Alto Mando Militar para preservar la unidad de la FAN; después, en ocasión del cumpleaños 74 de la GNB, reiteró su llamado a la unidad de la FAN, y, apenas el viernes, se refirió a quienes calientan las orejas de oficiales activos. Se supone que bien activos estarán en la DIM y otros servicios de inteligencia de los componentes.

Uno no entiende cómo es que la investigación contenida en los dos tomos de De Ocumare a Segovia (Juicio militar a los expedicionarios de 1806), que introduce cambios significativos en la historia de las expediciones de Miranda a Ocumare y a La Vela de Coro, sigue prácticamente desconocida, no obstante haber sido financiada por el Estado venezolano. Tantos libros que editan las instituciones gubernamentales, y desde hace años sigue inédito el tercer tomo.

El propio José Vicente Rangel se impresionó con las respuestas del presidente Chávez en una entrevista especial, de 90 minutos, donde se muestra como alguien que ha interiorizado bien su enfermedad, desde el momento en que Fidel Castro le sorprendió: "¡Tienes cáncer!". Parece haber cambiado, y seguramente se verá en su forma de gobernar el país y de dirigir el partido. ¿Cuáles pudieron ser los tres momentos decisivos en su vida? Podrá verse ahora a las 9 am en Televen y esta noche en VTV y Antv.

De ser cierta la versión del periodista chileno Paul Walter, el movimiento de los indignados tiene su origen en el libro Indígnate, de Stepehan Herd, veterano de la resistencia francesa. En esta resistencia y llamado a la insurrección hay un objeto principal: los medios de comunicación. "Convoquemos a una verdadera insurrección pacífica contra los medios de comunicación de masas". Sin embargo, si es así, las agencias se han ocupado de silenciarlo, tal como lo hacen con las marchas sincronizadas que terminarán en Bruselas, sede de la Unión Europea.