Estamos viviendo la arremetida más fuerte de los últimos tiempos contra las Culturas Populares, arremetida que no debe verse como un hecho puntual y aislado sino como una expresión de las políticas capitalistas y proimperialistas que adelanta la derecha venezolana (incluyendo la derecha endógena) contra los sectores revolucionarios. Han ocurrido cosas muy graves que han sido presentadas como sucesos normales. El Presidente Chávez nombró a José Antonio Abreu director de la Orquesta Bolivariana de Unasur; Dudamel y la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela se preparan para agasajar a la ultraderecha mayamera en la entrega anual del Latin Grammy, y por si fuera poco, el Sistema Nacional de las Culturas Populares se ha revelado como un ente excluyente e ineficiente...
En los últimos días he escrito tres artículos que recogen muchas de las denuncias y preocupaciones que mantienen en estado de alerta a las personas que están relacionadas con el ámbito de las Culturas Populares. Más adelante conseguirán los enlaces.
Como complemento de esos tres artículos quiero difundir aquí otras reflexiones político-culturales, no sin antes aclarar que estos comentarios los publiqué inicialmente en una conocida red social, y que han contado con el apoyo de mucha gente y al mismo tiempo con la indiferencia de los servidores públicos que trabajan en las instituciones culturales del Estado.
Estas son las reflexiones:
1
Estamos haciendo lo que el Sistema Nacional de las Culturas Populares debería hacer pero no hace. No dejemos que nos apabullen con su silencio. Yo he utilizado frases muy fuertes en mis reflexiones, frases que quizás hayan confundido a algunas personas pero que también han motivado a mucha gente. He ido elevando el tono de mis señalamientos en la misma medida en que el chavismo oficial ha ido invisibilizando las demandas populares. Dicen que ningún gobierno ha hecho tanto por la Cultura Popular como éste, pero nadie dice que ningún gobierno ha recibido tanto apoyo de la Cultura Popular como el gobierno actual. Si sólo decimos lo primero, caemos en la sumisión; pero si decimos las dos cosas, lograremos una relación horizontal y digna con las instituciones. Otra verdad inapelable y demostrable es que este gobierno ha apoyado más al eurocentrismo musical y a la farándula musical que a las Culturas Populares, violando de esta forma el artículo 100 de la Constitución Nacional. Ya no causa ningún impacto la frase de siempre: "primero ganemos las elecciones y luego vendrán los cambios". Eso tenía sentido hace algunos años, ahora debemos invertir la ecuación: "que vengan los cambios pa' que se puedan ganar las elecciones".
2
Estábamos luchando por transformar el Ministerio del Poder Popular para la Cultura y ahora parece que estamos luchando por transformar un departamento de ese Ministerio. Nos arrinconaron, pero nos quieren hacer creer que se hizo justicia. Cada uno de nosotros debe llevar este debate a su entorno político-cultural inmediato. Hay que escuchar a los que no tienen ni quieren tener acceso a estas redes sociales. A nuestros portadores patrimoniales (es decir: a nuestras viejas cultoras y a nuestros viejos cultores) hay que reivindicarlos y apoyarlos de todas las maneras posibles. A las niñas y a los niños hay que garantizarles espacios para la formación. Esos son los grupos que deben gozar de privilegios: nuestras viejas, nuestros viejos, y nuestras niñas y nuestros niños. A las personas jóvenes y a las personas adultas que están relacionadas con la Cultura Popular hay que apoyarlas, pero no con criterios faranduleros. Al Sistema Nacional de las Culturas Populares (Sistema donde también hay mucha gente extraordinaria) hay que obligarlo a debatir, y no estoy hablando solamente de debatir asuntos laborales, sino de debatir asuntos sociales y políticos. Al Sistema Nacional de las Culturas Populares hay que obligarlo a pronunciarse, y no estoy hablando solamente de pronunciamientos laborales, sino de pronunciamientos sociales y políticos.
3
El Sistema Nacional de las Culturas Populares fue lanzado por el Presidente Chávez el día 28 de febrero de 2011. Meses más tarde -en julio de 2011- Fidel Barbarito (Secretario Ejecutivo del mencionado Sistema) declaró: “Ya tenemos unas 200 agrupaciones y unas 110 individualidades inscritas”. (Fin de la cita). Yo razoné el asunto de la siguiente manera: si el total de inscritos es de 310 -sumando agrupaciones e individualidades- y tomando en cuenta que Venezuela tiene más de 330 municipios, podemos decir que la convocatoria ha sido un fracaso: NI SIQUIERA UN INSCRITO POR CADA MUNICIPIO. Surge entonces la pregunta: ¿Cómo es posible que un Sistema que fue lanzado en cadena nacional por el gobierno no haya logrado movilizar a los Cultores? La respuesta para mí era y es obvia: los Cultores no iban a entusiasmarse con una propuesta que nació de la mano de una burocracia ineficiente que se ha caracterizado por su desprecio hacia la Cultura Popular y por sus irregularidades administrativas. Después de tanto maltrato, lo menos que esperaban y esperan los Cultores es una disculpa y una rectificación por parte del Ministerio del Poder Popular para la Cultura.
4
Todas estas cosas se las he comentado con total franqueza a Fidel Barbarito, quien me ha escuchado con respeto y atención en dos o tres oportunidades. Conozco a Fidel y también a varios de los Coordinadores del Sistema Nacional de las Culturas Populares. A todos ellos les he hablado con claridad, manifestándoles cara a cara las mismas cosas que he manifestado a través de mis artículos. No los culpo a ellos por lo que hicieron sus antecesores ni tampoco los culpo por todos los inconvenientes que tiene el nuevo Sistema, entiendo que les entregaron un carro nuevo pero con el motor fundido. Ahora bien, sí los responsabilizo por el silencio que reina en este momento. Abrir el debate y facilitar la participación de la gente es vital, eso lo pueden hacer y deben hacerlo.
5
Si los Cultores y las Cultoras no se inscriben en el Sistema Nacional de las Culturas Populares todo terminaría convertido en un gran fracaso, pero si la mayoría de los Cultores y las Cultoras se inscriben, entonces quedaría demostrado que los recursos con que cuenta el nuevo Sistema no alcanzan para nada. Es un callejón sin salida. Lo que aprobaron parece una cifra grande, pero en realidad es una limosna. El grueso de los recursos están en manos de Abreu y de los Comités de Ferias. Sin redistribución de recursos no habrá Revolución Cultural. El problema es estructural.
Enlaces:
Mensaje para la gente comprometida con las Culturas Populares:
http://www.aporrea.org/poderpopular/a131796.html
La Orquesta Bolivariana de UNASUR:
http://www.aporrea.org/actualidad/a133092.html
El Sistema Nacional de las Culturas Populares te invita a hacer silencio:
http://www.aporrea.org/actualidad/a133149.html
Notas finales:
Está circulando la noticia de que José Antonio Abreu será postulado al Premio Nobel de la Paz. Ese “detalle” me obliga a publicar otro enlace. Aquí podrán leer un artículo que escribí hace varios meses acerca de ese tema: http://www.aporrea.org/actualidad/a111581.html
Seguiremos informando. No olvidemos que: Estamos viviendo la arremetida más fuerte de los últimos tiempos contra la Culturas Populares, arremetida que no debe verse como un hecho puntual y aislado sino como una expresión de las políticas capitalistas y proimperialistas que adelanta la derecha venezolana (incluyendo la derecha endógena) contra los sectores revolucionarios.